BCU: Sistema financiero “soportaría en promedio un escenario de recesión importante”

Foto: BCU

Aún si se materializara una “recesión importante” en la economía uruguaya, los bancos locales lograrían –en promedio- superarla conservando un patrimonio “razonablemente adecuado”, según un informe del BCU. El mismo da cuenta que los depósitos crecieron en moneda nacional pero cayeron en moneda extranjera, los créditos aumentaron levemente en ambas nominaciones, y la morosidad tuvo un leve descenso ubicándose en 3,6%.

La crisis argentina de 2001 tuvo su canal de contagio a Uruguay a través del sistema financiero. La “corrida bancaria” –el retiro de depósitos de argentinos del sistema financiero- impactó duramente en los bancos uruguayos, sumamente expuestos a los argentinos, y llevó a la crisis del año 2002, con todos los recuerdos negativos que ello trae.

Por eso, al ver cómo Argentina nuevamente enfrenta serias dificultades en su sistema cambiario y que un peso argentino vale en dólares menos de la mitad de lo que valía a comienzos de año, las referencias a un nuevo escenario de crisis son casi ineludibles. Sin embargo, prácticamente la unanimidad de los expertos locales, reafirman la “solidez” del sistema financiero, y casi todos creen que si el golpe llega, no será por la vía bancaria (ver nota).

En la misma línea van los recientes datos del Reporte del Sistema Financiero correspondientes al segundo trimestre del año, que publicó el Banco Central del Uruguay (BCU). De acuerdo al informe la situación de solvencia de las empresas de intermediación financiera radicadas en Uruguay, tenían al 30 de junio de 2018 “un excedente de capital que supera en más de 80% el requerimiento mínimo regulatorio ajustado a riesgos, el que incluye requisitos por riesgo de crédito, de mercado, operacional y sistémico”.

El BCU recuerda que el régimen prudencial de previsiones estadísticas establecido por la Superintendencia de Servicios Financieros (SSF) prevé que los bancos asuman pérdidas de cartera en el auge del ciclo económico para crear un fondo que permita hacer frente al aumento de la morosidad sin necesidad de recurrir a capital adicional en los momentos de recesión. “Las pruebas de estrés elaboradas por la SSF dan cuenta de que el sistema bancario soportaría en promedio un escenario de recesión importante manteniendo un nivel patrimonial razonablemente adecuado”, señala el reporte.

Al ser consultado por CRÓNICAS respecto a la salud del sistema financiero, el presidente del Banco República, Jorge Polgar se limitó a señalar que “el sistema bancario uruguayo está sólido”. “En particular, el Banco República presenta elevados niveles de solvencia y liquidez. Su patrimonio se sitúa en US$ 1.700 millones -un monto récord para el  banco-, tiene activos por US$ 17.000 millones y el resultado acumulado  en los primeros ocho meses del año fue de US$ 330 millones”, detalló el jerarca. “Todas cifras que reflejan la buena salud del banco”, resumió.

Créditos y depósitos

Al analizar los créditos al sector privado residente, se observó en el segundo trimestre del año un aumento de 2.050 millones de pesos para los créditos moneda nacional (+1%) y un incremento de 30 millones de dólares para los préstamos en moneda extranjera (+0,4%). Por su parte, en el año móvil cerrado a junio los créditos al sector privado residente en moneda nacional crecieron $ 17.382 millones (+8,7%) mientras que los créditos en moneda extranjera experimentaron una reducción de U$S 49 millones (-0,6%). “Si se corrige dichas cifras por los efectos del castigo de crédito, la indexación de los créditos en UI y el efecto del tipo de cambio, la variación total del crédito al sector no financiero privado residente medida en dólares resultó positiva (+2,9%) en el año móvil cerrado a junio 2018,  mientras que al considerar solo el segundo trimestre de 2018 el crecimiento fue de 0,8%”, detalla.

En lo que refiere a la morosidad general, se ubicó en 3,6% al finalizar el segundo trimestre, lo que implica una leve baja respecto al trimestre anterior, que se explica por un marginal descenso de la morosidad a empresas e hipotecario que cerraron el trimestre en 3,8% y 1,4% respectivamente. Por su parte, se observó estabilidad en la morosidad de los créditos al consumo, que se ubicó en 4,6%. El endeudamiento de las familias con los bancos y las administradoras de créditos “se mantiene estable en niveles bajos”, ubicándose en un 26% de los ingresos anuales.

En cuanto a los depósitos del sector no financiero privado, en el año móvil cerrado a junio mostraron un aumento de 29.773 millones de pesos en moneda nacional (+15,2%) al tiempo que presentaron un descenso de 426 millones de dólares en moneda extranjera (-2,0%).

Respecto al trimestre anterior, los depósitos en moneda nacional aumentaron 5,9% y en moneda extranjera cayeron 1,2%. “Depurando las variaciones del efecto del tipo de cambio, el total de depósitos medido en dólares creció 0,8% en el año móvil cerrado a junio de 2018 mientras que al considerar solo el segundo trimestre el incremento es de 0,2%”, resume el reporte.

En cuanto al sistema de ahorro previsional acumula fondos por 494.517 millones de pesos (aproximadamente un 28% del PIB) al tiempo que los afiliados superan los 1,4 millones. Cuenta con una rentabilidad bruta medida en UR que asciende en términos del promedio móvil de los últimos 3 años a 4% anual en el caso del Subfondo de Acumulación y a 5,8% anual en el de Retiro.

El Mercado de Valores presentó en el segundo trimestre de 2018 un descenso en el volumen de operaciones de 8% a nivel total (bursátil y extrabursátil) respecto al trimestre anterior, explicado en su amplia mayoría por descenso en las emisiones de certificados de depósitos del sector privado.

Por último, se observa que las empresas de seguros registraron un incremento en la emisión de primas de 1,3% en los últimos doce meses. Las principales ramas en cuanto a volumen de primas en los últimos doce meses fueron vida previsional (27% de primas), vehículos (24%), accidentes de trabajo (20%), y vida no previsional (13%).


Dólar tuvo una semana tranquila

Tras una semana de alta volatilidad, las últimas sesiones del mercado cambiario se desarrollaron con relativa calma, e incluso con una tendencia a la baja del billete verde, que –de todas formas- ayer tuvo un leve incremento en la plaza financiera local.

Cabe recordar que durante el mes de setiembre el dólar en Uruguay se apreció un 2,69%, y en lo que va del año acumula un aumento de 15,02%.

Ayer jueves, tras tres jornadas de leves descensos, el dólar volvió a subir en la plaza financiera para cerrar en 33,08 pesos, lo que implica un aumento de 0,88% respecto al cierre del miércoles. No hubo intervención del BCU en el mercado.

Más allá de la inestabilidad regional, el aumento del dólar tiene su fundamentación en los sólidos datos económicos de Estados Unidos y al discurso agresivo de miembros de la Fed, incluido de su propio presidente, Jerome Powell, que ha repercutido en un aumento de los intereses de los títulos del Tesoro a 10 y 20 años.

En las pizarras del Banco República la divisa estadounidense cerró ayer jueves a 32,34 pesos a la compra y a 33,74 pesos la venta.