Sector turístico busca “equilibrar la competencia” a través de proyecto de ley

Iniciativa busca regularizar a quienes no están inscriptos como prestadores

El Ministerio de Turismo (Mintur) presentó un proyecto de ley para regular el alojamiento turístico en viviendas particulares y mantener un equilibrio en el sector. A propósito de este tema, el abogado y asesor académico de esa cartera, Julio Facal, dialogó con CRÓNICAS y dijo que el eje central de esta problemática es la fiscalización, y agregó que “si las plataformas se inscriben, serían una gran alianza”.

En Uruguay, la actividad turística está regulada por el Mintur, y se diferencia del uso residencial por -entre tantos factores- el comportamiento de un consumidor sensible y particular. El turista se caracteriza por viajar con las pertenencias justas y necesarias. En ese sentido, Facal indicó que “los que tienen que velar por la calidad del destino son los prestadores, los profesionales y el Estado”.

Presentación del proyecto

Con plataformas como Airbnb y Booking en auge –entre otros sitios-, el sector turístico se encuentra ante una competencia informal, situación que el proyecto presentado el pasado viernes 17 de febrero en el Parlamento busca regularizar. Si bien no regula las plataformas, el proyecto apunta a aquellos que se dedican al turismo de manera profesional y no están inscriptos como prestadores.

“Nació de una iniciativa del sector hotelero y busca equilibrar los resabios de la economía colaborativa”, dijo Facal, y explicó que el nacimiento de las plataformas hizo que la actividad turística aumentara con una modalidad virtual y de forma profesional, con alquileres por día o semana, con servicios y condominios enteros que no están inscriptos donde corresponde.

Lo que busca reformar el proyecto es el arrendamiento por temporada, que en la actualidad es de nueve meses y lo reduciría a tres. De esta manera, genera un arrendamiento invernal para apartamentos que quedan ociosos. Por otra parte, las personas que alquilan por temporada no recibirán mayores obligaciones. “El proyecto deja abierta la puerta para que los gobiernos departamentales creen registros de viviendas de uso turístico”, insistió el doctor en Derecho.

Equilibrio y ocupación

La pandemia generó preocupación en el sector turístico no solo por la caída de la movilidad, sino por la “competencia desleal” de la que ya hablaban antes los operadores turísticos, la cual surgió a partir de propietarios que alquilan de forma comercial, habitual y profesional sin regularizaciones.

“Esto pasa en todas partes del mundo”, dijo Facal, y a modo de ejemplo citó los casos de Brasil y Argentina, donde existen sentencias judiciales que le prohíben a un propietario alquilar un condominio a turistas. “En este caso, lo que se está regulando no es el derecho de propiedad sino la actividad que se desarrolla”, aclaró.

Al ser consultado sobre la ocupación, Facal dijo que “los usuarios van a seguir eligiendo las formas que quieran alojarse”, pero que el proyecto se originó por el pedido por parte del sector hotelero para competir “bajo las mismas reglas”. Además, el profesional hizo alusión a los riesgos que se corren al alquilar viviendas que no están regularizadas: planos edilicios, permiso de bomberos y demás. “El turismo tiene un principio general, que es el principio de calidad”, enunció, y agregó: “Dentro, la vivienda tiene que tener los servicios mínimos”.


Aliados

Con la llegada de la plataforma Uber a Uruguay, en su momento el gremio de taxistas se manifestó en contra de esta empresa, ya que consideraba que llevaban a cabo la misma actividad sin cumplir con la normativa correspondiente. Tras idas y vueltas, y con algunas regulaciones, todas las actividades pudieron convivir. 

Facal tomó a esta empresa proveedora de movilidad como ejemplo y dijo que el gran problema que hay alrededor de este tipo de aplicaciones o servicios es “la fiscalización”. Al respecto, aclaró que si bien el planteamiento del sector hotelero no se basa ni en Airbnb ni en Booking, por citar a las principales plataformas, considera que en el caso de inscribirse “serían un gran aliado”.