Millán: “Yo peleé para regularizar las cosas en ASSE y me hubiera gustado terminar esa gestión”

Richard Millán, director de Habilitación y Fiscalización del MSP, ex gerente general de ASSE


La asunción del nuevo Directorio de la Administración de los Servicios de Salud del Estado (ASSE) implicó el cese del ex gerente general, Richard Millán, quien no pudo culminar la gestión que había planeado para regular el funcionamiento del organismo. De todas formas, dejó el cargo convencido de que las nuevas autoridades van a llevar adelante lo que quedó pendiente, y ahora trabaja desde el Ministerio de Salud Pública (MSP) para mejorar los procesos de habilitación y fiscalización de los prestadores de salud.

Por Magdalena Raffo | @MaleRaffo

-¿Qué balance hace de su trabajo al frente de la Gerencia General de ASSE?

-Yo ingresé a ASSE en mayo de 2015 como director de la Regional Norte y Este, y asumí la Gerencia General en enero de 2016. El perfil cambió, porque un director se relaciona más con lo asistencial, y el gerente general con la otra parte, que no es la más linda, que es la del control de todo.

-¿Se encontró con dificultades en ese aspecto?

-No, pero el que busca, encuentra, y cuando yo empecé a buscar, encontré irregularidades, muchas de las cuales se hacían por desconocimiento. Por ejemplo, las unidades ejecutoras pueden hacer licitaciones hasta cierto monto, y el resto las debe hacer el nivel central, pero a veces las que hacían ellas no cumplían con el procedimiento del Tocaf (Texto Ordenado de Contabilidad y Administración Financiera). Fue por esto que trabajamos con la Gerencia Financiera para ver qué estaba pasando con los dineros de ASSE, y empezamos a hacer un control de los gastos.

-¿Cuáles fueron los principales logros alcanzados en esa gestión?

-Logramos hacer compras donde ahorramos muchísimo dinero, y transparentar las licitaciones. En la recolección de residuos hospitalarios ahorramos 100 millones de pesos anuales. Fuimos muy rigurosos en gastar bien el dinero de ASSE, y hoy la casa está en orden. Yo me fijé esa meta, pero el período en el que estuve tampoco fue muy largo, quedaron muchas cosas por hacer.

-¿Le hubiese gustado culminar este quinquenio en su cargo anterior?

-Sí, me hubiera gustado, pero el Sistema Nacional Integrado de Salud ya está instalado y eso no lo va a cambiar nadie, y esté quien esté, seguro que lo va a mejorar.

-En el ejercicio de contralor del que hablaba, ordenó algunas investigaciones. Quizás la más sonada fue la del Hospital de Rivera, por la polémica del “caso Toriani”. ¿Cómo fue ese proceso?

-El que no conoce cómo es la administración dice “el gerente general fue el responsable”. Yo no quiero ponerme ni sacarme responsabilidades, pero el gerente financiero detectó un gasto excesivo para una compra de servicios, y la única manera de saber por qué se gastaba tanto era con una investigación administrativa. Una vez que se hizo, Jurídica decidió que debía hacerse un sumario, y este fue llevado al Directorio, que es el que decide si hay irregularidad.

Yo cumplí mi deber, pero no puse ni saqué a ningún director. Lo de Rivera fue muy polémico, pero era objetivo, es decir, la investigación no fue en contra [de Toriani], sino por la advertencia del gerente financiero; no era nada personal. Yo estimo mucho a los directores y los respeto, pero a veces se equivocan y no alcanza con las buenas intenciones.

-¿Esto complicó su relación con la entonces presidenta de ASSE, Susana Muñiz?

-No, yo tenía una relación normal con ella y coincidí en la inmensa mayoría de las cosas. El único punto de diferencia grande fue lo de Rivera. Pero la irregularidad existió.

-¿Se fue conforme con lo logrado?

-Yo peleé durante todo el 2016 para regularizar las cosas. En la Rendición de Cuentas de ese año llegamos a un acuerdo con Economía para derivar gastos de funcionamiento para traslados y otros servicios, y se ahorró mucho dinero con eso. Ese proyecto me había ilusionado mucho y me hubiera gustado terminarlo.

