Monzeglio: “Si hoy abriéramos las fronteras, vendrían miles de turistas de alto poder adquisitivo”

Remo Monzeglio, subsecretario de Turismo


El turismo venía sufriendo una importante caída antes de la pandemia, y su llegada complicó la realidad del sector, lamentó el jerarca entrevistado por CRÓNICAS. Sin embargo, aseguró que las medidas que tomó el gobierno van a permitir que muchas empresas superen esta compleja situación. A su vez, el viceministro dijo que es optimista con respecto a la posible apertura de fronteras en la primavera, ante lo cual “miles de personas de alto poder adquisitivo” visitarían el país.

Por Magdalena Raffo | @MaleRaffo

-¿Cuáles son las principales dificultades que atraviesa el organismo en el contexto actual?

-Las que está atravesando todo el mundo del turismo; el principal obstáculo es tener las fronteras cerradas para el ingreso de extranjeros. Lo demás está dentro de lo normal, en una situación sin precedentes.

-Imagino que dada esta crisis sanitaria y económica, los objetivos con los que ingresaron debieron ir cambiando. ¿Cuáles son los que se plantean hoy?

-Sin lugar a dudas que los objetivos cambiaron 180 grados. Lo primero que hicimos fue colaborar para sacar adelante al país en esta situación de pandemia. En segundo lugar, tenemos el desafío de generar la reinvención del turismo, que no va a ser masivo en el corto plazo.

-El sector turístico ha sido de los más afectados por la pandemia. ¿Cómo vislumbra la salida de esta situación?

-Hace poco hubo una reunión en Punta Cana (República Dominicana) donde las autoridades del turismo de las Américas se mostraron optimistas en cuanto a que hay una reactivación inminente, aunque algunos países están más adelantados que otros. En ese aspecto, yo creo que Uruguay va a tener una próxima temporada turística bastante cercana a lo que sería normal; ese es el objetivo principal.

-¿La expectativa está puesta en la vacunación?

-Sí, fundamentalmente en eso, la vacunación interna, donde Uruguay está liderando en la región después de Chile. Eso nos da esperanzas de que vamos a poder lograr una inmunidad de rebaño en la medida que sigamos con este ritmo.

-¿Qué oportunidades de negocio pueden existir para los agentes privados mientras tanto?

-Los agentes privados van rehabilitando sus negocios a medida que se va pudiendo viajar un poco más al exterior, o sea, hay mucha gente que está tratando de viajar a otros países donde se puede ingresar. En efecto, eso va generando mayor movimiento, pero todavía es un proceso muy lento.

-¿Considera que el turismo interno se ha explotado de manera adecuada?

-En los momentos en que se pudo hacer turismo interno, la respuesta de la gente fue realmente muy exitosa. En el verano, incluso, algunos fines de semana hubo un récord de movimiento, por ejemplo, de automóviles pasando los peajes. Si se logró eso en estas circunstancias, una vez que la mayoría de la población esté vacunada y tomando los recaudos correspondientes, yo creo que el turismo interno se va a incrementar.

-¿Cómo ha sido el diálogo con los operadores turísticos en el último año?

-Muy fluido. Yo me estoy reuniendo en forma permanente con gente de la Cámara de Turismo, del Centro de Hoteles de Punta del Este, de la Cámara de la Industria Hotelera Turística del Uruguay, de la Asociación de Restaurantes y Hoteles, de la Asociación Uruguaya de Agencias de Viajes, entre otros; estamos trabajando mancomunadamente con todos ellos, que necesitan soluciones diferentes.

-¿Se han atendido los reclamos de las gremiales?

-En su inmensa mayoría, sí. Se han tomado medidas que nunca antes se habían tomado. Obviamente, siempre va a faltar algo porque es imposible atravesar más de un año de pandemia sin tener algún tipo de perjuicio, pero hemos tratado de contemplar todo lo que se ha pedido; hay que tener en cuenta que tenemos límites.

-¿No hay margen para otorgar más ayudas?

