En diálogo con CRÓNICAS, la secretaria general de la Cámara de Turismo, Marina Cantera, señaló que se le plantearon al gobierno algunos incentivos de apoyo concreto para el segmento. Las medidas incluyen, detalló Cantera, exonerar el IVA a las compras dentro del sector, así como también diferir pagos con tarjetas de crédito, y promociones o descuentos.
Una temporada turística sin vecinos ya está a la vista, luego de que el presidente Luis Lacalle Pou anunciara la semana pasada que las fronteras uruguayas estarán cerradas al visitante extranjero durante el verano.
La medida constituye un esfuerzo por prevenir mayores contagios de Covid-19 en el país y enfrentar la pandemia. Asimismo, también significa una importante pérdida de capital, ya que un alto porcentaje del PIB uruguayo está compuesto por el sector turístico, que fue uno de los más golpeados por la crisis causada por el nuevo coronavirus.
La situación no trae buenos augurios al tener en cuenta que los argentinos no podrán ingresar al país, ya que son los turistas que más visitan el Uruguay -y más divisas vierten-.
Así lo evaluaron, en diálogo con CRÓNICAS, los economistas Pablo Moya y Agustín Iturralde, de la consultora Oikos y el Centro de Estudios para el Desarrollo (CED), respectivamente, y la secretaria general de la Cámara de Turismo (Camtur), Marina Cantera. “Es una mala noticia desde el punto de vista económico”, aseveró Moya, mientras que Iturralde expresó que “se trata de una limitante menos gradual, más de shock sobre el ingreso de turistas en el marco de lo que va a ser una temporada ya bastante mala”, aportó el segundo.
El empresariado, por su parte, recalcó que se está intentando alentar a que la población realice turismo interno para poder paliar la situación de pérdidas. Según Cantera, lo que es más importante de cuidar es la salud, ya que eso termina repercutiendo luego en lo económico. “Si nos empieza a ir mal, tenemos que ir para atrás, a la etapa de cierre”, reflexionó.
Tierra adentro
De esta manera, los operadores turísticos y empresas del rubro, que están tímidamente mostrando signos de repunte, tendrán que enfrentarse con una temporada de alta dependencia del turismo interno.
Ante este desafío, tiempos desesperados requieren medidas analizadas con mucha profundidad. Ambos economistas coincidieron en que será necesaria una batería de medidas de parte del gobierno no solo para incentivar a la población a recorrer el país, sino también para darles un respiro a las empresas y que las mismas puedan paliar la situación. En este sentido, Cantera afirmó que se le planteó a la administración de Lacalle Pou algunos incentivos a implementar, aunque “todavía están esperando las respuestas”.
Ante este contexto, ¿qué medidas se pueden llevar adelante para apuntalar la situación? En este tema los entrevistados llegaron a algunos puntos en común.
Por ejemplo, dentro de lo esbozado por la Camtur ante el gobierno está la intención de poder diferir pagos con tarjeta de crédito, así como generar promociones o descuentos. A esto se le agrega, profundizó la secretaria general de la gremial empresarial, una petición para que se exonere del IVA a las compras y consumos relativos al rubro. Así, tanto Moya como Iturralde coincidieron con este auxilio para el sector, a la vez que hicieron sus propias evaluaciones en la materia.
Para el director ejecutivo del CED, los alivios deberán estar focalizados principalmente hacia los sectores más golpeados, “donde sí se va a sentir mucho más la ausencia de los extranjeros”. No obstante, instó a que es necesario esperar a estar más cerca de la fecha de inicio de la temporada “para ver cómo se termina de configurar el tema”.
A su vez, Moya indicó que “hay algunas medidas a las que hay que ponerle una lógica para que sean eficaces y efectivas, y que generen una buena señal indicativa”. A modo de ejemplo, sugirió exonerar también del pago de IRPF a los alquileres durante los meses veraniegos.
La otra cara
En diálogo con CRÓNICAS, Blauco Rodríguez, presidente del Colegio Médico, hizo un balance de la situación a nivel sanitario y dio su visión de aspectos a tener en cuenta durante la temporada. Según abordó, la medida de cierre de fronteras puede tener repercusiones positivas, a la vez que subrayó que el impacto económico se vería más agravado aún “si la pandemia entra de lleno” en Uruguay.
En cuanto al turismo interno, Rodríguez remarcó que el riesgo es mucho menor comparado con la apertura de fronteras. “Si nos basamos en el turismo interno con la realidad con la que estamos hoy en día, algún riesgo puede tener, porque implicará la movilización de personas”, advirtió el experto. No obstante, apuntó que, si se cumplen con las medidas y protocolos exigidos, el peligro “va a ser muy pequeño”.
Se complicó
Consultada respecto a la realidad que enfrentan hoy las empresas del sector, la secretaria de la Cámara de Turismo sostuvo que se tratan de situaciones desparejas, ya que dependen tanto del rubro como de los destinos.
Por un lado, la hotelería del Interior y la gastronomía se han ido reactivando, mientras que las agencias de viaje están “totalmente paradas”, indicó Cantera. Por otra parte, indicó que Montevideo es un destino que “está sufriendo muchísimo” en comparación con el resto del país.
En este sentido, apreció que -si bien aún no manejan cifras concretas- alrededor de 20% de las empresas del sector cerraron o están con miras de hacerlo. La situación se complica aún más al considerar que, quienes cierran, se reconvierten a otro tipo de negocios que en algunos casos se desvían del turismo.
“Hay gente que está buscando otros horizontes por fuera del turismo en este momento porque es una actividad que está comprometida, sobre todo porque tenemos un momento de incertidumbre muy fuerte”, detalló Cantera.