Los millennials, un desafío para las empresas uruguayas

Un buen clima de trabajo- el factor decisivo

Según un reciente informe publicado por Great Place To Work, los millennials conforman un grupo etario cada vez más grande dentro de la fuerza laboral. 

Sus características muchas veces desafían a las organizaciones que deben buscar la forma de adaptarse constantemente a nuevas demandas y contextos. Para determinar Los Mejores Lugares para Trabajar para los Millennials en Uruguay, Great Place to Work analizó el feedback de los colaboradores, quienes respondieron a las 60 preguntas de la encuesta Trust Index. 

Entender a los millennials

 Cuando se les pregunta a los millennials qué debe tener la empresa ideal, la respuesta en términos generales es la misma: un buen clima de trabajo. Las mejores empresas para trabajar según los millennials obtienen alrededor de 80 puntos en este aspecto. En tanto, para el resto de las empresas, esta valoración cae 16 puntos. 

Para ellos, el buen clima de trabajo se traduce en buena relación con el jefe y los compañeros, trabajo en equipo, crecimiento profesional, flexibilidad de horarios, relaciones con la comunidad y el trabajo en células ágiles.

 En este sentido, las variables que conforman el modelo de clima laboral son: credibilidad, respeto, imparcialidad, orgullo y camaradería. Esta última es la que muestra mayor diferencia de puntaje entre los mejores lugares para trabajar para los millennials y las demás empresas: 22 puntos de diferencia. 

¿Qué valoran los millennials en sus lugares de trabajo? Esta generación pone mucho énfasis en sus necesidades personales. Marcar la diferencia les parece esencial y, entonces, el propósito es algo que valoran mucho en las organizaciones. Tal es así que el propósito y la conexión de los trabajadores con la organización determina, en gran medida, la capacidad de retención de las empresas con este grupo etario de trabajadores. 

Si bien los millennials no muestran demasiados cambios en los aspectos que valoran de sus líderes, sí presentan disidencias en cómo los líderes logran esas valoraciones: la velocidad de atención a las necesidades de los trabajadores y la atención a las diferencias son dos factores que se aprecian especialmente. En tanto, estos trabajadores valoran la diversidad como una experiencia relacionada íntimamente a la equidad de trato, el reconocimiento, y las posibilidades que brinda la organización. Tal es así que, según el informe, las mejores empresas para trabajar obtuvieron 95 puntos frente a la premisa “las personas son tratadas de forma justa independientemente de su edad, raza, género y preferencia sexual”. 

En otro sentido, el reconocimiento es un aspecto importante para este grupo etario: los millennials quieren sentir que su trabajo vale la pena y que sus esfuerzos están siendo reconocidos. En relación con esto, también esperan tener una carrera interesante que les brinde aprendizajes y experiencias variadas. En definitiva, hoy más que nunca, la cultura de los lugares de trabajo es esencial para reclutar y retener el talento joven. Con los millennials entrando a las líneas de liderazgo, es vital priorizar una cultura que los seduzca y los haga sentirse orgullosos. Es decir, que les permita conectar su propósito, les brinde herramientas para crecer, les proporcione líderes inspiradores, cercanos y accesibles, les haga sentirse respetados en su diversidad, escuchados y valorados.