«Se nota la necesidad del mercado por evitar los componentes más nocivos para el cabello”

Patricia Falero, fundadora de peluquería Nivel 1


El salón de belleza Nivel 1 propone un trato personalizado, orientado a un tratamiento orgánico del cabello y a la búsqueda del equilibrio emocional. Además, la firma ofrece e-commerce, una app para agendarse y  controlar el tratamiento y promociones que se renuevan periódicamente.

Las fragancias emulsionadas de  menta y  lavanda se fusionan con una música suave  y la relajante presión de los masajes en las sienes. Así es la explosión de sensaciones placenteras que propone uno de los servicios del salón Nivel 1.

En la esquina de Rivera y Cartagena, en el corazón de Carrasco, se emplaza la imponente peluquería a cargo de la reconocida estilista, Patricia Falero.

En conversación con Empresas & Negocios, la experta compartió la experiencia de Nivel 1, su devoción por la peluquería y la constante apuesta a un concepto “Green” en el que los químicos pierden la batalla frente a las propiedades de las hierbas aromáticas.

De familia de estilistas, la belleza es una cuestión de sangre para Patricia Falero. En la búsqueda de la belleza y, fundamentalmente, del equilibrio, la especialista erigió su salón y también apuesta a la capacitación en el exterior, independientemente de su experiencia de más de 20 años en el rubro.

“Yo quiero tomar al pelo como un anexo de la piel, que es el mayor órgano del cuerpo humano, ver la salud, porque todo está relacionado; el organismo es un todo”, aseveró Falero.

La peluquera trabajaba, en sus inicios, tratando a personas de clase social alta, pero llegó un momento en que las horas del día no le alcanzaban para cubrir a su clientela y percibió que la gente joven no tenía dónde acudir a salones de belleza, que 15 años atrás se orientaban a un público de mayor edad.

A raíz de esto, Falero apostó por un salón junto a la galería Roma, dirigido a las más jóvenes, pero su público objetivo continuó creciendo, por lo que fue necesario crecer y mudarse a un espacio más grande que se ajustara a sus necesidades, y esta vez sin énfasis en ninguna franja etaria en particular.

Green HairDesign

Las periódicas capacitaciones de Falero en el exterior redundaron en que la profesional arribara a España y pudiera percibir las similitudes estéticas entre las españolas y las latinoamericanas. “La mujer francesa, por ejemplo, es más sobria y utiliza el pelo corto. Las españolas, en cambio, se asemejan más a las latinas en las clases sociales más altas”, explicó. Luego, en Londres, visitó un salón orgánico donde fue espectadora del uso de lo orgánico para la cosmética, algo que ya había ensayado en sus años de estudiante.

“Llegué acá y me di cuenta de que era lo que quería hacer. Esto va a ser el futuro, porque ahora pensamos en los pesticidas, en la carne con inyecciones y los pollos con hormonas. Todo vuelva a la madre tierra, al origen, y así decidí poner este salón orgánico”, relató Falero, rodeada de hojas verdes que decoran el impoluto ambiente perfumado del anexo que tiene hace cinco años en Nivel 1.

“Al año de tenerlo desarrollamos una aplicación que permite agendar hora y guardar todas las citas por lo que se tiene un control de todos los servicios y también se accede al e-commerce”, agregó la experta.

Asimismo, resaltó que la respuesta de las clientas no fue inmediata debido a que los químicos producen respuestas rápidas, que las hierbas no suplen, aunque a mediano y largo plazo la salud del cabello refleja que el tratamiento ideal siempre va de la mano con lo natural.

“Hemos aprendido que combinar las plantas que producen brillo con las que necesitamos para el problema específico del cliente”, indicó Falero y agregó que, de esta forma se logró la fidelidad de las clientas que ven la belleza inmediata y también la salud del cuidado orgánico.

“Hacemos mucho énfasis en el diagnóstico”, puntualizó la especialista. Este se realiza con tecnología a fin de poder ser certero a la hora de evaluar la densidad de la raíz del cabello y trazar el plan para solucionar los problemas de la clienta. “Este beauty plan es como una receta médica que detalla qué se hace en el salón y qué deben hacer en la casa”, explicó. Con este tratamiento el compromiso se afianza y las mujeres se convierten en fieles de Nivel 1. “Ahora, después de cuatro años, se nota claramente la necesidad del mercado por evitar los componentes más nocivos”. A su vez, Falero remarcó que, en la actualidad, todos los laboratorios acompañan la tendencia por evitar los químicos y tener líneas dirigidas a lo orgánico.

“Hoy el mundo se orienta a cuidar la salud, volver a la esencia y transformar la visita a la peluquería en una experiencia, un momento de relax que permita resetearse de todo”, señaló.

Finalmente, Falero resaltó la importante del salón de belleza como un lugar donde liberar tensiones, pausar los problemas y disfrutar de una experiencia de belleza y de una caricia al equilibrio emocional.