En un contexto de sólido crecimiento y elevado empleo, la Fed anunció el aumento de la tasa de interés de referencia a un rango de entre 2% y 2,5% y puso fin a una era de política monetaria expansiva. Del otro lado, el BCE da indicios de que no acelerará la normalización de su política monetaria.
En momentos en que la volatilidad regional empuja al alza al dólar, la Reserva Federal (Fed) estadounidense confirmó la previsión del mercado y concretó un nuevo aumento de su tasa de interés de referencia, y dejó su panorama de política monetaria para los próximos años, sin mayores cambios. Si bien la decisión no sorprende, el aumento de las tasas es un nuevo factor que incide al alza sobre el dólar, que se apreció en la plaza local un 14,88% desde comienzos de año (ver nota página 13).
Con una economía creciendo con vigor –algunos dirán que sobrecalentada- y el empleo en máximos históricos, la Fed anunció a través de un comunicado el fin de una era de política monetaria “expansiva” y un alza de la tasa de fondos federales de un cuarto de punto porcentual a un rango entre 2% y 2,25%.
En sus nuevas proyecciones, que incorporan los efectos de los recientes recortes de impuestos y mayores gastos del gobierno de Donald Trump, los responsables de la Fed dijeron que aún esperan un alza de tasas más en diciembre, tres más el próximo año y solo una en 2020.
Las subidas llevarían el tipo referencial de los préstamos del Banco Central de Estados Unidos a un 3,4%, aproximadamente medio punto porcentual sobre la tasa de interés neutral estimada, la que no acelera ni frena la economía.
Esa posición de política monetaria ligeramente restrictiva se mantendría hasta 2021.
La Fed prevé que la economía crecerá un 3,1% este año, más de lo que había pronosticado antes, y continuará expandiéndose moderadamente durante al menos otros tres años, en medio de un bajo desempleo y una inflación estable cerca del objetivo del 2 %.
“El mercado laboral ha seguido fortaleciéndose (…) la actividad económica ha estado aumentando a un ritmo sólido”, dijo la Fed en un comunicado en que eliminó su referencia a que la política monetaria seguía siendo “expansiva”.
El aumento fue el tercero de este año y el séptimo en los últimos ocho trimestres.
Sin prisa, sin pausa
Al otro lado del Atlántico, la economía de la zona euro presenta las condiciones para que el Banco Central Europeo (BCE) avance en su plan de reducir los estímulos a fines de este año, pero la normalización de la política monetaria no se producirá más rápido que lo previsto, según aseguró el economista jefe de la entidad, Peter Praet.
De esta forma, el funcionario descartaba las especulaciones del mercado de que un reciente comentario del presidente de la entidad, Mario Draghi, presagiaba una normalización más acelerada. Praet dijo que el proceso será prolongado y gradual, ya que la actual trayectoria de inflación se basa en un respaldo monetario sustancial del BCE. “No hubo nada nuevo”, dijo Praet en una conferencia en Londres, refiriéndose al discurso de Draghi. “Claramente, vemos un progreso en los (precios) subyacentes, lo que está detrás del proceso de inflación. Pero es un proceso largo y que depende de condiciones monetarias muy flexibles”, agregó.
En declaraciones al Parlamento Europeo, Draghi predijo una aceleración “relativamente vigorosa” de la inflación subyacente. El euro se fortaleció y los rendimientos de los bonos aumentaron a medida que los inversionistas intentaron interpretar su inusual formulación.
Pero Praet desestimó la idea de que había un mensaje en la elección de las palabras y argumentó que la reacción del mercado no estaba justificada.
Incluso sostuvo que la reciente apreciación del mercado, que situó la proyección del primer aumento de la tasa del banco durante algún momento del cuarto trimestre de 2019, coincide en líneas generales con el propio escenario del Consejo de Gobierno del BCE.
El banco regional espera que su esquema de compra de bonos por 2,6 billones de euros termine hacia el final de este año. Se espera que las tasas de interés se mantengan estables en mínimos históricos “hasta” mediados de 2019, de acuerdo con sus lineamientos confirmados recientemente.