BCE sorprende con suba de medio punto porcentual en la tasa de interés para contener inflación

No habrá más decisiones anticipadas y cada movimiento se decidirá “reunión a reunión”

El Banco Central Europeo (BCE) puso fin a una era de política ultraexpansiva y realizó el primer aumento de tasas de interés en 11 años, buscando atenuar el impacto de la inflación. El aumento, de 50 puntos básicos, fue mayor a lo anticipado por el mercado, que esperaba una suba de 25. Asimismo, en medio de turbulencias en los países de la periferia europea, anunció el lanzamiento de la herramienta antifragmentación para impedir que se disparen las primas de riesgo soberano de países en riesgo.

El BCE concretó ayer jueves un sorpresivo aumento de sus tasas de interés de referencia de 50 puntos básicos para hacer frente a los efectos de la inflación, que cerró el mes de junio con un dato anual de 8,6% en la Eurozona. Se trata del primer aumento de tasas en 11 años, y la suba más elevada en 22, poniendo fin a una era sin precedentes en la política monetaria. Con la decisión, también se abandonan de forma oficial las tasas de interés negativas por primera vez desde 2014, y se sorprendió a los mercados que esperaban un aumento de solo 25 puntos básicos.

La movida alcanza a las tres tasas de interés clave: facilidad de depósito (donde los bancos depositan su liquidez), de refinanciación principal (donde los bancos acuden a las subastas semanales) y la facilidad marginal (donde los bancos piden liquidez de urgencia).

Había presiones para que la entidad actuara y se enfocara en cumplir su mandato de mantener una inflación por debajo pero cercana al 2%, pero no era una decisión fácil, puesto que la puede tener impactos negativos sobre la recuperación económica y en las primas de riesgo de los países de la periferia europea, que atraviesan momentos de fuertes turbulencias.

A propósito de esta coyuntura, el BCE también anunció el lanzamiento de la herramienta antifragmentación (Instrumento para la Protección de la Transmisión, TPI por sus siglas en inglés) para impedir que se disparen las primas de riesgo soberano de países en riesgo, como España e Italia. La herramienta se crea con ciertas condiciones fiscales para los países, pero el BCE tendrá la última palabra para decidir si interviene en el mercado secundario o no para calmar las primas de riesgo comprando bonos.

Paso a paso

De cara al futuro, la presidenta del BCE, Christine Lagarde, dijo que se cambiará la forma de comunicación de la entidad y no habrá más decisiones anticipadas. En ese sentido, dio indicios de que las tasas continuarán subiendo, pero no dio pistas sobre la magnitud de las subas, lo que se definirá “reunión a reunión”.

Cabe recordar que solo en dos ocasiones el BCE había determinado incrementos iguales o mayores a los 50 puntos básicos. La primera fue el 4 de enero de 1999, en su tercera reunión, cuando subió de golpe las tasas en 75 puntos básicos, hasta el 2,75%, en el primer mes de estreno del euro en los mercados financieros. La segunda fue el 9 de junio de 2000, cuando subió las tasas en 50 puntos básicos, hasta el 3,25%.

Cabe señalar que la demora en el aumento de la tasa de interés (en comparación con la Fed estadounidense o el Banco de Inglaterra) ha generado, junto a otros factores, que el euro caiga con fuerza e incluso llegue a un nivel de paridad con el dólar. Esa depreciación de la divisa europea agravó aún más el incremento de precios en la zona euro. 

El riesgo de actuar tarde es que ahora debe acelerar el ritmo. No obstante, se advierte que un aumento de tasas demasiado veloz o drástico puede generar cierto estrés en los mercados y en la economía, anticipando la llegada de una recesión.


EEUU descarta recesión y resalta la solidez del mercado laboral

Pese a los crecientes temores respecto a que la economía de EEUU ingrese en una fase de recesión económica, las autoridades del Gobierno descartaron esta semana la posibilidad de que ello ocurra y reafirmaron que la solidez del mercado laboral respalda una expansión de la actividad económica.

«Si observas la fortaleza de la economía, la del mercado laboral y la del gasto del consumidor, concluyes que ahora mismo se mantiene claramente en expansión», sostuvo en rueda de prensa el asesor económico de la Casa Blanca, Jared Bernstein, según declaraciones que difundió la agencia de noticias EFE.

En junio, la economía estadounidense sumó 372.000 puestos de trabajo, una cifra con la que el índice de desempleo del país se mantuvo en el 3,6% por cuarto mes consecutivo, muy cerca del 3,5% que se alcanzó en febrero de 2020, previo al estallido de la pandemia.

La recuperación de la creación de puestos de trabajo «entra en el libro de los récords por su rapidez», añadió Bernstein, para quien el descenso de los precios de la gasolina ofrece además un respiro al consumidor.

El precio del galón (3,78 litros) de combustible descendió 50 centavos de dólar en los últimos 44 días, «una de las caídas más rápidas en una década” según el funcionario de la Casa Blanca, lo que hace que el gasto medio mensual sea 25 dólares menor que si el costo se hubiera mantenido en el pico de junio.

Bernstein vinculó ese descenso a las acciones tomadas por el presidente, Joe Biden, para contener el aumento de los precios de energía derivado de la invasión rusa de Ucrania.

El mandatario ordenó en abril liberar de las reservas estratégicas 180 millones de barriles de petróleo, a un ritmo de media de un millón al día durante seis meses, y según el asesor económico, hasta la fecha ya se han liberado 84 millones.