Carlos Saccone indica que es necesario tener siempre un portafolio diversificado

Carlos Saccone, contador, Head of Wealthde HSBC Uruguay y columnista de Empresas & Negocios


Una combinación de inversiones es la forma más eficiente de minimizar riesgos. Ante la decisión, dos aspectos son fundamentales: patrimonio disponible y perfil de riesgo. Esto, sin perder de vista que invertir es una decisión estratégica de largo plazo.

¿Qué hay que tener en cuenta a la hora de invertir en tiempos de turbulencia? ¿Cómo tomar las mejores decisiones?

Hay que tener en cuenta, primero, cuál es mi patrimonio disponible para invertir; y segundo, cuál es mi “perfil de riesgo”, o sea, cuánto riesgo estoy dispuesto a asumir para lograr un retorno de X.  El “riesgo” se mide a través de los desvíos desde los retornos esperados, es decir, cuánto varían los retornos.  Al variar pueden existir periodos que se transformen en negativos. ¿Tengo el estómago suficiente para ver que mis inversiones cayeron 25% en determinado momento? ¿Sí o no? ¿Qué haría si eso sucede? Para imaginármelo, solo hay que irse un par de meses para atrás… Mi respuesta emocional puede ser determinante para no “convertirme en mi peor enemigo” cuando vendo presa de pánico o compro víctima de la euforia. Vender barato y comprar caro no es la fórmula del éxito sino, obviamente, al revés.  Pero no tenemos que caer en la “trampa de la especulación”. Un especulador es sensiblemente diferente de un inversor, como lo definiera Benjamin Graham. Un especulador es, básicamente, un apostador que piensa que le puede “ganar” al mercado. Lamentablemente, en general, se dan cuenta de que eso no es posible, perdiendo dinero. Un inversor es alguien serio, disciplinado, con horizonte temporal de largo plazo y  dispuesto a retocar su portafolio ante movimientos del mercado para mantener la exposición al riesgo deseada originalmente, pero no espera duplicar su capital en seis meses, ni mucho menos.

Hay que tener en cuenta un tema también que muchas veces se pasa por alto: la moneda.  ¿Cuál es mi moneda de referencia? En Uruguay, en general, es el dólar. En Uruguay también hay inversiones (pocas) en pesos. Pero no se puede comer la vaca y seguir ordeñándola. Esto es, no se puede medir mis retornos en dólares y lamentarme porque el dólar baja y lo “que me perdí” si hubiera invertido en pesos, o al revés, si tengo pesos y el dólar sube. En general, para inversores locales, lo aconsejable es una porción menor en pesos desde 10 y hasta 25%. Es medio una anomalía de Uruguay por ser una economía bimonetaria

¿Es oportuno arriesgar o esperar?

Dice Warren Buffet que el mejor momento para estar en el mercado es “siempre”. Arriesgar no es contrapuesto a esperar. Todo inversor que realmente lo sea, esto es, que esté dispuesto a dar el paso de “ahorrista” a “inversor”, debe ser consciente de que siempre se incurre en riesgos al invertir. Hoy esperar también puede ser arriesgar, dado que no sabemos que es lo que va a pasar ni mañana ni el año que viene. Lo que sí sabemos es que para períodos largos, gracias a la innovación e iniciativa humana, las economías crecen y no decrecen. En aquellos países que tienen mercados de acciones desarrollados se puede participar de estos crecimientos asignando a estos portafolios un porcentaje en el mercado accionario, el cual dependerá, nuevamente, de las necesidades, apetito por riesgos (en el entendido que acciones son activos volátiles) y preferencias personales.

¿Es conveniente cambiar los objetivos de mi inversión?

No es un tema de conveniencia o no, los objetivos pueden cambiar, sobre todo cuando uno va atravesando diferentes etapas de la vida; los objetivos cambiarán. Es natural que una persona joven en un momento productivo esté más dispuesta a hacer una inversión tal vez más riesgosa pero potencialmente más rentable en el largo plazo. O como estamos muy acostumbrados en Uruguay y Argentina, invertir para tener un flujo de fondos adicional que complemente nuestros ingresos corrientes. En una etapa de la vida más madura lo lógico es que queramos proteger mucho y arriesgar poco lo que hemos conseguido.

 ¿En qué sectores debería invertir en este momento? ¿Qué opciones aparecen como las más seguras?

La recomendación es siempre un portafolio diversificado. Teniendo en cuenta mi perfil de riesgo, será con más o menos activos riesgosos, esto es, una combinación de inversiones. No se ha inventado nada mejor hasta ahora. Es la forma más eficiente de minimizar riesgo para un retorno deseado, o la otra cara de la moneda, maximizar retorno para un riesgo tolerado.  Dicho esto, desde el punto de vista de la rentabilidad en dólares, parece atractivo la opción pesos uruguayos a mediano y largo plazo. Tanto pesos nominales como en UI, dado que pensamos que una vez estabilizada la situación actual, y atentos a los niveles de crecimiento potencial de largo plazo y contexto de tasas de interés, el dólar va a retroceder, tal como sucedió luego de la crisis 2008.  En particular, me gustan los bonos Uruguay 2022 y 2028 en pesos, y 2028 y 2037 en UI.

Aparte de esto, les estamos recomendando a nuestros clientes mirar con atención acciones asiáticas que tienen un gran potencial pensando también en el mediano y largo plazo.  Acciones de Estados Unidos hay que tener, siempre, dado que es el mayor mercado del mundo. A estos mercados lo recomendable es invertir a través de fondos de inversión disponibles en Uruguay desde US$ 5.000.

Algunos analistas dicen que las crisis representan oportunidades. ¿Esto es así cuando se refiere a alternativas de inversión o simplemente se trata de un mito?

Si lo miramos con perspectiva histórica, y hablando estrictamente de mercados financieros, siempre ha sido así. Pero es muy difícil para el inversor minorista, dado que el fondo muchas veces no se ve. Vayámonos una vez más a marzo pasado… Había días que los “circuitbreakers” hacían el trabajo de detener la operativa y el piso no se veía. ¿Cuántos resistieron ese momento?  Muy pocos. Lamentablemente, en estos momentos predomina el “comportamiento de horda” y la gente malvende víctima del miedo. Son muy pocos los que tienen claro que invertir es una decisión estratégica, de largo plazo, y que en el medio va a haber volatilidad; en ocasiones, extrema.

 ¿Hay que mirar a todos los mercados o algunos están vedados ante tanta incertidumbre reinante en estos días?

El inversor individual tiene que mirar los mercados dominantes y la región. Estados Unidos, Europa occidental, sudeste asiático y un componente regional que siempre existe dado el sesgo conocido como “home country bias” o sesgo hacia el país de origen. Esto es, el sesgo no racional que nos lleva a sobreexponernos a activos de nuestro país y/o región con la no siempre real convicción de que “conocemos” el riesgo de donde estamos invirtiendo. Las veces que escuché en los últimos años la frase “yo conozco el riesgo” de personas que estaban invirtiendo en bonos soberanos de Argentina, fueron muchas… Y allí están al borde del noveno default.