Desde Bevsa se entiende que es hora que el mercado de valores tenga un rol más relevante

EDICIÓN ESPECIAL 2019

Eduardo Barbieri, gerente general de la Bolsa Electrónica de Valores (Bevsa)


El momento de rever las normativas que no han tenido los resultados esperados ha llegado para Bevsa. Se entiende que en términos de cantidad de emisiones y de montos, el mercado accionario no está creciendo y es importante remover los obstáculos.

¿Cuáles son las expectativas que tiene para Bevsa en 2020, teniendo en cuenta, no solo el cambio de administración de gobierno, sino también la desaceleración regional y mundial de la economía?

Hay una expectativa media. Proyectamos que el 2020 será un año de ajuste y de transición, donde probablemente no haya tantas operaciones en el mercado como en 2019.  Seguramente en 2021, cuando comience a ejecutarse el nuevo presupuesto, habrá más proyectos, tanto del sector público como del privado.

 ¿Cuáles son los planteos que Bevsa le hará al próximo gobierno?

Desde Bevsa sostenemos que el mercado de valores tiene que tener un rol más importante y que no solo oficia como un canalizador de ahorro hacia inversiones en grandes proyectos, sino que puede ser un actor relevante de financiamiento para las empresas nacionales de mediano y gran porte.

Entendemos que es momento de rever algunas normativas que no han tenido el resultado esperado en términos de cantidad de emisiones y de montos. El mercado accionario no está creciendo y es importante remover los obstáculos para su desarrollo. El marco global del mercado de valores debe ser revisado y el sector financiero privado debe de obtener mayor protagonismo, así como se tienen que repensar algunas regulaciones.

¿Cómo observa Bevsa el desarrollo del mercado de valores como canalizador de recursos, en especial para desarrollar infraestructura?

Bevsa ha desempeñado un papel importante no solo como plataforma bursátil, sino en su rol de facilitador, de representante de los inversores, y otros roles. En los últimos tiempos se dieron importantes emisiones para infraestructura de la mano de los dos fideicomisos para infraestructura de CAF y el fideicomiso para el ferrocarril, que determinaron movimientos récord en el mercado de valores.

Por temas de plazos y diversificación de riesgos, entre otros factores, el mercado de valores es un actor clave para canalizar fondos para infraestructura. Un ejemplo claro son las AFAP, que hoy tienen invertidos más de US$ 1.000 millones en infraestructura que se canalizaron a través de Bevsa. Eso, sin contar otras inversiones productivas como son los fideicomisos de tierras forestales, agrícolas, proyectos inmobiliarios y parques eólicos.

¿Cuáles son los desafíos que tiene por delante Bevsa, y cuáles son los asuntos que más preocupan a la entidad?

El desafío de Bevsa es continuar siendo el líder de mercado y afianzarse como referente bursátil, manteniendo la capacidad de innovación y de seguir generando información de valor para los agentes. Por otra parte, nos hemos planteado como objetivo buscar caminos y herramientas para mejorar la liquidez de los títulos y hacer crecer el número de emisores y emisiones vinculadas con el financiamiento de la industria, el comercio, los servicios y el agro.