Desde que el Frente Amplio (FA) llegó al gobierno, es la primera vez que deberá afrontar una instancia presupuestal sin mayoría parlamentaria. Si el debate por el Presupuesto que se dio en 2015 se complicó porque algunos sectores del propio FA no se ponían de acuerdo con la propuesta del gobierno, esta vez la desventaja es mayor: a la coalición de izquierda le falta un voto y la oposición pone condiciones para votar la Rendición de Cuentas.
Por Magdalena Raffo | @MaleRaffo
Consultado por CRÓNICAS sobre la posibilidad de que el Partido Nacional (PN) acompañe la Rendición, el senador de esa fuerza política, Javier García, afirmó que “el primero que tiene que ponerse de acuerdo consigo mismo es el oficialismo, porque hasta ahora no hay una sola letra escrita” para ese proyecto.
“El oficialismo acusa a la oposición de no querer votar algo sobre lo cual todavía el propio FA no se ha podido poner de acuerdo. El FA en vez de mirar a la oposición debe mirarse a sí mismo y llegar a un acuerdo que, por lo que se ve públicamente, no es tan fácil”, agregó.
El legislador sostuvo que si la Rendición de Cuentas plantea un aumento de la carga tributaria, los blancos no la van a votar porque no sería responsable para la economía del país.
Un problema serio
El senador y líder colorado, José Amorín, dijo en diálogo con CRÓNICAS que el Partido Colorado (PC), al igual que ha hecho en instancias anteriores, votará afirmativamente los artículos con los que concuerde.
A su vez, puntualizó que “es mejor que no haya Rendición a que haya una mala Rendición”, y criticó fuertemente el déficit fiscal, que representa “un problema muy serio para el país”.
Por el contrario, el diputado del PC, Fernando Amado, en una entrevista con Montevideo Portal se mostró dispuesto a negociar y adelantó que su sector, Batllistas Orejanos, evaluará prestar su voto para aprobar la iniciativa.
No quiere negociar
El senador y presidente del Partido Independiente (PI), Pablo Mieres, expresó en entrevista con CRÓNICAS que la temprana discusión presupuestal se debe, entre otros motivos, a la falta de agenda del gobierno de Tabaré Vázquez, cuya “única apuesta” es la inversión de UPM.
Mieres puso en duda que finalmente se llegue a un acuerdo para aprobar la normativa, dado que por un lado “el gobierno no quiere negociar nada” y, por otro, “es muy difícil que en la oposición haya votos para aprobarla”.
“Lo peor para el país es votar un Presupuesto irresponsable, la segunda opción es hacer un Presupuesto serio, la tercera es no tenerlo y seguir de largo con el piloto automático”, opinó el parlamentario.
“No voy a votar cualquier cosa”
Gonzalo Mujica, quien meses atrás se alejó de la bancada oficialista y permanece en Diputados como independiente, explicó en conversación con CRÓNICAS que va a negociar “todo lo que sea necesario” con la fuerza política de izquierda.
“Al presidente del FA [Javier Miranda] le manifesté que tiene que haber Rendición de Cuentas. Me parece que es una pésima estrategia, como algunos frenteamplistas están empezando a plantear, que lo mejor que puede pasar es que no haya acuerdo. Si no hay Rendición el gasto público queda cristalizado y se obliga al Estado a seguir financiando las mismas políticas, cuando las necesidades pueden haber cambiado”, apuntó.
De todas formas, en referencia a las declaraciones de la oposición, el representante nacional coincidió en que “no se puede votar una Rendición de Cuentas que sea negativa para el país; tampoco estoy dispuesto a votar cualquier cosa y por eso pongo límites”, aunque aclaró que “la solución no es que no haya Rendición”.
Falta información
Por su parte, el diputado de Unidad Popular (UP), Eduardo Rubio, dijo a CRÓNICAS que está dispuesto a conversar con el FA para llegar a un acuerdo, aunque todavía no puede adelantar si acompañará o no el proyecto presupuestal, debido a la falta de información que tiene la oposición al respecto.
“El gobierno quiere quedar con las manos libres, porque si no hay Rendición de Cuentas no va a haber exigencia de incremento del gasto en ningún rubro, y creo que eso va en la línea de lo que prefiere el ministro [de Economía, Danilo] Astori, que en ese punto opina lo mismo que [el expresidente y senador, José] Mujica”, aunque eso no se refleja en la opinión de otros legisladores del FA. Creo que sería muy malo para el país que no haya acuerdo, porque quedaríamos sujetos a la voluntad omnipotente de Astori y del gobierno de Vázquez, y no habría posibilidad de incidir en nada”, declaró.
Sin embargo, aseveró que no votará un proyecto cuyo contenido sea antagónico con el planteo de UP, plasmado en su programa, sobre cómo resolver los problemas del país.
“El que necesita ayuda es el gobierno”
Daniel Bianchi, senador del Partido de la Gente (PG), que lidera Edgardo Novick, informó a CRÓNICAS que el partido aún no ha tomado posición frente a la votación de la Rendición, y remarcó que el primero que tiene que buscar el diálogo es el Poder Ejecutivo: “Acá el que necesita ayuda y el que tiene que tener la iniciativa para conversar es el gobierno”.
“Nosotros estamos dispuestos a escuchar, pero el presidente debe hablar con todos los partidos de la oposición y a partir de eso tomaremos una decisión. Igualmente las finanzas están muy comprometidas y no vamos a votar algo irresponsable, no podemos seguir aumentando los gastos”, finalizó el legislador.
Las condiciones de la oposición
Para el senador Javier García, el FA “no puede pretender que la oposición le convalide el carnaval impositivo que ha establecido. Si la idea es aumentar impuestos para licuar el déficit fiscal, que es producto de una mala gestión, con nosotros no cuenta”.
Amorín, en la misma línea, exclamó: “No más impuestos a nadie, se terminó. Uno de los problemas que tiene el FA es que lo único que se le ocurre es poner más impuestos para ver cómo gastar más, siempre pensando cómo sacarle plata a la gente”.
Por su parte, Mieres, además de que no votará la Rendición si hay aumento de impuestos o del gasto, puso como condición que se sustituya a las autoridades del Codicen, para poder finalmente comenzar un cambio en la educación.
El diputado Mujica sostuvo que tampoco está dispuesto a discutir nuevos impuestos. “La sociedad está al límite de su capacidad contributiva, y no voy a votar gasto público que implique un aumento del déficit fiscal. En tercer lugar, dentro del gasto público, creo que hay que hacer reasignaciones en dirección a sectores que han sido postergados durante 12 años en el tratamiento presupuestal, particularmente dos: el sueldo de los militares activos y los topes jubilatorios que rigen en el BPS”, añadió.
Eduardo Rubio manifestó que si el FA quiere colocar definitivamente el 6% del PIB para la educación –para ANEP y UdelaR-, lo va a votar porque está en el programa de Unidad Popular. Lo mismo si el oficialismo propone eliminar la Ley de Inversiones, o por lo menos quitar algunas de las “vergonzosas” exoneraciones fiscales que tiene el capital extranjero. “Ahora, si la propuesta es recortar el gasto público, quitarle plata a la salud, a la vivienda, seguir postergando los recursos para la educación, nuestro voto no va a estar”, acotó.
En tanto, Daniel Bianchi afirmó que para el partido de Novick “es claro que no puede haber más gastos, y menos con el déficit que hay, pero el gobierno nos tiene que decir cuál es su propuesta, sobre todo teniendo en cuenta que le falta un voto”.