El profesor e investigador de la Universidad Autónoma de Lisboa, Filipe Vasconcelos, opinó que el bloque europeo está “en una posición de mayor debilidad”. En diálogo con CRÓNICAS, el experto señaló que una combinación de crisis de deudas soberanas, el Brexit, un creciente nacionalismo por parte de los ciudadanos y la crisis del Covid-19, hace pensar que “sí hay riesgos de colapso del proyecto”.
Filipe Vasconcelos, profesor e investigador de la Universidad Autónoma de Lisboa, dialogó con CRÓNICAS respecto a la crisis que atraviesa la Unión Europea (UE) en el contexto de pandemia actual. El también profesor visitante de la Facultad de Administración y Ciencias Sociales de la Universidad ORT había dado un webinar para la facultad uruguaya, titulado “La supervivencia de la Unión Europea en el contexto de una nueva crisis económica”.
De esta manera, Vasconcelos se refirió a cómo el bloque económico del viejo continente intenta resistir los azotes causados por el Covid-19, y qué perspectivas tiene para el día después.
– En su webinar, argumentó que la crisis económica actual de la UE “está relacionada con traumas del pasado”. ¿Por qué?
– La respuesta a la crisis puede relacionarse con la crisis anterior. En parte, a los Estados más afectados por la crisis de las deudas soberanas (2010-2015) también se les dijo, en un momento previo (fines de 2008), que podrían aumentar el gasto público y tener déficits más amplios. En parte, esto generó dificultades de financiación y obligó al pedido de préstamos a las instituciones europeas -Comisión Europea y Banco Central Europeo- y al Fondo Monetario Internacional (FMI), con la condicionalidad política inherente. Esta condicionalidad profundizó la crisis social en países como Portugal y Grecia, y generó traumas. Las respuestas/apoyos que la Unión Europea venga a dar ahora deben siempre llevar los Estados a leer atentamente las letras pequeñas del contrato.
– ¿La crisis del Covid-19 potenció esta realidad previa?
– Eso está por verse. Lo que sabemos es que la necesidad de contener la pandemia -que afortunadamente pocos contestan en Europa- llevó a una crisis económica sin precedentes en la UE. En este momento estamos en plena definición de las medidas estructurales de respuesta a esta crisis económica, por lo que aún tenemos que esperar para ver si vamos a repetir los mismos errores.
– Asimismo, argumentó que el quiebre profundo de las economías, una alta tasa de desempleo y el déficit público conforman el panorama de la situación europea actual. ¿Es posible llegar a una solución en cada una de estas áreas?
– Creo que sí. Las instituciones europeas, el eje franco-alemán y los Estados más afectados están demostrando una prudencia y una coordinación que no han demostrado en la crisis anterior. La respuesta europea tiene que pasar por financiación a fondo perdido y por involucrar las instituciones supranacionales en la deuda pública. En las últimas semanas se han dado pasos importantes en ese sentido, como la financiación de la propia Comisión. No obstante, algunos de los países con más recursos resisten a este tipo de modelos e insisten en la financiación por deuda de los Estados. Puede que en el Consejo Europeo de 19 de junio tengamos ya un plan firme.
– ¿Corren riesgo de colapso la integración europea y el euro?
– La Unión Europea, sobre todo después de la crisis de las deudas soberanas y del Brexit, está en una posición de mayor debilidad. Es un proyecto que no genera ilusión entre sus ciudadanos que, en parte, vienen buscando alternativas nacionalistas, como puede constatarse por el crecimiento de la extrema derecha en diferentes países. Si agregamos a todo esto la crisis más grande de los últimos 90 años, podremos pensar que sí hay riesgos de colapso del proyecto.
– ¿Qué perspectivas se tienen para cuando se vaya el Covid-19? ¿Cómo quedará la economía europea y cómo puede repuntar?
– Es la gran incógnita. Europa no es un continente aislado, por lo que también habrá que mirar lo que ocurre en el resto del mundo, con el cual tenemos intensas relaciones comerciales y financieras. Si los Estados europeos actuasen de forma coordinada, poniendo a un lado sus viejas rivalidades y los clivajes (ricos/pobres, norte/sur, este/oeste), el repunte tendrá lugar más temprano.
Si te he visto, no me acuerdo
– ¿Cómo influencia el Brexit a la crisis que azota al bloque económico europeo?
– El Brexit parece ahora un hecho muy distante. Hasta diciembre no hablábamos de otra cosa. Repentinamente, el Brexit desapareció de la agenda y es probable que el acuerdo marco entre la UE y el Reino Unido sea aplazado y que el período de transición sea extendido. En términos prácticos, cuenta muy poco hoy día.