-Yo diría que al haber hecho tantos esfuerzos y con las últimas medidas que se tomaron, que incluso exoneran de aportes patronales, ahora tenemos la expectativa de que se empiece a reactivar el turismo y, por lo tanto, que comience a normalizarse la actividad comercial de cada uno de sus integrantes.

“Soy optimista en que en la primavera podremos empezar a abrir las fronteras”

-¿Se buscarán soluciones específicas para aquellas empresas que luego de la pandemia ya no puedan reabrir?

-El turismo venía mal mucho antes de la pandemia, con una caída muy grande. De hecho, solo en Montevideo habían cerrado 14 hoteles. Por suerte, las medidas que tomó el gobierno van a permitir que una cantidad de empresas pasen esta situación con todo su personal en seguro de paro, con beneficios en UTE, en OSE, entre otros, así que esperamos que el perjuicio sea el menor posible.

Gracias a esos esfuerzos tenemos la expectativa de que una vez que esto termine, los operadores puedan retomar a todo su personal y no se pierda tanta fuerza de trabajo. Si el gobierno no hubiera tomado las acciones que tomó, habría habido un cierre de emprendimientos mucho más grande del que hubo, es decir, se ha atenuado el impacto de esta situación.

-¿Se ha conversado con las autoridades sobre la posibilidad de abrir las fronteras en algún momento?

-Sí. Yo estoy trabajando personalmente en el pasaporte sanitario, que es lo que va a permitir que las líneas aéreas que vengan a Uruguay trayendo turistas y pasajeros, puedan ingresar con todas las garantías.

El 10 de abril se hizo un testeo de la utilización de ese pase sanitario en un viaje Madrid-Montevideo por la línea aérea Iberia. Se trata de un código QR donde figura la vacuna que tiene el usuario y el PCR (negativo) certificado por un laboratorio homologado por el Ministerio de Salud de su país de origen. Uruguay está totalmente preparado en materia de tecnología para leer toda esta información en el aeropuerto.

Ahora se está trabajando también en un pase verde, que es prácticamente lo mismo, pero a nivel interno, o sea, es lo que la persona necesita para moverse dentro del país, porque esto llegó para quedarse, no va a ser un tema de dos o tres meses.

Podemos decir que Uruguay va a ser de los primeros países en poder aplicar estos dos sistemas.

-¿Se manejan posibles fechas de apertura de fronteras o todavía estamos lejos?

-Hablar de una apertura de fronteras hoy sería muy arriesgado, pero el ministro de Salud (Daniel Salinas) puso como horizonte octubre-noviembre para ver si podemos llegar a esa inmunidad de rebaño.

Todo nos hace pensar que para la temporada de verano vamos a estar preparados. Particularmente, soy optimista en que en la primavera podremos empezar a abrir las fronteras en forma paulatina, pero la decisión final siempre la tiene el presidente de la República.

“Uruguay va a tener una próxima temporada turística bastante cercana a la normalidad”.

-Dejando de lado el tema sanitario, ¿cuánto cree que va a pesar el problema del tipo de cambio que tiene Uruguay, que hace que sea mucho más caro que Argentina y Brasil? ¿Qué pasará con esos turistas?

-Yo creo que vamos a pasar de un turismo masivo a un turismo cualitativo. Si Uruguay hoy abriera las fronteras, habría miles y miles de personas de alto poder adquisitivo que vendrían a hacer turismo. Permanentemente tenemos consultas de personas que quieren venir al país.

-¿De todo el mundo?

-Sí, eso también ha dependido mucho de cómo es la situación en cada país. Notoriamente, hay una gran cantidad de gente que se vendría de Argentina; ya entraron muchas personas por las nueve excepciones que se hicieron.

-¿Hay estimaciones de cuándo el turismo podría retomar una senda de crecimiento?

-La primavera es un objetivo claro que tenemos para que empiece a incrementarse la llegada de turistas, repito, que aporten calidad más que cantidad –pero pueden darse las dos cosas-.

