“Costa Urbana es un proyecto que nace de la búsqueda de centralidad y planificación”

Alberto Gossweiler, gerente general de Costa Urbana


Ubicado en un poblado de jóvenes activos, deportistas en su mayoría, que disfrutan del paseo y el encuentro, surgió, hace cinco años, Costa Urbana Shopping. Una propuesta que quería ser un centro cívico, pero sus responsables la transformaron en mucho más que eso. Ubicado en una zona urbana en constante crecimiento, nació de la necesidad de dotar a la Ciudad de la Costa de un punto de encuentro ordenado y centralizado.

Por Federica Chiarino | @FedeChiarino

Todo pueblo tiene una plaza central, rodeada de oficinas públicas donde realizar sus trámites, a veces la intendencia. Algunos cuentan con un centro comercial. Ciudad de la Costa no tenía su plaza ni su centro, sino varios lugares dispersos por todo su territorio. Para realizar trámites o ir de compras, usualmente sus habitantes debían trasladarse a Montevideo. La Comuna Canaria detectó la necesidad de dotar al poblado de un centro cívico. Alberto Gossweiler, gerente general de Costa Urbana, y su equipo, dijeron «retruco». No querían solo un centro cívico, sino un centro a secas. Eso implicaría la mencionada plaza central, el centro comercial, los trámites, entretenimiento, gastronomía: todo en un mismo lugar.

«De ahí surgió la idea de Costa Urbana Shopping. Es un proyecto que nació de esa búsqueda de centralidad y planificación. Es el lugar de encuentro que tienen hoy las familias de la zona. Un lugar para el entretenimiento, las compras, los trámites, el paseo», explicó Gossweiler, en diálogo con Empresas & Negocios. El empresario aseguró que el shopping de Ciudad de la Costa ha alcanzado todos los objetivos planteados desde el inicio. Dentro de la variada oferta de shopping y centros comerciales que ofrece el país, Costa Urbana encontró su diferencial en la fusión de un centro cívico destinado a trámites con locales de diversos rubros, una plaza de comidas con una variada oferta gastronómica, una plaza en su exterior, salas de cine y entretenimiento para los más chicos. Gossweiler define su creación como un factor de “integración”, donde todo converge.

En el año 2016, Costa Urbana remó a contracorriente. Mientras casi todo el país se dirigía hacia una gran recesión económica, el centro comercial continuó creciendo y consolidándose. “Costa Urbana no ha perdido su capacidad de crecimiento, producto de que es un shopping nuevo en una zona donde todas sus carencia eran terreno fértil para su desarrollo. Fundamentalmente, porque la gente nos ha adoptado como su lugar”, explicó Gossweiler.

“Costa Urbana es un proyecto que nace de esa búsqueda de centralidad y planificación. Es un lugar de encuentro que tienen hoy las familias de la zona”

Al cierre del año, el balance fue positivo. En el primer semestre, la actividad comercial del shopping fue fuerte. En el segundo no tanto. Según el ejecutivo, influyó un invierno particularmente extenso. Sin embargo, la gráfica continuó hacia arriba. Los rubros vestimenta y calzado fueron los principales responsables de ello. Electrónica y electrodomésticos, que habían registrado una caída en años anteriores, tuvieron un pequeño repunte. También creció todo lo vinculado a gastronomía, dentro de parámetros razonables.

Pero el 2016 no solo sirvió para crecer, sino para concretar dos importantes inversiones que el shopping ya está llevando a cabo, y que se podrán ver en este 2017. La primera de ellas es la instalación de Renner, una importante marca de ropa de origen brasileño. Tras una profunda investigación de mercado, la marca eligió a Costa Urbana como uno de los puntos donde desembarcar en Uruguay, tras detectar su tendencia al crecimiento constante. Será un local con una superficie de 1.500 metros cuadrados, superior al promedio de tiendas de ropa de Uruguay. Se ubicará en el sector sur del shopping, sobre un parking abierto, donde ya se está realizando una ampliación para poder darle su espacio.

La segunda inversión es, quizás, más novedosa, ya que se aparta de lo que es el concepto tradicional de un centro comercial. Costa Urbana incorporará el fitness center Via Aqua, en una superficie que ronda los 2.000 metros cuadrados. “Lo que sucede es que está cambiando un poco el concepto de tradicional en un shopping. Hoy los hábitos y lo que espera la gente en cuanto a su experiencia de ir a un lugar de estos, va un poco más allá de lo que es la simple compra de una prenda de vestir”, opinó Gossweiler.

En esa línea, se espera que en junio el shopping ya cuente con su centro para la salud física y el deporte. La elección de Costa Urbana para la nueva sede de Via Aqua radica en que es una zona con bastante presencia de gimnasios. En el estilo de vida de los habitantes de Ciudad de la Costa, el ejercicio y el deporte juegan un rol fundamental. Gossweiler y los responsables de Via Aqua coincidieron en que el lugar merecía una opción con infraestructura de primer nivel. La obra ya está en marcha y hay grandes expectativas, tanto del lado de sus responsables como de los potenciales consumidores.

“Estamos trabajando en poder satisfacer a nuestros clientes y brindarles una mejor propuesta, que va en la línea de la integración”

En total, estas dos grandes inversiones suman entre US$ 5 millones y US$ 6 millones de dólares. La cifra incluye ampliaciones, infraestructura, mano de obra y todo lo necesario para su exitoso desarrollo.

Costa Urbana se encuentra también en una fase de reconfiguración de su oferta gastronómica. La plaza de comidas fue relocalizada, para integrarse con la sección de entretenimiento: salas de cine y maquinitas para niños. Este cambio sigue la línea del pilar integrador de Costa Urbana, para generar una perfecta sintonía entre todos sus rubros, donde cada uno de ellos forme parte de un todo.


El desafío de satisfacer a un consumidor inteligente

Para Gossweiler, el consumidor uruguayo no actúa guiado por impulsos. Se mueve con cautela, piensa, compara y, en base a eso, decide. Valora la calidad, la buena atención. “Los shopping, que estudian una propuesta comercial, deben estar muy atentos y ser cuidadosos en ese sentido”, opinó el empresario.

Para la compra de bienes, ese consumidor inteligente cuenta con nuevas opciones. Ya no tiene, necesariamente, que ir al shopping. Al igual que en todos los centros comerciales, en Costa Urbana el comercio electrónico ha entrado con fuerza, captando la atención de muchos consumidores. Frente a la modalidad tradicional, corre con ventaja por ofrecer una compra desde la comodidad del hogar y desde cualquier dispositivo con acceso a internet: celulares, tablets, computadoras. Sin embargo, este tipo de comercio aún no satisface la necesidad de probarse las prendas, poder tocar sus texturas y decidir con más herramientas.

Costa Urbana, en conjunto con otros shopping, ha desarrollado una herramienta web para responder a este nuevo canal de comercio. La plataforma permite acceder online a muchas de las ofertas que brindan las tiendas de los shopping asociados. “Lógicamente, es un canal que hay que desarrollar e incorporar”, reconoció Gossweiler.

En esta nueva modalidad, influye también el concepto en el que el gerente general de Costa Urbana enfatiza una y otra vez: la reconfiguración del modelo tradicional del shopping. Ya no puede ser un simple lugar de compras, ya que para ello existe el comercio electrónico. En su opinión, los shopping deben incorporar más que eso:entretenimiento, paseo, gastronomía, y todo lo que, hasta ahora, internet no puede ofrecer competencia.