Compras web en el exterior marcaron “una nueva tendencia del comercio que continuará creciendo”

Importaciones > En 2016 alcanzaron los US$ 7.387 millones

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Según datos de Uruguay XXI, las importaciones de bienes, sin considerar petróleos y derivados, registraron una cifra 13,6% inferior en su comparación interanual en 2016 y los principales bienes importados sufrieron retracciones. En tanto, desde la Asociación de Despachantes de Aduana de Uruguay, notaron un crecimiento exponencial de compras internacionales por parte de personas físicas y opinaron que aún quedan trámites para incorporarse a la Ventanilla Única de Comercio Exterior.

Según la Organización Mundial del Comercio (OMC), los negocios internacionales de bienes tendrán un crecimiento de entre el 1.8% y el 3.1% durante 2017. El año pasado creció un 1,7%, lo que implicó que 2016 fuese el segundo año de desaceleración del comercio global y el de menor incremento luego de la crisis económica internacional de 2009, año desde el que no se volvió a registrar un crecimiento mayor al 3%.

En Uruguay, en 2016 las importaciones de bienes, sin considerar petróleo y derivados, alcanzaron los US$ 7.387 millones. Según datos de Uruguay XXI, esta cifra es un 13,6% inferior en comparación interanual. Los principales productos importados sufrieron retracciones: los vehículos lo hicieron un 20%, los insumos para molinos eólicos un 30%, y la vestimenta un 10%.

Frente a esto, se encuentra la reducción anual de 7,3% de las exportaciones en 2016. Durante el año pasado, Uruguay recibió US$ 8.301 millones a causa de sus ventas al exterior. Las retracciones de las compras externas tuvieron tasas menores que las exportaciones.

Con US$ 542 millones, los vehículos constituyeron el principal producto de importación de nuestro país. Dentro de ellos, el 59% correspondió a automóviles, el 30% a camiones y el restante 11% a vehículos.

Los insumos para los molinos eólicos, subraya Uruguay XXI, totalizaron US$ 477 millones de inversión, y es de esperar que durante 2017 esta cifra se reduzca, dado que la capacidad instalada de generación eólica ya está colmada.

Las importaciones del sector plástico configuraron US$ 444  millones el año pasado,  las compras de vestimenta y calzado superaron los US$ 400 siendo China el mayor proveedor de más de la mitad de lo adquirido, mientras que el quinto rubro fueron los teléfonos celulares, con cifras del 4% superiores en comparación interanual, siendo el nombrado país asiático y Estados Unidos los principales mercados de compra.

Antonio Carámbula, director ejecutivo del instituto Uruguay XXI señaló a CRÓNICAS que el enlentencimiento de la economía uruguaya sufrida en el último tiempo comezó a revertirse en noviembre pasado y en lo que va del año se registra un incremento positivo del 5%.

Orígenes

Si se tienen en cuenta los orígenes de las compras de Uruguay, es China quien tiene la mayor participación con un 21% del total con vestimenta y celulares, aunque es de señalar que en 2016 las compras provenientes desde este país descendieron un 12% si se lo compara con el año anterior.

Brasil, donde resaltó la compra de vehículos, y Argentina, donde se destacó la adquisición de plásticos, ocupan el segundo y tercer puesto de los mercados de orígenes.

En tanto, los países que mostraron una incidencia positiva fueron Egipto, con la importación de urea para uso agropecuario, Marruecos, al que se le compraron fosfatos para fertilizantes, y España, al que se le adquirió los insumos para los molinos eólicos.

Compras de personas físicas

En Uruguay, al igual que en todo el mundo, la compra directa de productos internacionales por particulares se ha incrementado exponencialmente, afirmaron desde la Asociación de Despachantes de Aduana de Uruguay (ADAU) a CRÓNICAS.

“En nuestro país, a partir de la norma que estableció la franquicia de compra a través de empresas de correo expreso por un valor de hasta US$ 200, se abrió una posibilidad que, a nuestro criterio, marcó una nueva tendencia del comercio que continuará creciendo en el futuro”, alegaron.

Asimismo, expresaron que una de las preocupaciones de las aduanas a nivel mundial es la subfacturación de los objetos,  abonar menores tributos al ingreso del país.

Legislación

Uruguay cuenta con un procedimiento eficiente en lo que se refiere a su política de importaciones, calificaron autoridades de ADAU. En tal sentido, observaron que se han establecido trámites ágiles en muchas de las oficinas que intervienen a través de la incorporación de la Ventanilla única de Comercio Exterior (VUCE), lo que generó una solución en cuanto a las demoras de organismos intervinientes en el control de los productos importados. “Aún quedan muchos trámites a incorporarse en la VUCE pero tenemos la certeza que se va por el camino acertado”, dijeron.

Por otra parte, el nuevo Código Aduanero uruguayo ha establecido un nuevo marco jurídico que aporta mayor certeza y se adecua a la realidad del comercio actual, expusieron desde ADAU.

Venezuela fuera de la mesa

Consultado respecto a la incidencia de los problemas políticos de los países de la región con los cuales se mantiene una relación de comercio exterior, Carámbula aseveró que Brasil es el segundo país de destino de nuestros productos, y que lo ha seguido siendo a pesar de las dificultades que presenta la economía brasilera, aunque reconoció que la estabilidad política deviene en problemas económicos.

En este sentido, expresó: “En el caso de Venezuela, donde la situación está complicada desde hace años, te diría que ya dejó de ser algo que nosotros tengamos mucho en cuenta y desde hace unos años es un tema que no lo tenemos arriba de la mesa”.


Acuerdos bilaterales

Carámbula dijo, asimismo, que es clave mejorar el acceso de los productos al mercado a través de acuerdos. “Nosotros hoy estamos pagando aranceles cercanos a los 200 millones de dólares para el ingreso de los productos, o sea que precisamos mejorar acuerdos bilaterales, porque es importante”, declaró.

En esta línea, mencionó que en el caso de la carne, se pagan cerca de US$ 200 millones de aranceles, siendo la mayoría para la Unión Europea y China.

“Si nosotros logramos que la carne ingrese dentro del acuerdo comercial con la Unión Europea, y lo mismo en el caso de China, seguramente vamos a estar en mejores condiciones de accesos a nuestros productos”, calificó.