-¿Se sintió apoyado en esa lucha por la regularización?

-Totalmente. Todas las resoluciones las debe apoyar el Directorio. Quiero aclarar que no había una Gerencia General contra un Directorio, no hubo una lucha de poder.

-Pero esa rivalidad trascendió.

-Yo veía eso en la prensa, pero no lo viví. Eso que decían de que había un enfrentamiento entre la persona de confianza del presidente y Muñiz, no existió.

-¿Le sorprendió el desenlace del Directorio anterior?

-Sí. No pensé que fuera a terminar así, pero el presidente tiene todo el derecho de cambiarlo. El Directorio anterior puso todo, trabajó siempre con la mejor de las intenciones.

-¿Cómo vio la asunción del nuevo Directorio, que llegó con una impronta diferente, que apunta a la transparencia y la profesionalización de la gestión? ¿Es positivo el cambio?

-Creo que adelantaron algo que estaba previsto realizar en la segunda reforma [de la salud], que son los concursos para los cargos de dirección. Es una señal fuerte que por primera vez en Uruguay los directores sean designados por ese mecanismo.

-También es un Directorio que a diferencia del anterior, apuesta a la apertura al diálogo con la oposición.

-La Gerencia General recibió a todo el mundo, legisladores, trabajadores. Yo a los legisladores no los veo como enemigos, los tengo que respetar porque los votó la gente, sin importar de qué partido sean. Y creo que [el presidente de ASSE] Marcos [Carámbula] eso lo maneja muy bien.

-Ahora le tocó asumir un nuevo desafío en Habilitación y Fiscalización del MSP. ¿Qué objetivos se marcó?

-Estamos trabajando para agilizar el sistema de las habilitaciones, tanto en ASSE como en el sector privado, y para aumentar la cantidad de gente que fiscaliza los prestadores.


“Si yo fuera oposición también controlaría ASSE”

-¿Cómo ve el rol de la oposición en el control de la gestión de ASSE?

-Tienen derecho de hacerlo. Si yo fuera oposición también controlaría. Lo veo bien.

-Inclusive fue desde la oposición que se impulsó la creación de la Comisión Investigadora sobre ASSE. ¿Qué opinión le merece?

-La Investigadora arrancó con auditorías del 2014, y este Directorio entró en el 2015. Las denuncias son ciertas, pero eran cosas que venían de antes y fueron solucionadas, no es que miramos para otro lado. Tal vez el énfasis se tendría que haber puesto en lo que estábamos haciendo para cambiar los errores y no en investigar hacia atrás, que nos llevó mucho tiempo.

-¿Eso complicó la gestión?

-Lo que pasa es que nos concentramos en mejorar la gestión hacia adelante, pero también teníamos que contestarles a los diputados, buscar toda la información que ni siquiera nosotros conocíamos, y eso repercutía [en la gestión] porque demandaba tiempo.

Por otro lado, en la Gerencia General, ver hacia atrás sirvió para acomodar la gestión. Yo veía la parte de licitaciones, de compras, para determinar por qué comprábamos tan caro –no estoy hablando de corrupción-, entonces centré la gestión en administrar mejor los dineros y buscar los mejores precios.

-¿Por qué tuvo que llegar usted para ordenar esos gastos? Es decir, ¿por qué no se utilizaba el dinero de la mejor manera?

-Esto es un proceso. En el primer gobierno del presidente Tabaré Vázquez se tuvo que hacer una reestructura –ASSE era parte del MSP-, y había que hacer muchas obras de infraestructura en los hospitales, poner recursos humanos. Son etapas, no es que los que estaban antes gestionaron mal. Cuando yo llegué, la atención a los usuarios estaba garantizada, y había otras cosas para mejorar.

-¿No hubo falta de control también? ¿Casos como el de Bella Unión o el de Rivera no demuestran que se saltearon ciertas normas?

-No sé. Yo no estuve en ese período, no te podría decir si hubo falta de control o no.