Al referirse a la salida de Carlos María Uriarte del MGAP, en diálogo con CRÓNICAS, los titulares de la Asociación Rural del Uruguay (ARU), de la Asociación Nacional de Productores de Leche (ANPL) y de la Asociación de Cultivadores de Arroz (ACA) coincidieron en que fue un ministro que apostó por el diálogo y que su destitución los sorprendió.
Por Romina Peraza | @romiperaza
El domingo pasado, el presidente Luis Lacalle Pou volvió a anunciar la destitución de un ministro a través de su cuenta de twitter. Esta vez quien debía dejar su cargo era el ministro de Ganadería, Agricultura y Pesca (MGAP), Carlos María Uriarte.
Uriarte declaró a los medios que le sorprendió la medida que tomó el presidente y que su salida fue a pedido de Ciudadanos, el sector del Partido Colorado por el que llegó al Ministerio. Vale aclarar que el ahora exjerarca tiene una raíz política nacionalista y no colorada.
La destitución de Uriarte parece tener más que ver con una incomodidad con la persona que con los lineamientos generales de la gestión, porque el nuevo ministro, Fernando Mattos, tiene un perfil muy parecido.
Asimismo, Uriarte declaró que no visualiza ningún error en su gestión que podría haber llevado a su sustitución, pero según fuentes del gobierno, bastaba con mirar su performance al frente del MGAP para darse cuenta que hubo hechos que molestaron, y mucho, en Torre Ejecutiva.
Las declaraciones comparando el abigeato con los femicidios, los problemas que llevaron a que no hubiera una definición clara del directorio de la UAM desde un principio, y el último -pero quizás el más grave para el país-, que fue el error en el etiquetado de carne que dejó al frigorífico BPU fuera del mercado chino por unos meses -y que casi deja al país sin el principal comprador del agro uruguayo-, fueron errores determinantes en su salida.
Este último “error” se subsanó este jueves, cuando Uriarte anunció en su cuenta de twitter que China levantó la suspensión que recaía sobre el frigorífico uruguayo.
Igualmente, su destitución no solo lo sorprendió, sino que también lo hizo entre algunas gremiales vinculadas al agro.
En entrevista con CRÓNICAS, el presidente de la Asociación Rural del Uruguay (ARU), Gonzalo Váldes; el presidente de la Asociación Nacional de Productores de Leche (ANPL), Walter Frisch; y el presidente de la Asociación de Cultivadores de Arroz (ACA), Alfredo Lago, coincidieron en que la destitución del ministro “los tomó por sorpresa”.
Lago indicó que percibía cierta “soledad política” en la gestión del ministro, situación que adjudica –en parte- al hecho de que al retirarse Ernesto Talvi de la escena, Uriarte quedó sin referencia política.
“Está claro que era un ministro por cuota política, no era un productor al que se lo seleccionó para ser ministro. Creo que esa soledad política también estaba en lo que tiene que ver con los equipos del Ministerio; había cierta separación en ese mismo sentido y entonces fue quedando en solitario”, enfatizó Lago.
El principal de la ACA expresó que Uriarte merecía una salida mejor, y destacó que siempre tuvo un gran respeto en el trato interno con las agremiaciones. “Son valoraciones que quienes no estamos en la política hacemos”, puntualizó.
En tanto, Frisch indicó que la salida de Uriarte lo sorprendió porque se venía trabajando con un calendario de actividades, en el cual tenían muchas reuniones en conjunto. De hecho, había encuentros pactados para más adelante.
El titular de la ANPL expresó que el sábado por la noche el ministro participó del acto eleccionario de la Federación Rural y allí nada hacía suponer que ese sería su último día como ministro de Ganadería.
Por otro lado, y en la misma línea que sus pares de agro, sobre el hecho Valdés dijo que es una decisión del Poder Ejecutivo que se debe respetar y destacó el diálogo que siempre hubo entre la ARU y Uriarte.
