Miami, 29 oct (EFE).- La Universidad de Miami (UM) está probando en sus alumnos una nueva manera de detectar en solo minutos si una persona está infectada de covid-19 mediante el análisis de las pequeñas gotas que se emiten al respirar.
Este centro universitario es el primero de EE.UU. en el que se prueba el «Analizador de respiración» producido por la empresa BioSafety Technologies, filial de la israelí TeraGroup, que está a la espera de que la Administración de Drogas y Alimentos (FDA) le de autorización para su comercialización en el país.
El analizador es muy similar al que utiliza la policía para detectar «in situ» si un conductor ha consumido alcohol.
Para esta prueba solo se necesita soplar dos veces en un pequeño tubo, colocarlo en un scanner de covid-19 y esperar los resultados, que llegan en pocos minutos, según un comunicado de UM.
«Es tan simple como soplar. Si funciona, lo va a cambiar todo», dijo Roy E. Weiss, presidente del Departamento de Medicina de la Facultad Miller de Medicina en UM.
«Nos va a permitir hacer test en una fracción del tiempo y el dinero de las pruebas (PCR) con hisopo nasal actuales y tan frecuentemente como sea necesario», agregó.
Weiss dijo que podría usarse para controlar la entrada a un estadio de fútbol. Si dan negativo pueden seguir adelante y disfrutar del partido, dijo.
Desde esta semana a los alumnos que acuden a un centro habilitado dentro del campus de UM para hacer las pruebas de covid-19 a las que están obligados a someterse regularmente se les pregunta si desean hacer esa prueba además y en caso afirmativo se les pide que firmen un documento de consentimiento.
También se les va a dar esa misma oportunidad a profesores y otro tipo de personal de la universidad.
El resultado de cada prueba hecha con el Analizador de Respiración se compara en cada persona con el de la prueba PCR para verificar que el nuevo test es eficaz.
UM espera proporcionar a la empresa los resultados de 1.000 pruebas, como un pequeño estudio clínico en apoyo del invento de BioSafety Technologies.
Erin Kobetz, uno de los responsables de la estrategia de detección de covid-19 en UM, dijo que todavía es muy pronto para sacar conclusiones acerca de la efectividad del test isrselí, pero se declaró «esperanzado».