La empresa de supergas Megal ha reforzado su planta con un nuevo tanque de 92 metros cúbicos de almacenamiento de gas licuado de petróleo (GLP), lo que representa un aumento del 50% en su capacidad operativa.
La instalación, construida con tecnología de fabricación nacional, refuerza el proceso de envasado, mejora la autonomía y garantiza un suministro continuo incluso en los picos de demanda. “La decisión de ampliar la capacidad de almacenamiento fue impulsada principalmente para mejorar nuestra capacidad de respuesta ante variaciones en la demanda de GLP, especialmente en períodos de alta exigencia como el invierno. Además, se buscó mejorar la eficiencia operativa y fortalecer la logística, asegurando mayor autonomía y flexibilidad para responder a las necesidades del mercado con mayor previsibilidad”, explicó la ingeniera Rossana Buchelli, CEO de Megal.
“Este tipo de inversiones no solo resuelven necesidades puntuales, sino que también marcan una tendencia global. El almacenamiento de GLP se ha convertido en una estrategia clave para enfrentar las variaciones de consumo y, al mismo tiempo, optimizar los costos”, añadió.
La demanda mundial de GLP superó los 350 millones de toneladas en 2023, impulsada principalmente por su uso residencial y comercial en zonas sin acceso a redes de gas natural. En América Latina, el consumo aumentó cerca de un 10% en el último año, con México, Brasil y Chile como los principales consumidores. A esto se suma el crecimiento sostenido en infraestructura de almacenamiento en toda la región, que busca garantizar el suministro y amortiguar la volatilidad internacional.
“El supergas continúa siendo indispensable para calefacción y cocina en la mayoría de los hogares uruguayos. Aumentar la capacidad local de almacenamiento permite asegurar el servicio, incluso frente a las oscilaciones de precios y demanda”, sostiene Buchelli.
Aunque es un derivado del petróleo, el GLP ha sido señalado por organismos internacionales como un combustible de transición, menos contaminante que otros hidrocarburos y clave para mejorar la calidad del aire y la salud en zonas que dependen de leña o carbón. Su versatilidad y facilidad de transporte lo convierten en una alternativa accesible para hogares, comercios e industrias.
“La instalación del nuevo tanque se enmarca dentro de un plan de inversiones que comenzó en el año 2023, orientado a la modernización y fortalecimiento de la infraestructura de Megal. Este plan contempla futuras mejoras en automatización de procesos, en el mantenimiento de los envases y en la seguridad operativa para acompañar la demanda del mercado”, explicó el ingeniero Pablo Cardelino, gerente general de la emprea.
Con la incorporación del nuevo tanque, la capacidad total de almacenamiento de Megal asciende a 264 m³, lo que representa un incremento del 53% respecto a la capacidad anterior de 172 m³. Esta nueva capacidad permite operar con mayor previsibilidad y margen de maniobra, especialmente en contextos de alta demanda.