Economía global podría sufrir una «recesión a finales de este año o durante 2020», según Paul Krugman

Sin armas > Falta de capacidad de respuesta es “la principal preocupación”

El Nobel de Economía, Paul Krugman aseguró que existen grandes posibilidades de que la próxima recesión económica llegue a finales de este año o el próximo, y explicó que hay  una amplia cantidad de factores que están pesando en esa dirección. En la misma línea se expresó su colega, Nouriel Roubini, quien alertó sobre la sobrevaloración de activos en EEUU, las tensiones comerciales, el Brexit y la política monetaria de la Fed.

Nunca falta quien busca vaticinar la llegada de la próxima crisis económica. Hay muchos expertos que realizan pronósticos apocalípticos, algunos se cumplen, la mayoría no, pero en estos momentos de gran incertidumbre internacional, no son pocas las voces que aventuran un futuro crítico para la economía global.

Pero cuando quienes advierten que la próxima crisis podría estar a la vuelta de la esquina son dos profesores de economía que ya habían vaticinado la pasada crisis financiera de 2008, es bueno comenzar a “abrir los ganchos”.

Paul Krugman es profesor de Economía en la Universidad de Princeton y fue premiado como Nobel de Economía en 2008 por su análisis de los patrones de comercio y la localización de la actividad económica, pero por entonces era destacado por ser un ferviente crítico de la política económica llevada adelante por el entonces presidente estadounidense George W. Bush.

En declaraciones recientes, Krugman aseguró que existen grandes posibilidades de que la próxima recesión económica llegue a finales de este año o durante 2020, según informó el portal web El Economista. A su entender, la desaceleración del crecimiento global o el aplanamiento de la curva de tasas en Estados Unidos están dejando entrever la cercanía de la próxima crisis.

Al ser consultado sobre lo que deben esperar los inversores en los próximos meses, Krugman aseguró que «existe una probabilidad importante de que tengamos una recesión a finales de este año o durante el próximo año».

Varios factores

Krugman explica que es poco probable que «un solo evento» sea el desencadenante, puesto que existe una amplia cantidad de factores que están pesando sobre la economía global, los conocidos como riesgos a la baja que han ganado fuerza en los últimos meses, siendo «la Eurozona el lugar que hoy parece realmente más cercano a sufrir una recesión».

Por su parte, en EEUU, la reforma fiscal de Donald Trump tuvo un efecto positivo sobre el crecimiento temporal que se está desvaneciendo: «No ha sido muy efectiva», asegura Krugman, que además cree que «la burbuja parece que podría estar desinflándose».

Pero para el  experto, “la principal preocupación es que no tenemos una respuesta efectiva si las cosas se ralentizan». A su entender, los bancos centrales no podrán reaccionar bajando las tasas de interés en cinco puntos porcentuales porque el precio del dinero se encuentra hoy cerca del 0% en gran parte de los países desarrollados. Al mismo tiempo, la política fiscal tendrá un recorrido limitado dados los elevados niveles de deuda pública. En países como EEUU, el nivel total de endeudamiento público supera el 100% del PIB, mientras que en los anteriores escenarios recesivos la deuda estaba entre el 50 y 60% del PIB. En este aspecto, la situación de Europa es aún más compleja.


Roubini: «La desaceleración sincronizada podría estancar el crecimiento”

En la misma dirección de Krugman se expresó Nouriel Roubini, conocido popularmente como “Dr. Doom” (doctor catástrofe) al ser uno de los primeros en vaticinar la crisis financiera de 2008. El profesor de Economía de la Universidad de Nueva York afirmó en Project Syndicate que cree que este año será «mediocre para la economía global», y estima que «la desaceleración sincronizada de 2019 podría llevar a un estancamiento del crecimiento global y una fuerte caída del mercado en 2020».

Roubini reconoce que los riesgos son varios: acciones sobrevaloradas en EEUU, las tensiones comerciales, un Brexit duro o que la Fed siga subiendo tipos. A su entender, si alguno de estos riesgos se materializa, la economía y los mercados lo sufrirán.