Uruguay creció un 2,1% en el tercer trimestre confirmando desaceleración

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La economía uruguaya creció 2,1% en términos interanuales con resultados positivos en la mayoría de los sectores, siendo la excepción “Construcción” y “Comercio, reparación, restaurantes y hoteles”. Por su parte, aunque la industria en su conjunto crece, ese desempeño se debe exclusivamente a la incidencia de la refinería de Ancap. 

En el tercer trimestre de 2018 la economía uruguaya creció un 2,1% medido en términos interanuales, con un desempeño positivo de la mayoría de los sectores de actividad. Por su parte, medida en términos desestacionalizados respecto al trimestre anterior, el Producto Interior Bruto (PIB) local se mantuvo estable, según surge del informe de Cuentas  Nacionales publicado ayer jueves por el Banco Central del Uruguay (BCU).

El documento destaca que la mayoría de los sectores de actividad registraron un mejor desempeño en el tercer trimestre de 2018 medido en términos interanuales, a excepción de “Construcción” y “Comercio, reparaciones, restaurantes y hoteles”.

Al analizar por sector, se constata que la actividad agropecuaria se incrementó 6,4% en relación al tercer trimestre del año pasado, con incidencias similares del crecimiento agrícola y pecuario y un aporte también positivo de la silvicultura.

El sector de “Transportes, almacenamiento y comunicaciones” incrementó su valor agregado en 6,1%, como resultado de la expansión en la actividad de comunicaciones, contrarrestada parcialmente por una menor actividad en el transporte y almacenamiento.

Por su parte, “Suministro de electricidad, gas y agua” registró una leve expansión de 0,4%, debido al desempeño positivo de la generación de energía eléctrica y del suministro de gas.

Una doble lectura puede hacerse de la evolución de las “Industrias Manufactureras” que en su conjunto registró un crecimiento de 4,6% respecto al mismo trimestre del año anterior. Sin embargo, esta expansión se debió exclusivamente  a la expansión registrada por la refinería de Ancap en comparación con igual período del año anterior cuando la planta se mantuvo cerrada por mantenimiento. Si se excluye la refinería, la actividad industrial muestra una caída en su conjunto de 2,4%.  Ello se debió fundamentalmente al resultado negativo de la actividad de fabricación de pulpa de celulosa y en las industrias alimenticias.

Entre los sectores que mostraron caídas, “Comercio, reparaciones, restaurantes y hoteles” registró un descenso de su actividad de 0,9% medido en términos interanuales, con disminuciones en la actividad comercial y en los servicios de restaurantes y hoteles. Se destaca particularmente la caída de los bienes de origen importado cuyo precio se ve afectado por la apreciación del tipo de cambio.

En tanto, la “Construcción” cayó 0,7% interanual, debido a la baja de las otras construcciones y al crecimiento casi nulo de la construcción de edificios.

La actividad del agregado “Otras Actividades” se mantuvo en los mismos niveles de julio-setiembre de 2017.

Enfoque del gasto

Medido desde un enfoque del gasto, se destaca que la demanda interna en términos interanuales, tanto por el incremento de la Formación Bruta de Capital (inversión) así como en el Gasto de Consumo Final (consumo). En el caso del consumo se expandió 2,5%, a impulso principalmente del empuje del sector privado (+2,7%). Por su parte, si bien la formación bruta de capital registra un crecimiento de 31,1%, ello debió a una menor desacumulación de stocks de productos agrícolas terminados, especialmente de soja, y a una mayor acumulación de los trabajos en curso asociados a las zafras de invierno. Por el contrario, la formación bruta de capital fijo cayó 0,4% por la incidencia negativa de la inversión privada, ya que la pública se mantuvo sin cambios.  “Se destacan un crecimiento en la inversión en maquinaria y equipo importada, compensado por una disminución en las obras de construcción y en la exploración minera”, detalla el informe.

Las Exportaciones presentaron en el tercer trimestre de 2018 una caída en volumen físico de 10,4% respecto a igual trimestre del año anterior, mientras que las Importaciones crecieron a una tasa interanual de 3,3% en el mismo período. Estos comportamientos determinaron que en el tercer trimestre de 2018 se registrara un saldo neto negativo en el volumen físico de las transacciones de bienes y servicios en la comparación interanual, explicado mayormente por el comportamiento de las exportaciones de soja, a consecuencia de la menor oferta exportable derivada de la sequía.