Scotiabank busca capitalizar las oportunidades de crecimiento

EDICIÓN ESPECIAL 2019

Horacio Correge, Country manager y CEO de Scotiabank Uruguay


La evolución del crecimiento en determinadas líneas abre buenas perspectivas para reafirmar allí el negocio del banco y esperar un repunte de las pymes y del agro, dos sectores que mueven la economía. 

 ¿Cuáles son las expectativas que tiene para el banco en 2020, teniendo en cuenta, no solo el cambio de administración de gobierno, sino también la desaceleración regional y mundial de la economía?

Luego de un 2019 de escaso crecimiento se espera un repunte moderado de los indicadores de la economía. La planta de UPM 2 movilizará el sector de construcción y afines, lo que derramará en un crecimiento del producto cercano al 2%.

 En medio de un contexto de desaceleración o de menor crecimiento tanto en Uruguay como en la región, ¿qué líneas de negocio ve con posibilidades de crecimiento en el país?           

Hay sectores en los que el banco ha venido desempeñándose bien y aspiramos a seguir en la misma línea. Dentro del segmento minorista, esperamos continuar creciendo en el negocio de medios de pago a través de nuestra propuesta de valor. También nos ha ido bien en productos como préstamos inmobiliarios y automotores, por lo tanto, la expectativa es de seguir con un buen desempeño. Tenemos el deseo de que el sector pymes pueda recuperarse, en tanto vemos buenas perspectivas para el agro. En grandes empresas continuaremos con nuestra política prudente de manejo de los riesgos, y poniendo énfasis en la prestación de servicios de valor agregado.

¿Cuáles son los desafíos que tiene por delante el banco, y cuáles son los temas de mayor preocupación?

De manera general, atender los temas de competitividad para Uruguay que aseguren la viabilidad de las empresas. A nivel específico del banco, la gestión de los riesgos no financieros, incluyendo temas de cyberseguridad y combate al lavado de activos. También poder capitalizar las oportunidades de crecimiento y el cuidado de los costos.

¿Cómo observa el proceso de bancarización? ¿Ve algún riesgo de que pueda enlentecerse su marcha?

El nuevo gobierno electo ha anunciado su intención de introducir modificaciones a la Ley de Inclusión Financiera, derogando la obligatoriedad del pago de haberes en cuenta bancaria. Esto no necesariamente creará un retroceso en el proceso de bancarización en la medida en que los pagos de haberes transitaran en cada caso por los canales más eficientes, sobre todo, atendiendo a razones de conveniencia, seguridad, cercanía física y, por supuesto, costos.