-Usted denunció algunas irregularidades de la gestión anterior. ¿En qué medida ha puesto el foco en el control y la transparencia?

-En su totalidad. Nosotros desde el primer día estamos cuidando todos los detalles porque manejamos dineros públicos y hay que ser muy transparentes.

En su momento, la División Jurídica del Ministerio hizo una denuncia puntual que fue por una lancha que adquirió la Intendencia de Paysandú con dinero del organismo, cuya licitación especificaba que debía ser totalmente nueva, pero nos llegó documentación que probaba que era usada: había tenido dos dueños anteriores.

Ese fue un hecho de apariencia delictiva que ahora está en el ámbito de la Justicia. Además, hemos hecho auditorías y controles internos, y hemos tomado recaudos.


«Tenemos condiciones más que adecuadas para superar este momento»

-¿Cuáles son las metas a futuro, pensando en el día después de la pandemia?

-Hay que reinventar el turismo, buscar alternativas diferentes a las que veníamos cultivando, porque acá había un turismo masivo que hoy no se ve como posible por distintas circunstancias, fundamentalmente, de salud.

Es por ello que hay que ir pensando en un turismo de calidad, es decir, personas que estén más tiempo, o un turismo de congresos, que puede ser uno de los que más aporte a esa reinvención, porque es la gente que más gasta. Se ha perdido un año y medio, casi dos, de poder hacer ese tipo de congresos y de reuniones, así que entendemos que va a haber una avidez muy grande por retomar ese negocio turístico.

-¿Qué objetivos se debieron aplazar por la emergencia sanitaria?

-Uno fue la ampliación de la conectividad aérea, que tuvo un parate a consecuencia de lo que pasó mundialmente. Hoy se lleva a cabo el 15% de los viajes que se hacían antes de la pandemia; el 85% cayó. La impresionante mayoría de los aviones están parados, sin poder volar, porque no tienen dónde ni cómo.

De todas maneras, somos optimistas porque hace alrededor de un mes se hizo una encuesta a nivel de las Américas, que dio cuenta de que el 60% de los viajeros frecuentes estaba dispuesto, en un horizonte de aquí a 45-60 días, a volver a viajar, con precaución, pero hacerlo.

Eso fue lo que nos hizo acelerar toda esta planificación de los pasaportes sanitarios, con lo cual, con el código QR, la persona podrá viajar por todo el mundo sin tocar un solo papel. La certificación de que el ciclo de vacunación del usuario está cumplido es lo que nos va a ir permitiendo acelerar la vuelta a la normalidad.

“Si el gobierno no hubiera tomado las acciones que tomó, habría habido un cierre de emprendimientos mucho más grande del que hubo”.

-¿Cómo ha visto el manejo del gobierno sobre la pandemia? El año pasado Uruguay se destacaba en el mundo por su gestión y buenos resultados, pero ahora la situación cambió radicalmente. ¿Qué reflexión le merece?

-El gobierno se manejó siempre con absoluta responsabilidad y seriedad, y el presidente ha estado arriba de cada tema. En determinado momento tuvimos un éxito enorme, pero ahora, con esta primera ola que nos atacó, estamos con números complicados. Es una carrera de largo aliento, de resistencia, pero no tengo la menor duda de que Uruguay va a estar entre los primeros países del mundo en tener a la mayoría de su población vacunada.

-¿Es optimista de cara al futuro?

-Por supuesto, vemos la salida al final del túnel y tenemos grandes esperanzas de que esto se supere. Los que trabajamos en turismo tenemos la obligación de ser optimistas, porque definitivamente lo que nosotros vendemos son fantasías y en términos generales, por suerte, se hacen realidad; vendemos experiencias de viaje.

Por lo tanto, estamos preparando un país que va a estar listo para recibir a los turistas a un nivel de sanidad, de calidad y de servicios que muchos van a tener que envidiar, porque tenemos condiciones más que adecuadas para superar este momento.