Se fue un año marcado por denuncias de corrupción y los partidos miran para adelante

Balance > PARA LA OPOSICIÓN EL 2017 FUE MALO, PERO EL OFICIALISMO DESTACA SUS LOGROS

No es la primera vez que las conductas de políticos reñidas con la moral trascienden, pero sí es una particularidad del año que se fue. En 2017 gran parte del sistema político se vio salpicado por hechos vinculados a actos con visos de corrupción y en los que la ética política fue duramente cuestionada, pero los partidos involucrados miran para adelante.

Por Magdalena Raffo | @MaleRaffo

El primer golpe se lo llevó el Partido Colorado (PC) con el Cambio Nelson, lo que llevó a la cárcel a su ex diputado suplente, Francisco Sanabria. Más tarde tomó fuerza el “caso Sendic”, que tras una seguidilla de tropiezos, derivó en la caída del vicepresidente de la República. El Partido Nacional (PN) no se quedó atrás. Fue el último en verse sacudido por un episodio también vinculado a hechos con apariencia de corrupción, que tiene como protagonista al intendente de Soriano, Agustín Bascou.

Desde el oficialismo reconocen que el año para el Frente Amplio (FA) estuvo cargado de experiencias difíciles desde el punto de vista político, aunque aseguran que fueron sorteadas con reconocimiento, audacia y firmeza. Una de ellas fue la renuncia de Sendic, suceso calificado por la senadora Mónica Xavier en conversación con CRÓNICAS, como uno de los más “dolorosos” que ha vivido la fuerza política, que hoy apuesta a “recuperar el tiempo invertido en la solución de ese problema”.

En el PN también destacan esta dimisión como un hecho histórico, que se desencadenó en medio de denuncias por corrupción, un fallo muy “fuerte” y “condenatorio” por parte del Tribunal de Conducta Política frenteamplista, y otro de la Jutep (Junta de Transparencia y Ética Pública). Para el senador Álvaro Delgado, además, el desenlace “tuvo mucho que ver con la Investigadora que se generó en el Senado”, dijo a CRÓNICAS, en referencia a la Comisión que indagó sobre la situación económica y financiera de Ancap.

Sobre el partido que integra el legislador pesa el “caso Bascou”, aunque prefirió quitarle trascendencia considerando que el Directorio ya laudó el tema. Cabe recordar que la semana pasada, el órgano nacionalista ratificó el apercibimiento al intendente en una votación dividida, pese a que el sector Todos, que lidera Luis Lacalle Pou, pretendía suspenderlo hasta que la Justicia se pronunciara. Delgado afirmó que aún no tiene claro cómo este hecho repercutió en la fuerza política, pero se mostró satisfecho con la existencia del proceso judicial.

Al igual que el FA, que pretende recuperar el tiempo y poner la energía en lo que se viene, los blancos también miran para adelante. El partido está “movilizado”, “motivado”, y cuenta con sectores “muy dinámicos” como el de Lacalle Pou, que tiene un “liderazgo marcado”. Así lo dijo Delgado, y recordó el suceso “casi histórico” de la elección juvenil ocurrida en setiembre de 2017, de la cual participaron unos 70.000 jóvenes.

El senador colorado José Amorín, en diálogo con CRÓNICAS, se refirió en la misma línea que su colega blanco a la caída de Sendic. Hizo énfasis en que fue la primera vez en la historia de nuestro país que renunció un vicepresidente, con la agravante de que lo hizo acusado de corrupción, “inclusive desde su propio partido”.

El PC empezó el año golpeado con la quiebra del Cambio Nelson y la fuga de su propietario, Francisco Sanabria, en ese entonces también secretario general del partido en Maldonado y diputado suplente de Germán Cardoso. Pero, según Amorín, el hecho fue resuelto rápidamente por las autoridades coloradas con su expulsión.

Los colorados prefieren no darle demasiada trascendencia al caso, y ponen la mira en 2019. Aunque Pedro Bordaberry renunció a participar en la próxima elección y el anuncio desestabilizó en su momento a la fuerza política, hoy esa mala noticia “se está volviendo una oportunidad para el PC”, aseguró Amorín. ¿La razón? El abandono de Bordaberry permitió el surgimiento de varios posibles candidatos que ya están recorriendo el país, explicó el líder del Proba.

Por su parte, el senador y líder del Partido Independiente (PI), Pablo Mieres, sostuvo a CRÓNICAS que el 2017 fue un año “malo” para la política, marcado por las reprobables conductas de actores políticos, particularmente del gobierno. En este sentido, remarcó que hay una gran diferencia entre el caso de Ancap y el de las estaciones de servicio de Bascou, en cantidad de dinero y multiplicidad de irregularidades, aunque se busque empatarlos. “Si a eso le agregamos el Fondes, los negocios con Venezuela, ASSE y el Cambio Nelson, cerramos un año malo”, aseveró, y opinó que el PN manejó muy mal la crisis de Bascou, que se le convirtió en un gran problema por su incapacidad de resolverlo con rapidez y firmeza.

Mónica Xavier: “Debemos recuperar el tiempo invertido en la solución del problema de Sendic”.

