El usuario uruguayo es “absolutamente ignorante” en seguridad cibernética, según experto

Principal desafío > del sector para 2021 es ampliar la cantidad de recursos humanos

En diálogo con CRÓNICAS, Marcelo Montado, directivo de las cámaras de la Economía Digital del Uruguay (CEDU) y de Tecnologías de la Información (CUTI), se refirió al impacto de la pandemia en el sector. En ese contexto, expresó que se dio una suba en el uso de comercio electrónico, aunque también conllevó a un alza aún mayor en ciberataques. Ante esta realidad, el experto sostuvo que el usuario uruguayo es “absolutamente ignorante”, y afirmó que es un tema en que los negocios deberían invertir más, ya que “cuanto más esté basado en servicios online, más es necesario invertir ahí porque (sino) deja de facturar”.

Por Ignacio Palumbo | @ignacio_palumbo

– ¿Qué balance hace de este 2020 para el sector tecnológico?

– Variado, porque si bien el sector de las tecnologías de la información (TI) en general anduvo bien, hay otros sectores que, sin embargo, se vieron perjudicados. No es que el sector en general mejoró; si bien es cierto que fue muy potenciado el interés y apareció una demanda importante, sobre todo en lo que tiene que ver con servicios online, hubo empresas que, por ejemplo, por tener como principales clientes a compañías aéreas, se vieron en una situación muy comprometida porque cortaron su cadena de pago.

Entonces, es un balance moderadamente positivo. Hubo de todo, hubo gente que le fue mejor y otra que no le fue bien.

– El covid-19 llevó a una suba en el comercio electrónico. ¿Esto conllevó a un alza en ataques cibernéticos?

– Efectivamente, hubo un empuje muy grande del comercio electrónico. Fue como un espaldarazo, la realidad golpeó y trajo esos cambios que se iban dando y que pasó de ser estratégico a táctico el tener producciones online. Las empresas notaron que lo que impidió que la economía bajara menos fueron los servicios online, que permitieron mantener cierta actividad económica.

Consecuentemente, sí, hubo bastantes más ataques. Pero bastantes más. Yo pienso que es porque, de alguna manera, las empresas se jugaron mucho al online, por ende los hackers vieron una oportunidad de generar más daño.

– ¿Cómo ve al usuario uruguayo en materia de seguridad cibernética? ¿Es cauto, precavido?

– No, es absolutamente ignorante. Ahora sí han tomado más recaudos, se han dado cuenta que hay un problema y que es real; sobre todo aquellos que fueron atacados y le generaron problemas en los servicios online, se dieron cuenta que la seguridad no es un problema tecnológico, es un tema de continuidad de tu negocio. O sea, cuanto más tu negocio esté basado en servicios online, más es necesario invertir ahí porque tu negocio deja de facturar. Es clarísimo.

Lo que sí vemos es que están muy por debajo de los estándares que se invierten en seguridad. Hay una cierta tendencia a dejarlo en segundo lugar.

Y más aún: también otros aspectos que debemos trabajar, que tienen que ver con el Internet de las Cosas. Todo lo que tiene que ver con seguridad de los dispositivos conectados a internet puede ser mucho más crítico en los próximos años, y Uruguay tiene que trabajar en esa dirección. Dada la penetración en línea que tiene el país, y la conectividad, es al mismo tiempo un campo fértil para hacer malas jugadas.

Es un tema a tratar. Seguramente para el año que viene es un tema que vamos a trabajar más fuerte, que nos es caro, y nos preocupa.

– ¿La seguridad cibernética le implica un gasto importante a las empresas?

– Sobre todo a nivel de pymes, no. Pero esa es una mala noticia. Es un tema que van a tener que empezar a cambiar. Pensemos en servicios online, pero también en los respaldos, en información compartida. A medida que se vayan visibilizando, se va a ir tomando más conciencia de que los sistemas de negocio de la empresa va a pasar más por lo online; esto va a ir acompasado de un crecimiento en las inversiones y en la preocupación sobre seguridad informática.

