“Siete de cada 10 empresas esperan que sus ventas se mantengan o caigan en el próximo trimestre”

Informe de actividad de comercio y servicios indica “terreno pesimista”

La Cámara de Comercio y Servicios de Uruguay (CCSU) presentó el informe de actividad correspondiente al segundo trimestre de 2023, donde fueron registrados 20 rubros y se observó una caída de -0,1% en la comparación interanual. Al respecto, Ana Laura Fernández, asesora económica de la cámara, dialogó con CRÓNICAS y dijo que los resultados obtenidos marcan el ingreso en una fase de “estancamiento” y crecimiento nulo, y resaltó el pesimismo existente respecto de los próximos meses.

Con un total de 501 empresas relevadas, que ocupan a 15.923 trabajadores en 873 locales y 20 rubros comprendidos, la CCSU registró en el segundo trimestre del año 2023 una caída de -0,1% en términos interanuales.

Este dato negativo se contrasta con los resultados de las ventas obtenidos en trimestres previos, donde se habían observado tasas moderadas pero positivas.

“En líneas generales no sorprende, era algo conocido que el sector comercio y servicios está atravesando una fase compleja a nivel de actividad por diferentes motivos, con lo cual estos resultados que nos muestran el ingreso en una fase de estancamiento o de crecimiento nulo, coincide con este escenario de menor actividad que nosotros ya venimos viendo trimestre a trimestre y también siguiendo otros indicadores de actividad, como lo es la recaudación del IVA, que es un determinante directo del comportamiento del consumo interno de nuestra economía”, declaró Ana Laura Fernández, economista y asesora económica de la cámara.

En cuanto al sector servicios, el informe arroja un escenario recesivo para Montevideo y el interior, siendo que en la capital, luego de tres trimestres seguidos de crecimiento, se registró una caída de -3,6%.

Un paneo de la realidad según los rubros

Si se discrimina por rubros, se observa que de los 20 segmentos relevados, 14 registraron una caída en sus niveles de venta y seis ingresaron en una fase de crecimiento, si se realiza una comparación interanual.

Al respecto, la economista dijo que lo que sí se mantiene igual que en trimestres anteriores, es que “cuando se observan los diferentes rubros analizados, la mayoría de ellos están en peor situación que el agregado”, es decir, que la mayoría de ellos están en una fase contractiva, registrando una caída en sus niveles de venta.

De los 14 rubros que se encuentran en una fase contractiva, se debe resaltar que muchos de ellos, en informes anteriores, ya habían registrado caídas consecutivas. Particularmente, el caso de Muebles y Accesorios para el Hogar, Materiales de Construcción y Ferretería, que están asociados al consumo familiar, han registrado caídas de hasta seis trimestres consecutivos.

En contrapartida, los rubros que lograron revertir su situación y obtener resultados positivos fueron Hoteles, Deportes y Vehículos y Repuestos Automotores. En tanto, aquellos cuyos números variaron de forma negativa fueron Agencias de Viajes, Jugueterías y Minimercados.

La situación por tamaño y localización

Si se divide la muestra entre las empresas localizadas en Montevideo y en el interior, se observa una diferencia interesante: la variación interanual de las ventas reales de las empresas en Montevideo fue de 1,3%, manteniendo su estabilidad respecto al anterior relevamiento, y la variación para las empresas localizadas en el interior fue de -4,9%, que padecieron una desmejora con respecto al crecimiento de 2,2% relevado en el primer trimestre de 2023.

“Con respecto a la caída del interior, hoy la principal variable negativa tiene que ver con el corrimiento del consumo y en particular con la situación en las fronteras, no solamente con Argentina, sino también con Brasil, lo que claramente se refleja en los datos en todos los niveles. Las empresas del interior también son las de menor tamaño, que son las que registran los peores guarismos”, analizó Fernández.

Para terminar de entender la complejidad del problema, se debe diferenciar entre empresas grandes y de menor tamaño, donde a nivel general se observa un escenario contractivo generalizado, con la excepción de las empresas grandes que registraron una variación de 2,3% en este trimestre.

Por su parte, las micro y pequeñas empresas, tuvieron los peores resultados, presentando variaciones de -9,5% y -7,6% respectivamente. A este dato se debe agregar que la mayoría de estas empresas se encuentran localizadas en el interior, lo que explica la diferencia entre Montevideo y el resto del país.

Perspectivas a futuro

En lo que tiene que ver con las expectativas para los próximos trimestres, los números presentan un “leve deterioro” respecto al comienzo del año, pero no hay “grandes cambios”.

“Estamos en un terreno pesimista, siete de cada 10 empresas esperan que sus ventas se mantengan o caigan en el próximo trimestre, por lo que hay un escenario donde está pesando fuertemente el hecho de mantener la situación o que caigan aún más sus niveles de venta”, remató la economista.


El factor Argentina

“Claramente la situación con Argentina se está profundizando y permanece en el tiempo, con lo cual los impactos están siendo de mayor magnitud trimestre a trimestre”, señaló la entrevistada con respecto a la situación del país vecino.

En este sentido, confesó que cuando el informe del segundo trimestre de 2023 se culminó, los resultados de las elecciones internas de Argentina “aún no estaban tan internalizados en las respuestas”.

“La situación en la vecina orilla, a priori, podría volver aún más pesimistas las expectativas para 2023. Claramente el escenario con Argentina, lejos de solucionarse, hoy parecería que va a empeorar, lo que impacta en decisiones de consumo y en personas que deciden ir a pasar un fin de semana a Buenos Aires, con lo cual vemos un deterioro que quizás se profundice de acá a fin de año y en términos de resultados económicos para el sector, tampoco esperamos cambios”, aseveró Fernández.