Durante 2016 se perdió el equivalente a todas las exportaciones del año 2002

Lácteos » GOBIERNO ESTIMA CRECIMIENTO DE 35% EN VENTAS EXTERNAS DE LÁCTEOS

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Las proyecciones del gobierno indican que las exportaciones, durante 2017, aumentarán 5,7%, según datos presentados por la Unión de Exportadores del Uruguay. Aun así, desde la gremial se entiende que los problemas de competitividad persisten, principalmente por inconvenientes en las regulaciones laborales, y el ambiente macroeconómico. Para llegar al punto de equilibrio del tipo de cambio real, “es necesario que el dólar suba varios puntos por arriba de la inflación durante los siguientes años”, expresó la economista de la gremial, María Laura Rodríguez.

La diferencia entre lo que se exportó en 2015 y 2016 representa al total de las exportaciones del año 2002: 2300 millones de dólares. Este dato se desprende de la evaluación presentada por la Unión de Exportadores del Uruguay (UEU), el pasado miércoles, de mano de la responsable de asesoría económica de la gremial María Laura Rodríguez. En total, durante 2016, las colocaciones sumaron U$S 11.300 millones, por lo que se registró una caída del 6,7%. El descenso fue mayor en la exportación de bienes (7,8%), que en servicios (3,7%). En este sentido, Uruguay exporta hoy un 50% menos servicios de transporte, que hace dos años.

En cuanto a los productos exportados durante 2016, la carne, la celulosa, la soja y los lácteos representan más del 50% de las colocaciones en el exterior, aun cuando la soja y los lácteos mostraron una caída en las exportaciones durante 2016. China y Brasil continúan como los principales destinos de las exportaciones uruguayas, mientras que, en tercer lugar, con el 7% de las colocaciones durante el año pasado, aparece Holanda. Según la economista de la UEU, esto se explica por la importancia de los puertos holandeses en el ingreso de productos a Europa, lo que no quiere decir que el país bajo sea un comprador importante para Uruguay.

Según estimaciones del gobierno, el 2017 será un año de recuperación para los sectores sojeros y lácteos, en los que se espera un repunte de las exportaciones de 25% y 35%, respectivamente. A su vez, se estima que las exportaciones de carne y celulosa crecerán 1% y 2%, y continuarán en el primer lugar de las colocaciones. En total se espera que las exportaciones crezcan 5,7% durante este año. Al cierre del primer trimestre del año, las exportaciones uruguayas muestran un crecimiento de 3,4% (ver recuadro).

En términos de competitividad, según el Foro Económico Mundial (WEF por sus siglas en inglés), Uruguay se encuentra en el lugar 73 de 178 países y se ha mantenido en los últimos dos años. En este sentido, la información del WEF muestra que Uruguay se encuentra con problemas en la eficiencia del mercado laboral, y en el ambiente macroeconómico dado por la inflación, aunque muestre síntomas de mejora, el déficit fiscal y el tamaño de la deuda.

El desempleo, por su parte, se ha mantenido “relativamente estable”, aunque el empleo “viene a los saltos”, estimó la economista. En este sentido la encuesta de expectativas realizada por el Banco Central del Uruguay muestra cómo se espera un mayor crecimiento del PIB que el crecimiento del empleo: “Esto quiere decir que el aumento del PIB se da en sectores que no crean empleo, como por ejemplo la generación de energía o las telecomunicaciones. Si bien se puede crear algún puesto de trabajo, no es lo suficiente como para notar cambios en el consumo interno”, explicó Rodríguez.

Seguimos de atrás

“El crecimiento del dólar que se había registrado en 2016 nos había entusiasmado mucho, aunque después volvió a bajar”, expresó Rodríguez, agregando que eso “se dio por algunos factores internacionales como el Brexit o la llegada de Donald Trump a la Casa Blanca, sumado a la intervención del BCU, que cuando consideró que había bajado lo suficiente moderó su accionar”.

“El dólar en Uruguay debería subir más que en el resto del mundo para tener una diferencia que mejore las posibilidades de competitividad, sin embargo, el dólar más bajo permitió que la inflación llegara a converger al rango meta”, explicó la economista, quien agregó que, si bien la inflación cedió los costos de producción no bajaron, “eso es una diferencia que hay que hacer, cuando nos fijamos en los costos de producción como la energía o los combustibles, siguen siendo altos, al mismo tiempo que los salarios, otra parte del costo de producción, suben por encima de la inflación”.

Según un estudio de la Universidad de Montevideo, citado por Rodríguez, Uruguay se encuentra 20% por debajo del nivel de equilibrio del tipo de cambio real. “Esto no está ni mal ni bien, pero lo real es que nos encarecimos más de lo que debíamos”, explicó. Para recuperar el 20% de “atraso”, la economista aseguró que es necesario que el dólar comience a subir por encima de la inflación durante varios años, y varios puntos más que la diferencia del IPC. “Aun así habría que esperar que en el mundo no pase nada, porque esto se trata de números relativos”, explicó.

Lo que hace falta

Rodríguez, a su vez, planteó las claves necesarias para alcanzar un desarrollo sostenible en Uruguay. Según la economista, es pertinente mejorar la inserción internacional, crecer en la competitividad con un Estado “eficiente y facilitador”, para lo que es necesario una estrategia consensuada que consiga más inversiones que repercutan en la creación de empleo, esto sin dejar de lado el desarrollo social y el cuidado del medio ambiente.