Proyecto de Regulación de Plataformas Tecnológicas “arriesga frenar” economía digital, según Goñi

EMPRENDEDORES URUGUAYOS > Impulsarían su negocio fuera del país en caso de que la normativa se apruebe sin cambios

El diputado nacionalista Rodrigo Goñi, presidente de la Comisión Especial de Innovación, Ciencia y Tecnología de la Cámara Baja del Parlamento, sostuvo a CRÓNICAS que el Proyecto de Regulación de las Plataformas Tecnológicas que obtuvo media sanción el pasado 7 de diciembre, configura un desestimulo a la creación y uso de aplicaciones digitales, por lo que la misma generará un “grave riesgo” de frenar el desarrollo de la economía digital y, por lo tanto, la economía nacional.

Por Anahí Acevedo | @PapovAnahi

Durante la jornada del miércoles 7 de diciembre la Cámara Baja del Parlamento brindó media sanción al proyecto propuesto por el diputado frenteamplista José Carlos Mahía que propone regular las plataformas tecnológicas. Los votos fueron otorgados únicamente por la bancada oficialista, logrando 60 sobre 68, lo que significó suficiente para el paso de la futura normativa a Senadores.

Entre las voces discordantes está la del legislador del Partido Nacional (PN) Rodrigo Goñi, quien manifestó a CRÓNICAS su oposición al proyecto puesto que entiende que en lugar de disponer una regulación que promueva el desarrollo de la economía digital, la normativa contiene disposiciones que arriesgan frenarla.

En este sentido, el parlamentario expresó tres artículos que contiene el proyecto que configuran “deficiencias graves” y que implican un “riesgo alto, grave, innecesario e injustificado” de detener a los emprendedores en la creación de aplicaciones.

Goñi se refirió al Artículo 2 de la propuesta, que expresa que se aplicará a los servicios prestados por plataformas tecnológicas la misma normativa que se dispone para un servicio brindado en forma tradicional. “Esa aplicabilidad general, como regla, asfixia y ahoga la innovación, porque lo nuevo no puede ir con regulaciones viejas”, consideró.

Además, señaló, el Artículo 6 prevé que quedará librada la reglamentación sobre qué tipo de información puede exigir un organismo estatal que corresponda a una plataforma. “Hay voces que lo alertan como una trampa para el emprendedor tecnológico”, observó.

Añadió que en temas importantes la ley debe ser precisa y que no se puede pedir ningún tipo de información que esté relacionada con los datos personales del usuario ni con datos sensibles comerciales para el emprendimiento. “Las regulaciones del mundo te mandan a hacer eso. Si no, se cae”, declaró.

La tercera “deficiencia grave” radica en la posibilidad de una sanción “totalmente desproporcionada” del cierre de cuenta, “y de trasfondo del establecimiento”, ante cualquier normativa, según Goñi. “Esto es una espada de Damocles, es inconstitucional, gravemente desproporcional y se percibe como una amenaza ante un emprendedor”, valoró.

Consultado sobre la votación que solamente contó con el apoyo del FA, el diputado dijo que “fue un error”, debido a que entiende que es una materia de política de Estado. “Todo lo que está en juego con una regulación de la economía digital no puede ser mirada en el corto plazo ni afecta a un sector limitado”, aseveró.

Agregó que los beneficios que hay detrás “son demasiado importantes” como para no tomarlo como una política de Estado, por lo que el camino tomado es “equivocadamente doble”. De esta forma, destacó que esta normativa resulta inconveniente desde el punto de vista de sus impactos concretos y desde la mirada política.

Igualmente, sostuvo que le preocupa la “cantidad” de emprendedores uruguayos que anunciaron que si la regulación definitivamente se aprueba sin cambios impulsarán su emprendimiento fuera del país.

Goñi opinó que el Estado debe buscar un nuevo rol de regulación que tenga un rumbo más dirigido a colaborar y coordinar con el mundo digital, y que no debe hacerlo desde una perspectiva centralizadora y controladora. “Tiene que ser una regulación minimalista que vaya orientando con principios por dónde debe ir ese fenómeno. Hay cuestiones que son imprevisibles, no se puede pretender una regulación detallista”, aseguró.

Asimismo, afirmó que en el mundo digital hay una gobernanza colectiva, por lo que el parlamento debe ir buscando, junto con agentes protagonistas del mundo de internet, nuevas formas. “En este caso, estas disposiciones que objetamos van contra esa gobernanza colectiva”, concluyó.