Fernando Correa: «El mayor impacto para la actividad portuaria lo tiene la instalación de la vía férrea»

EDICIÓN ESPECIAL 2019

Fernando Correa, Director de Relaciones Institucionales de Katoen Natie


El representante de TCP auguró el desarrollo de nuevos emprendimientos a partir del tren como“una salida rápida y eficiente al mercado internacional”.

-¿Cuáles son las expectativas que tiene para la empresa en 2020, teniendo en cuenta, no solo el cambio de administración de gobierno, sino también la desaceleración regional y mundial de la economía, con el impacto que esto tiene en los temas logísticos y portuarios?

-Cada vez que comienza un nuevo año y en especial cuando, además, asume un nuevo gobierno, se generan diversas expectativas naturales en todos los ciudadanos y también en las empresas que desarrollan su actividad en el país.

La clave está en cuán alto se fijan las expectativas para después no caer en la sensación de fracaso. En lo particular, esperamos que en este 2020 la nueva administración pueda ejecutar los cambios necesarios para afrontar los desafíos económicos que tenemos por delante, en especial las tensiones políticas en la región, que impactan directamente en el flujo comercial y en la actividad portuaria, además de esperar el éxito en las decisiones de políticas económicas que promuevan la competitividad necesaria para el comercio exterior uruguayo.

-¿Cómo evalúa las propuestas realizadas en su plan de gobierno por parte de las autoridades recientemente electas en materia logística y de comercio exterior?

-Creo que hay un buen análisis de la situación y las propuestas están en línea con el diagnóstico y las necesidades del sector. Esperemos que se puedan llevar adelante. Todos los actores también tenemos que trabajar y ser creativos para que el sector siga siendo impulsor y soporte de la producción del país.

-En materia logística y portuaria, ¿cuáles son los temas más urgentes a resolver en el corto y mediano plazo en nuestro país?

-Lo primero y fundamental en materia de puertos es realizar un profundo análisis de la normativa portuaria y corregir los desvíos que han ocurrido en la misma en los últimos años.  Es necesario ajustar todas las operaciones a la normativa vigente. Hemos visto desde hace mucho tiempo un apartamiento en el manejo de las operaciones en el puerto y la forma de trabajo que nada tiene que ver con la normativa y los reglamentos. Este punto para nosotros es esencial. El otro tema de suma importancia para las nuevas autoridades es comenzar a trabajar sobre un plan maestro de transporte que dé el marco de referencia y las certezas necesarias para continuar y profundizar con las decisiones de inversión de largo plazo.

-¿Cuáles son las fortalezas que tiene el sector para afrontar ese contexto de turbulencias y guerras comerciales que mencionábamos en la primera pregunta?

-El sector logístico portuario de nuestro país es maduro, profesional, que está preparado para los desafíos que se avecinan y tiene como norte brindar el mejor servicio a la carga de la región. A este “saber hacer” se le deben agregar el plan de dragado a 14 metros, profundizar el desarrollo de infraestructura que centralice, de escala y productividad a los buques oceánicos para ser el puerto hub de la región tal cual fue concebido en el último Plan Maestro que pensó en el desarrollo del puerto con una terminal especializada por tipo de carga.

-¿Qué incidencia puede tener para el sector el proyecto de UPM?

-El proyecto de UPM para el sector portuario es de suma relevancia porque se incorpora a la infraestructura portuaria una nueva terminal especializada- en este caso de celulosa-, y ello implica un aumento en el trabajo, en mano de obra y también en la venta de servicios. Pero desde mi punto de vista, el mayor impacto para la actividad portuaria lo tiene la instalación de la vía férrea y el comienzo de servicios de carga por tren; esto será un antes y un después. Por el desarrollo de nuevos emprendimientos que pueden comenzar a partir de la existencia de una salida rápida y eficiente al mercado internacional y para nuestro puerto puede ser el punto de partida para ampliar su hinterland (zona de influencia terrestre) hacia el sur de Brasil y ser competitivos para conectar su comercio exterior a través de nuestra terminal portuaria.