¿Cómo se posiciona Uruguay ante los cambios en el empleo por la tecnología? La visión de un experto

Se publicaron cerca de 42.000 oportunidades laborales

En el primer semestre de 2025 se publicaron cerca de 42.000 oportunidades laborales, el nivel más alto para este período desde 2019. Aunque la demanda creció 24,5% interanual, el segundo trimestre mostró señales de desaceleración. Ventas, Tecnologías de la Información y Logística lideraron el impulso, mientras que el mercado exige cada vez más habilidades emergentes como IA, creatividad y liderazgo para afrontar la transformación laboral.


El Monitor Laboral de Advice, en su edición especial del primer semestre de 2025, reveló un escenario mixto para el empleo en Uruguay. Si bien se alcanzó uno de los niveles más altos de oportunidades laborales desde que comenzó la serie en 2019, los indicadores muestran señales de desaceleración y un cambio profundo en las habilidades que las empresas buscan en los candidatos.

Entre enero y junio se publicaron cerca de 42.000 oportunidades de empleo en portales y medios digitales relevados por Advice, el registro más alto para un primer semestre y apenas por debajo del récord histórico del segundo semestre de 2022. En comparación con igual período de 2024, la demanda creció un 24,5%, lo que significa más de 8.200 nuevas vacantes.

El buen desempeño de la economía en el arranque del año —con un crecimiento del PIB del 3,4% en el primer trimestre y otros indicadores favorables— impulsó este resultado. Sin embargo, el segundo trimestre mostró un freno: la demanda se contrajo 1,1% respecto al primero, y la tasa de crecimiento interanual cayó de 29,4% a 19,9%.

Para Federico Muttoni, director de Advice, la inflexión se explica por un ajuste de expectativas empresariales y un contexto global adverso. En diálogo con CRÓNICAS, sostuvo que “en abril, el Banco Mundial y el FMI recortaron sus proyecciones para Uruguay en 2025, en un escenario de volatilidad internacional, tensiones geopolíticas y proteccionismo comercial”. Además, la asunción del nuevo gobierno en marzo generó una “actitud de cautela en la mayoría de los empleadores”, señaló. Encuestas de Exante, la Cámara de Comercio y la Cámara de Industrias reflejan el mismo “pesimismo”, con las proyecciones de contratación en su nivel más bajo desde el año 2020.

Sectores que impulsan el empleo

El crecimiento de la demanda fue generalizado, abarcando a los cinco grandes grupos de actividades, que concentraron el 78% de las vacantes. Ventas, Gestión Comercial y Marketing lideró el ranking, con un alza interanual de 25,2% y el 27% del total de oportunidades.

En segundo lugar, Tecnologías de la Información (TI) tuvo el mayor salto proporcional: 38,1% interanual, recuperando el segundo puesto en generación de empleo (16% del total) tras dos años de contracción global. Este repunte se explica tanto por el auge de Ciencia de Datos e Inteligencia Artificial (IA) como por la reactivación de áreas tradicionales como Infraestructura y Desarrollo de Software.

Logística y Transporte creció 28,7%, apalancado por el comercio electrónico y las exportaciones; Industria, Construcción y Oficios aumentó 14,3%, en línea con la mejora en la producción y el empleo industrial; y Turismo, Hotelería y Gastronomía, aunque con un peso menor (5% de las vacantes), tuvo un incremento del 44% gracias a una temporada récord con 1,3 millones de visitantes.

El cambio en las habilidades demandadas

La segunda parte del Monitor se centra en la evolución de la demanda de habilidades en los últimos cinco años y su proyección a 2030, contrastando datos nacionales con el informe Future of Jobs del Foro Económico Mundial. La tendencia es la contratación basada en habilidades que gana terreno frente a requisitos tradicionales como formación académica y años de experiencia. De las 20 habilidades analizadas, 17 crecieron en demanda entre 2020 y 2025, con un aumento promedio del 97%.

Las “habilidades emergentes” —ya en fuerte crecimiento y con proyección global positiva— incluyen Ciencia de Datos e IA (+154% en Uruguay), curiosidad y aprendizaje continuo (+384%), pensamiento creativo (+206%), liderazgo (+71%) y empatía y escucha activa (+76%).

Entre las “inminentes” —de bajo crecimiento local pero alta proyección global— figuran alfabetización digital, flexibilidad y resiliencia, proactividad, pensamiento analítico y gestión del talento. En cambio, idiomas, programación y gestión de recursos aparecen “fuera de foco”, con bajo crecimiento o caída, debido a su alta susceptibilidad a la automatización por IA.


Uruguay ante la transformación

Muttoni consideró que el país está bien posicionado para afrontar estos cambios. “Uruguay es pionero regional en IA, con una penetración de habilidades en IA casi cuatro veces mayor al promedio latinoamericano y un alto nivel de graduados en carreras STEM —Ciencias, Tecnología, Ingeniería y Matemáticas, por sus siglas en inglés—. Ocupa el puesto 19 entre 138 países en el Índice Global de IA Responsable y cuenta con una Estrategia Nacional de IA desde 2024, destacó”.

El desafío, advirtió, será invertir en el desarrollo de competencias emergentes e inminentes para que la fuerza laboral se mantenga competitiva. De lo contrario, el dinamismo que caracterizó el arranque de 2025 podría no sostenerse, y el balance positivo del año quedaría apoyado exclusivamente en el impulso del primer semestre.