Luego de caer en 2016, la economía de América Latina se recuperaría en 2017, según Cepal

Políticas > “MANTENER INVERSIÓN SOCIAL Y PRODUCTIVA EN UN MARCO DE AJUSTES FISCALES INTELIGENTES”

Luego de la contracción de 0,9% que se proyecta para este año, se espera que la economía regional crezca un 1,5% en 2017. De acuerdo a la Cepal, para logar sostener en el tiempo el mayor crecimiento esperado para el año que viene, se requiere dinamizar la inversión e incrementar la productividad.

La Comisión Económica para América latina y el Caribe (Cepal) publicó una revisión de sus proyecciones de crecimiento para la economía de la región, y espera que el año en curso concluya con un deterioro de 0,9% del PIB regional. Sin embargo, el año próximo se verificaría “un repunte en la dinámica económica” y la economía regional crecería un 1,5%.
De acuerdo al organismo de Naciones Unidas, las expectativas para 2017 dan cuenta de un entorno global que se prevé más auspicioso que el registrado en los dos últimos años. En particular, los precios de las materias primas evidenciarían mejoras con respecto a los niveles promedio del 2016 y se espera que el crecimiento de los socios comerciales de los países de la región sea mayor.

No obstante, la Cepal advierte que al igual que lo ocurrido este año, para 2017 la dinámica de crecimiento mostrará marcadas diferenciadas entre países y subregiones. Las economías de América del Sur, especializadas en la producción de bienes primarios, en especial petróleo, minerales y alimentos, registrarán un crecimiento promedio en 2017 de 1,1% que contrasta con la contracción esperada de 2,2% de este año.

Las economías de América del Sur, especializadas en la producción de bienes primarios, en especial petróleo, minerales y alimentos, registrarán un crecimiento promedio en 2017 de 1,1% que contrasta con la contracción esperada de 2,2% de este año.

En cuanto a las expectativas para nuestro país, Cepal espera que la economía uruguaya culmine 2016 con un crecimiento de 0,6% este año y en 2017 se acelere levemente hasta lograr un crecimiento de 1,2%.

El desempeño de nuestro país este año no es nada despreciable, sobre todo si se lo compara con el de sus vecinos. Se espera que la economía de Brasil caiga un 3,4% y que la de Argentina lo haga un 1,8%. No obstante, ambos países se recuperarían el año que viene al crecer 0,5% y 2,5%, respectivamente. Venezuela es el país con peor escenario económico planteado, proyectando una caída de su PIB del 8% este año y de 4% el próximo. Del otro lado, los mejores desempeños en Sudamérica los registrarán Bolivia (4,5% en 2016 y 4,3% en 2017), Paraguay (4% y 3,8%) y Perú (3,9% y 4%).

Ajuste inteligente

Por su parte, para las economías de Centroamérica se espera una tasa de crecimiento de 4% para 2017, por encima del 3,7%, proyectado para 2016. Si se toma Centroamérica más México las proyecciones son de 2,5% para 2016 y 2,6% para 2017. En el Caribe de habla inglesa u holandesa se estima un crecimiento promedio de 1,4% para 2017, cifra que contrasta positivamente con la contracción esperada de 0,3% para el año en curso.

De acuerdo al organismo, para logar sostener en el tiempo el mayor crecimiento esperado para 2017, se requiere dinamizar la inversión e incrementar la productividad. En este contexto, se interpreta que la inversión en infraestructura y en innovación tecnológica debe jugar un papel primordial.

Asimismo, para proteger los avances sociales logrados en años recientes el organismo señala que se requieren políticas que mantengan la inversión social y productiva en un marco de ajustes fiscales inteligentes. Agrega que se debe procurar la sostenibilidad de las finanzas públicas de la región, con políticas que tomen en cuenta tanto el impacto sobre la capacidad de crecimiento en el largo plazo, como sobre las condiciones sociales de los habitantes de la región.

Se requieren políticas que mantengan la inversión social y productiva en un marco de ajustes fiscales inteligentes.

Al igual que lo manifestado en informes anteriores, la Cepal entiende que ante la contracción económica actual, la región necesita un cambio estructural progresivo con un gran impulso ambiental que promueva un desarrollo basado en la igualdad y la sostenibilidad ambiental, con políticas de inversiones públicas y privadas coordinadas en distintas áreas para redefinir los patrones energéticos, de producción y consumo, basados en el aprendizaje y la innovación. “De esta forma se avanzará hacia el cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la Agenda 2030”, concluye el comunicado del organismo.