– ¿Qué rol juega el sector tecnológico en Uruguay en comparación con la región, o pensando más por el lado de exportación al exterior de servicios tecnológicos?

– Uruguay tiene un destacado posicionamiento a nivel regional; ha mostrado que la infraestructura soportó ese crecimiento muy bien. Pasó muy bien ese examen, y en lo que hace a servicios de desarrollo de software y servicios online en general, el país está muy destacado regionalmente. 

La pandemia a nadie le gusta, pero trae cosas buenas en algunos aspectos. En todo lo que tiene que ver con sensibilidad y transformación digital yo creo que fue un empujón enorme, y Uruguay tuvo la oportunidad de -teniendo una infraestructura y una industria muy madura y reconocida a nivel regional- pasarla muy bien, e inclusive fortalecer ese sector.

Además, el país es un lugar ideal para hacer pruebas, tiene una gran infraestructura, un gran desarrollo tecnológico y de software muy interesante, y le ha permitido, por ejemplo, sortear estas pruebas de estrés para todo lo que es el mundo online con muy buena nota. Y eso, hacia el próximo año, va a ir derramando en beneficios, porque Uruguay se fue dando a conocer por el buen manejo de la pandemia y, al mismo tiempo, se destacaba también el tema de cómo había sido la estructura tecnológica. Hay una cantidad de aspectos que suman a eso, y añaden en la imagen que nos tienen de afuera.

Nosotros creemos que justamente esto se va a ir potenciando. La industria uruguaya de software se fue destacando durante todo el año como muy solvente y sólida, y esas son las cosas positivas que nos trajo el covid-19 para la industria. Creo que ahí sí salimos muy bien parados.

El trabajo que estamos haciendo para el año que viene es justamente con ese foco: fortalecer la imagen de Uruguay a nivel mundial, aprovechando estas buenas noticias que hablan del país, más allá del último mes y medio que no estamos dando buenas noticias.

– ¿Cómo se encuentra el sector tecnológico uruguayo en materia de recursos humanos?

– Ahí no estamos tan bien. Uruguay tiene un debe importantísimo en ese aspecto y es necesario que se trabaje en ese sentido. Para mí es uno de los temas más importantes a nivel estratégico; a nivel táctico capaz hay otro, pero a nivel estratégico, si en los próximos cinco a diez años queremos visualizar un país competitivo, con empresas tecnificadas y digitalizadas, se tiene que trabajar fuertemente en mejorar la cantidad de recursos.

A su vez, es un punto estratégico conseguir más recursos para poder seguir creciendo. El 95% de las industrias de software uruguayas están basadas en servicios, y el servicio está muy orientado a la mano de obra. Nosotros no tenemos tantos productos en donde se escala fácilmente, entonces cualquier crecimiento se ve limitado por la capacidad para contratar gente.


Un país de testeo

– ¿Qué se espera del sector en 2021? ¿Cuáles son los principales desafíos?

– Estamos trabajando en sensibilizar el tema de mano de obra, de personal capacitado. Todo lo que tiene que ver con incrementar la gente que se dedica a TI.

Por otro lado, queremos mostrar a Uruguay como un país ideal para que la gente pueda desarrollar su negocio online, para probar, para venir a experimentar, para venir a vivir y trabajar desde Uruguay.

En este sentido, ampliar la cantidad de recursos -sea por capacitar a los locales como también traer talentos del exterior a través de diferentes políticas- es el principal desafío. 

Si me decís dónde están los focos, diría que en desarrollar a Uruguay como un país ideal para el test de todo lo que tiene que ver con el mundo de TI, tanto sea para vivir como para desarrollar tu negocio.

– ¿Cree que el país podrá encarar estos retos el año que viene?

– Sí. Por eso hablaba de la pandemia y la gestión de ella por parte de Uruguay. Nos deja la oportunidad, nos da la fortaleza, y ese es el punto que queremos trabajar.

Hoy creo que Uruguay tiene la oportunidad, es posible más que nunca: posicionemos a Uruguay en esto y es posible. Y lo es por todo lo que vino dándose.