El parlamentario, que sigue firme en la búsqueda de generar un polo socialdemócrata en torno al PI y sectores moderados del resto de los partidos –lo que se definirá a mediados del 2018-, terminó el año con la presentación de una serie de propuestas al presidente Tabaré Vázquez y al sistema político, con el fin de impulsar medidas de transparencia y control sobre la gestión pública, puesto que “en el tema ético hay un debe importante”.

Balance de gobierno

Mientras que para el oficialismo el balance de este tercer año de gestión es positivo, la oposición lamenta que el gobierno pretenda achicar el déficit fiscal a través de ajustes, y que no haya habido avances en materia de inserción internacional. A su vez, si bien todos coinciden en la importancia del acuerdo con UPM, para los partidos opositores es la única apuesta que tiene FA.

Uno de los hechos que sacudió al Parlamento en 2017 fue la pérdida de la mayoría parlamentaria en Diputados, dada por el alejamiento del ex representante nacional electo por el FA, Gonzalo Mujica. Ese inconveniente dificultó el trabajo legislativo, dijo Xavier, pero al mismo tiempo demostró que “vale la pena volver a trabajar por un cuarto período de gobierno con mayorías, porque se puede concretar de mejor manera el programa comprometido con la ciudadanía”.

En el mismo ámbito, la senadora resaltó los avances en la legislación vinculada a la temática de género, tanto en lo que respecta a la violencia hacia las mujeres, como a su participación política, y la aprobación del nuevo Código del Proceso Penal, después de tantos años de postergación. Por el contrario, se refirió a que el gran déficit del Parlamento fue no haber progresado en las leyes relativas a la cuestión militar, lo cual “muestra las resistencias y muchas veces un posicionamiento oportunista de parte de integrantes de la oposición, que ven allí un asunto electoralista en lugar de reconocer que hay necesidad de generar una mejora desde el punto de vista de la justicia previsional en las Fuerzas Armadas “.

El senador Delgado expresó que en 2017 se confirmó que en el gobierno está faltando el rumbo, y que lejos de innovar en soluciones, “tratan de buscar más recursos para paliar un déficit fiscal que no pueden controlar”, puesto que el año pasado comenzó con aumento de impuestos y tarifas, y termina prácticamente de la misma forma.

“El gobierno está jugado casi exclusivamente a un acuerdo con UPM”, aseguró Álvaro Delgado.

Además, criticó que no haya una política de empleo, cuando “el problema más importante del país es el desempleo”. “Se perdieron 47 mil puestos de trabajo del 2015 a la fecha, y para mí es uno de los temas de mayor preocupación. Han bajado los niveles de inversión y yo no veo al gobierno tomando acciones proactivas”, añadió.

Amorín también lamentó la persistencia de ajuste fiscal y las intenciones del ministro de Economía de achicarlo con ajuste. Por otro lado, indicó que el gobierno no ha podido avanzar en educación ni en la apertura al mundo, tal como había prometido al comienzo de la administración.

En tanto, según Mieres, el año pasado no fue bueno para el país. Señaló que el gobierno está “trancado” y exhibe cada vez más diferencias internas, las que se vuelven bloqueos con respecto a distintos temas. Uno de los más graves es –en consonancia con la opinión de Amorín- la inserción mundial, donde hasta el momento ha sido imposible llevar adelante alguna iniciativa. “Tampoco avanza en educación, en la reforma del Estado, en la transformación de las empresas públicas, es decir, los grandes temas que el país tiene pendientes, el gobierno no los aborda porque tiene un conflicto instalado internamente que es superior”, manifestó.

UPM: La gran apuesta

En este contexto de balance negativo de un año “sin logros” –en palabras de Mieres-, los tres legisladores de la oposición consultados por CRÓNICAS estuvieron de acuerdo en que el gobierno está jugado exclusivamente al trato con UPM.

Sin embargo, Xavier optó por subrayar que si se concreta la tercera planta de celulosa, “será el mayor emprendimiento productivo de la historia del país; no hay nadie que pueda negar su importancia”. Por otra parte, comentó que Uruguay tiene un desafío en infraestructura, no solamente por UPM, sino por otras inversiones que debe enfrentar, ya que la limitación en esa materia constituye un obstáculo importante al crecimiento.

“Para la política el 2017 fue un año malo, marcado por las reprobables conductas de actores políticos, particularmente del gobierno”, criticó Pablo Mieres.

Consultada sobre la percepción de los partidos opositores con respecto a que la única apuesta del FA es la inversión con la papelera finlandesa, la legisladora opinó que están equivocados, pero “hacen su tarea” dado que “están en campaña desde el 2 de marzo del 2015”. “Nosotros no podemos por ello perder el rumbo ni dejar de trabajar en todo esto que para Uruguay es una senda de desarrollo genuino, con aumento de la riqueza y simultánea distribución de la misma. Hay que tratar de evitar el ingreso en la campaña electoral antes de tiempo. El último semestre será el momento de empezar con definiciones, determinar candidaturas y encarar el 2019 propiamente electoral”, concluyó.