La Agencia Nacional de Desarrollo (ANDE) realizó un informe sobre la evolución de la productividad laboral que contempló el período 2008-2022 y mostró una suba en la productividad promedio anual de 3,08%, con un aumento de la mediana de un 0,89% anual para determinados sectores empresariales. Por otro lado, desde la institución remarcaron la importancia de “revisar con detenimiento los marcos regulatorios y los incentivos a la actividad productiva” para generar un incremento de la productividad en todas las áreas dentro del sector.
Con base en los datos de la Encuesta Anual de Actividad Económica (EAAE) del Instituto Nacional de Estadística (INE) se examinó la dispersión y persistencia de la productividad laboral, con foco en el tamaño de las empresas. El estudio, que tomó el período desde 2008 a 2022, reveló, entre otras cosas, un panorama “complejo”, ya que mostró un crecimiento moderado y diferencias significativas entre empresas.
La productividad ha sido de gran relevancia para el sector económico, así como para los empresarios. Según el informe de ANDE, la productividad promedio creció a una tasa anual de 3,08%, mientras que la mediana solo aumentó en un 0,89% anual, con una concentración en empresas específicas.
El tamaño de las empresas
Las empresas grandes son líderes en el crecimiento promedio, con un 4,17% anual, de acuerdo con el estudio. En la misma línea, la mediana está “prácticamente estancada”, con un crecimiento del 0,51% anual, lo que confirma la existencia de una porción de grandes empresas que mantienen una dinámica que impulsa la productividad agregada.
Con un dinamismo mayor al de la mediana, las pequeñas y medianas empresas muestran un crecimiento promedio más moderado, de 2,33% las pequeñas y 1,65% las medianas.
Productividad como centro
El análisis muestra que las empresas con alta productividad son las que mantienen su posición relativa. En la misma línea, la mitad de las que tienen una baja productividad permanecen en los deciles inferiores.
Para mejorar, son importantes las políticas públicas que se desarrollen. Según ANDE, las políticas de desarrollo productivo deben contemplar dos aspectos: promover el crecimiento de la productividad promedio y reducir la variedad existente entre empresas.
El objetivo de estas políticas debe ser reforzar la necesidad de revisar con detenimiento los marcos regulatorios y los incentivos a la actividad productiva, por lo que, para generar mayores niveles de crecimiento y bienestar, se necesita de políticas de desarrollo productivo que aborden con éxito los aspectos de heterogeneidad y persistencia.
La brecha productiva
En lo que respecta a las conclusiones del informe de ANDE en relación a las empresas, se indica que las del percentil 90 son casi nueve veces más productivas que las del percentil 10, incluso dentro del mismo sector de actividad, lo que genera una dispersión que se mantiene elevada incluso entre empresas grandes y del mismo rubro.
Una investigación para el desarrollo
ANDE buscó, a partir de esta investigación, reafirmar su compromiso a través de la generación de conocimiento aplicado al desarrollo productivo del país.
La agencia constituye cada vez más un actor clave en el análisis de las dinámicas empresariales, que brinda evidencia empírica fundamental para el diseño de políticas públicas efectivas, para tratar de comprender las dinámicas del tejido empresarial nacional y contribuir al diseño de instrumentos de apoyo para el desarrollo del sector productivo.
