Sergio Rebollo, presidente de la Cámara Empresarial de Treinta y Tres
Con una de las tasas de desempleo más altas del país, ubicada en el 16,6%, Rebollo repasó las principales barreras al desarrollo que tiene el departamento y tanto la falta de grandes plataformas como la migración del talento capacitado -una suerte de fuga de cerebros a la interna del país- aparecen como los motivos principales. Recomendó la innovación como una posibilidad de mejora y también el hecho de otorgar beneficios a grandes empresas para que desembarquen en territorio olimareño, además de alterar por las tarifas caras y la mercadería de contrabando.
El analista en sistemas formado en Chile y presidente de la Cámara Empresarial de Treinta y Tres, Sergio Rebollo, se refirió al momento que vive el comercio en el departamento. Con un 16,6% de desempleo y una tasa de actividad sumergida, la situación actual sugiere “que las personas no están buscando trabajo” y complejiza el panorama para los comerciantes, según comentó a CRÓNICAS.
“El comercio está muy estancado en el departamento. Aún es muy tradicional y no se ha aggiornado a los nuevos tiempos”, aseveró, en relación al hecho de que la venta por plataformas de internet como Temu y Mercado Libre sumado a el e-commerce han perjudicado las ventas de los negocios locales. Frente a lo anterior, los locales comerciales carecen de “la capacidad necesaria para mantener los mismos precios”.
Otros factores que explican el mal momento y la falta de competitividad en el comercio es que no cuenta con grandes industrias que lo traccionen. Si bien hay una importante zona dedicada al arroz y cementeras como Cielo Azul, no son “grandes industrias como las que están en el litoral”. Respecto al sector rural, el representante de la cámara destacó que “cada vez se reduce más” porque no hay gente que trabaje en los campos, sino que los productores están “usando tecnología y se prescinde de la mano de obra”.
Finalmente, listó el fenómeno de la migración, posicionada en niveles “increíbles”, algo que constituye a Treinta y Tres como el departamento del que la gente se va más: “Las personas formadas a nivel local no encuentran oportunidades y las buscan en Maldonado o Montevideo”, y al hacerlo dejan atrás “el talento menos capacitado”.
De forma paralela, la cámara implementa una variedad de recursos y herramientas para dar respuesta a la situación. En conjunto con el Centro Comercial de Florida, por ejemplo, consiguieron acceder a un fondo para desarrollar una aplicación para la fidelización de clientes. “Generan puntos por las compras y después esos puntos se transforman en dinero para gastar en los comercios locales adheridos a la cámara”, explicó. Según la fuente, “ya más de 50 empresas” empezaron a brindar estos puntos, con lo que “desde la cámara otorgan herramientas a los socios para fidelizar clientes”.
Por otro lado, existen promociones para estimular las compras locales entre las que hay, por ejemplo, una modalidad en la que se sortean motos, bicicletas y automóviles con la compra en comercios locales adheridos al beneficio. También existen “diversas alianzas” con instituciones entre las que se encuentra la UTU, mediante la cual se “genera mano de obra” y dinámicas para aportar una “primera experiencia de trabajo para la juventud”.
“No es suficiente; no tenemos grandes industrias que muevan la aguja y el talento formado se está yendo. Somos conscientes de que debemos subirnos al carro de la innovación y la tecnología para poder competir de forma más igualitaria”, finalizó. En suma, desde la cámara proponen “medidas paliativas” como “capacitar a la gente de más de 45 años de edad que busca reinventarse” o “políticas diferenciadas” que otorguen beneficios tributarios a las grandes empresas que se instalen en el interior. También sugieren un “portal gratuito de facturación electrónica” y “trabajar en red”, en el sentido de interconectar la información a la que acceden las cámaras de todo el país “para levantar datos y poder impulsar políticas públicas en el ámbito tecnológico”.
Según Rebollo, la cámara tuvo la oportunidad de plantear los reclamos y las propuestas al ministro de Economía y Finanzas, Gabriel Oddone, en el encuentro que mantuvo en Artigas a principios de junio. Fue “la primera vez que un ministro se sienta frente a todos los presidentes de cámaras empresariales y centros comerciales”, señaló Rebollo, para luego precisar que también se presentaron reclamos respecto al precio de las tarifas y el problema con el contrabando.
Innovación para enfrentar problemas
En lo personal, Rebollo fundó Indata, una empresa que se presenta como un “ecosistema de soluciones digitales e inteligencia artificial” pensada para todo tipo de negocios y pymes. Al respecto, Rebollo dijo que lo que buscan es “formar y concientizar sobre el uso de la IA de una forma responsable, con el foco en las personas”.
Actualmente se centran en desarrollar “agentes con inteligencia artificial, chatbots, mejorar e incluso automatizar procesos; todo con inteligencia artificial y desarrollo de software a medida que incluye inteligencia artificial”, dijo.
Bajo este paraguas funcionan Agro Indata y 33IA. El primero está orientado en ofrecer soluciones centradas en el agro y el segundo es una “comunidad gratuita que impulsa Indata para ofrecer charlas, divulgar información y ofrecer asesoramientos”.
En 2023 Indata ganó el Premio Mipyme del Año en la categoría “innovación” por parte de la Agencia Nacional de Desarrollo (ANDE). También trabajan con clientes de Chile por intermedio de Indata Chile y funciona con tres empleados. Actualmente trabajan en el desarrollo de una comunidad para padres de niños con TEA, donde habrá un chatbot “empático”, de nombre “Azulito”, representado por una gota del Río Olimar que creó el ilustrador local “Miloco” y está pensado para que acompañe a los usuarios con tips e información actualizada sobre el trastorno del espectro autista.