Uruguay tuvo en 2024 “uno de los peores años que se recuerdan en términos de recepción de IED”

Inversión extranjera directa (IED) en América Latina y el Caribe aumentó 7,1%

En 2024 las entradas de inversión extranjera directa (IED) en América Latina y el Caribe alcanzaron un total de US$ 188.962 millones, un 7,1% más que en 2023, según el informe anual elaborado por Cepal. En el caso de Uruguay, el año pasado tuvo “uno de los peores años que se recuerdan en términos de recepción de IED”, aunque se aclara que el valor promedio anual de la década actual (US$ 1.400 millones) se mantiene similar al promedio de 2010-2019. En 2024, el sector de transporte y almacenamiento representó el 45,9% de los anuncios de inversión, seguido del sector de los servicios financieros (21,6%).

En 2024 las entradas de IED en América Latina y el Caribe alcanzaron un total de US$ 188.962 millones, un 7,1% más que en 2023, según el último informe anual elaborado por la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal). Esta cifra representó, en promedio, el 13,7% de la formación bruta de capital fijo de la región, y el 2,8% del PIB en 2024, valores inferiores a los registrados en la década de 2010, cuando su participación alcanzó el 16,8% y el 3,3%, respectivamente.

Según el análisis de los componentes de la IED, el crecimiento de 2024 fue impulsado por las empresas transnacionales que ya operaban en la región, principalmente por aumentos en la reinversión de utilidades, mientras que los aportes de capital continúan estancados, lo que refleja el bajo interés de nuevas empresas por localizarse en la región. Por otra parte, los anuncios de proyectos subieron por el gran impulso de las inversiones en hidrocarburos y han perdido participación las energías renovables y sectores de mayor intensidad tecnológica.

De acuerdo con la publicación, en 2024 las entradas de IED crecieron en el Caribe, Centroamérica y México, mientras que los resultados en los países de América del Sur fueron desiguales.

El alza de las entradas en Brasil (13,8%) y México (47,9%), que ocuparon el primer y segundo lugar como receptores de IED, con el 38% y 24% del total, respectivamente, fue determinante para el resultado regional. En tercer, cuarto y quinto lugar se ubicaron Colombia, Chile y Argentina, respectivamente; sin embargo, en los tres casos, las entradas de IED fueron inferiores a las de 2023.

En el caso de Uruguay, registró entradas negativas de IED por segundo año consecutivo, aunque estas pasaron de US$ -5.372 millones a US$ -2.457 millones. Estas cifras se debieron en gran parte a los préstamos entre empresas, a pesar de que las entradas negativas se redujeron un 30%. La reinversión de utilidades aumentó un 174% con respecto a 2023, y se convirtió en el principal componente positivo, mientras que los aportes de capital disminuyeron un 4%. Los anuncios de proyectos en Uruguay cayeron un 93,4% en 2024, hasta los US$ 300,8 millones.

“Aunque 2024 fue uno de los peores años que se recuerdan en términos de recepción de IED, el valor promedio anual de los anuncios en el país en la década actual (US$ 1.400 millones) se mantiene similar al promedio de 2010-2019”, destaca el informe de Cepal.

En 2024, el sector de transporte y almacenamiento representó el 45,9% de los anuncios de inversión, seguido del sector de los servicios financieros (21,6%).

El mayor inversor

EEUU consolidó su posición como el mayor inversionista de la región, responsable de un 38% del valor invertido en 2024. La participación de la Unión Europea -excluyendo a Luxemburgo y Países Bajos- cayó hasta el 15% del total regional en 2024, la cifra más baja desde 2012. Las inversiones procedentes de América Latina y el Caribe representaron el 12% de las entradas de IED, convirtiéndose en el tercer origen. Por su parte, la IED china representó solo el 2% de las entradas totales en 2024. No obstante, la Cepal aclara que solo una pequeña proporción de las entradas de IED provenientes de China son consignadas en las estadísticas de la balanza de pagos, ya que un número significativo ingresa a través de terceros países; otra gran parte ha sido en forma de compras de activos que ya eran propiedad de empresas extranjeras o en modalidades que no constituyen IED (por ejemplo, concesiones o contratos de construcción).

El secretario ejecutivo de la Cepal, José Manuel Salazar-Xirinachs, sostuvo que la región debe aprovechar la IED “para alcanzar un desarrollo más productivo, inclusivo y sostenible”. “En el informe incluimos una serie de lineamientos que pueden ayudar a mejorar las capacidades técnicas, operativas, políticas y prospectivas de los países y sus territorios en materia de políticas orientadas a la atracción de inversiones y la generación de un impacto positivo en el desarrollo productivo”, subrayó.

Las translatinas

Con respecto al comportamiento de las empresas transnacionales latinoamericanas (conocidas como translatinas), el informe muestra que las salidas de IED desde la región aumentaron un 47% en 2024, alcanzando un total de US$ 53.033 millones. Brasil fue el mayor inversionista en el exterior (46% del total), a pesar de experimentar un ligero descenso de las salidas de IED (-3%), mientras que las inversiones procedentes de México mostraron el mayor crecimiento.


Minería: pese a su potencial, la región no logra generar un mayor valor agregado

El informe de la Cepal dedica uno de los capítulos a la IED del sector de minería, con foco en el segmento de minerales críticos para la transición energética. La región, señala el organismo, mantiene una posición mundial destacada en materia de reservas, producción y exportaciones de minerales críticos, en particular de cobre y litio, lo que ofrece una oportunidad inédita para atraer nueva IED y, simultáneamente, implementar políticas de desarrollo productivo.

Entre 2005 y 2024 se registraron 1.152 anuncios de proyectos de IED en los sectores de minerales y metales en la región, por un monto total de US$ 230.065 millones. El 84% del valor total de estos anuncios se concentró en cuatro países: Chile, Perú, Brasil y Argentina, mientras que el 24% del número total de proyectos correspondió a minerales críticos (42% del monto anunciado). Los anuncios de IED en minerales críticos en el período 2005 a 2024 provinieron principalmente de Canadá y Reino Unido (ambos con un 20%), seguidos por China (14%) y Australia (11%).

Sin embargo, Cepal plantea que, en materia de producción y atracción de IED, América Latina y el Caribe no ha logrado seguir el ritmo de otras regiones, a excepción del litio, y que este protagonismo no trajo aparejado una mayor diversificación de la canasta exportadora. Según datos de comercio correspondientes al período 2019-2023, el 62% de las exportaciones de minerales críticos de la región correspondió a productos sin procesamiento o con un procesamiento de refinación básico.

La escasa diversificación productiva relacionada con la minería en la región revela que, en general, los países de la región no han logrado articular sus instrumentos de atracción de IED con sus políticas de desarrollo productivo. De esta manera, a pesar de contar con importantes capacidades productivas en la minería en general, y en los minerales críticos en particular, la región aún no ha logrado traducir todo ese potencial en mayor valor agregado y eslabonamientos productivos relacionados con los minerales críticos.