“Tenemos que reconocer y agradecer el tiempo que nos ha dedicado Carlos María Uriarte en el Ministerio y al servicio del país. A la vez, desearle el mayor de los éxitos a Fernando Mattos en este nuevo desafío que tiene por delante”, puntualizó el titular de la ARU.
Una gestión basada en el diálogo
Para los tres gremialistas, la gestión de Uriarte estuvo teñida por un gran intercambio entre el jerarca, el Ministerio y las gremiales que ellos representan. Cabe destacar que, muchas veces en los gobiernos anteriores del Frente Amplio, las gremiales del agro expresaron que no se sentían escuchadas por los jerarcas que estaban al frente del MGAP.
Valdés remarcó que Uriarte llevó adelante una gestión abierta al diálogo, generando un ambiente de trabajo entre las diferentes gremiales y el Ministerio.
Lago indicó que la presencia del ahora exjerarca por el Ministerio estuvo marcada por una buena situación del sector arrocero y por eso las autoridades no tuvieron que enfrentar las mayores adversidades del rubro.
Eso hizo, en parte, que la valoración del productor respecto a la gestión sea vista con otros ojos. “Fue alguien que siempre estuvo abierto a nuestras exposiciones, y cualquier decisión que tomó siempre lo hizo en consulta. Además, todo el equipo del Ministerio estuvo a la orden para cualquier dificultad que tenía el sector”, indicó el representante de la ACA.
Lago definió a Uriarte como alguien que conoce el rubro agropecuario, además de un productor que conocía la actividad gremial, y que transitó la gestión política en base a ese conocimiento.
Al igual que sus colegas gremialistas, Frisch calificó la gestión como “muy buena”, donde hubo mucho consenso, diálogo y donde las decisiones se tomaban en conjunto con las gremiales y no en la soledad del Ministerio.
Recalcó que hubo buenas propuestas meses atrás, de las que esperaban una respuesta, pero con la ida del ministro “lamentablemente no se pueden terminar”.
Asimismo, destacó que al ser Uriarte un productor, entendía las distintas realidades agropecuarias.
La nueva gestión
El domingo por la noche el presidente, Luis Lacalle Pou, notificó dos cosas: la salida de Uriarte y el ingreso de Fernando Mattos a la cartera.
Mattos se venía desempeñando como presidente del Instituto Nacional de Carnes (INAC) y tiene un perfil muy parecido al de su sucesor dentro del MGAP.
Es productor, fue gremialista, apoyó a Ernesto Talvi en las elecciones nacionales y es un conocedor del agro.
De hecho, Uriarte y Mattos venían desempeñando un trabajo conjunto con las gremiales relacionadas al agro, por lo tanto, este último llega al MGAP sabiendo en base a qué lineamientos se venía trabajando.
Frisch, de la ANPL, comentó que espera que las políticas que se venían llevando a cabo van a seguir, y que la expectativa respecto a la nueva gestión es muy buena.
“Va a tener otro matiz. Estamos hablando de otra persona, que le va a dar su impronta, así que auguramos los mejores desempeños”, reflexionó.
Lago, por su parte, desde la ACA dijo que ya conocen a Mattos aunque menos que a Uriarte cuando asumió y destacó que es alguien que tiene las mismas características que su antecesor.
Asimismo, expresó que esperan en las próximas semanas poder reunirse o comunicarse con el nuevo ministro para plantearle distintas situaciones.
Desde la ARU esperan que la gestión sea muy buena, tal como venía siendo hasta ahora. Váldes recordó que Mattos y Uriarte comparten muchas características.
“Aspiramos a tener un diálogo abierto y a seguir trabajando en conjunto con el Ministerio en distintos temas. Hoy las prioridades son la campaña sanitaria y la revisión de la institucionalidad agropecuaria, que son dos temas que hemos planteado fuertemente y que creemos que estamos en el momento de acelerar y de llegar a determinadas concreciones”, enfatizó.
