Exportaciones cerraron un 2022 récord, pero el año estuvo partido en dos mitades

Se registraron ventas de bienes al exterior por US$ 13.356 millones

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Las exportaciones uruguayas de bienes cerraron el 2022 con un aumento de 16,5% respecto al año anterior, alcanzando unos US$ 13.356 millones, y marcando un nuevo máximo histórico. Sin embargo, el año estuvo caracterizado por dos períodos bien diferenciados: uno entre enero y agosto donde se registraron subas interanuales en todos los meses, y otro en el último cuatrimestre del año, donde se constataron caídas de las solicitudes de exportación.

En un contexto de “desaceleración generalizada de la actividad económica mundial y del comercio internacional” (ver recuadro), las exportaciones uruguayas de bienes incluyendo zonas francas alcanzaron un récord histórico en 2022, al superar los niveles máximos registrados en 2021 en un 16,5%, según el informe anual de comercio exterior elaborado por el instituto Uruguay XXI, que incluye las ventas al exterior realizadas desde zonas francas. En concreto, el año pasado se exportaron bienes por US$ 13.356 millones.

Pese al año récord, el último tercio del 2022 estuvo marcado por caídas de las exportaciones en términos interanuales. En diciembre, las solicitudes de exportación se ubicaron en US$ 1.014 millones, pautando una caída de 12% frente al mismo mes de 2021.

El informe refiere claramente a dos períodos distintos en el año. Uno entre enero y agosto de 2022, caracterizado por subas interanuales en cada uno de los meses, y otro que comprende el último cuatrimestre del año cuando se registraron caídas interanuales de las solicitudes de exportación.

Productos y destinos

En el acumulado del año, gracias a los mayores precios, los valores exportados crecieron en casi todos los casos. La soja fue el producto con mayor impacto al alza en las exportaciones de bienes de Uruguay, lo que se explica tanto por mejores precios como por mayores volúmenes exportados. La carne bovina y la celulosa registraron aumentos en valor, no así en volumen.

El ranking de productos exportados está liderado por la carne bovina, cuya participación en el total exportado fue de 19%. La soja, con una participación de 14%, ocupa el segundo lugar y cierra el podio la celulosa con una participación de 14%. Por detrás, se ubicaron los lácteos (7%), el concentrado de bebidas (5%), la madera (4%), el arroz (4%), los subproductos cárnicos (3%) y los vehículos (3%).

A nivel de destinos, China continuó en el primer lugar, a pesar de que las colocaciones hacia este país crecieron a una tasa menor que en 2021. Las exportaciones hacia China aumentaron 12% en 2022 y alcanzaron US$ 3.675 millones, lo que representa el 28% del total exportado. El aumento se explica por las mayores ventas de soja, que ocuparon el 30% del total exportado. Las exportaciones de carne bovina que representaron el 40% del total exportado cayeron 1% con respecto a su valor del año anterior.

El segundo destino de las exportaciones uruguayas fue la Unión Europea, que registró un crecimiento en sus compras a Uruguay de 22% alcanzando los US$ 1.950 millones. Las exportaciones de celulosa, principal producto vendido en este mercado, representaron el 51% del total y crecieron 19% frente a 2021. También se registraron aumentos en las ventas de carne bovina y madera.

Brasil fue el tercer destino de exportación con US$ 1.873 millones, 3% por encima de 2021, destacándose el aumento tanto en términos absolutos como en participación.

En cuarto lugar se ubicó Argentina, representando el 9% de las exportaciones de Uruguay con US$ 1.250 millones, más del doble de lo registrado en 2021. Los principales productos vendidos en el mercado argentino fueron la soja y la energía eléctrica, con participaciones de 42% y 11% respectivamente.


“Desaceleración generalizada de la actividad económica mundial y del comercio internacional”

“El año 2022 finalizó con una desaceleración generalizada de la actividad económica mundial y del comercio internacional”, contextualiza el informe de Uruguay XXI. Se detalla que el PIB mundial cerraría con un crecimiento cercano al 3,2%, más de un punto por debajo del pronóstico de 4,4% que había previo a la guerra en Ucrania. En este contexto, el pronóstico de la Organización Mundial de Comercio (OMC) indica que los volúmenes del comercio mundial de mercancías crecieron 3,5% en 2022.

No obstante, para 2023 se espera un aumento de 1%, lo que representa una caída respecto del 3,4% previsto en su anterior informe, y menos de la mitad del crecimiento promedio del comercio entre 2015 y 2019 (2,4% anual).

Los principales factores que impactaron en el desmejoramiento de la actividad económica y el comercio son: la persistencia de los efectos de la pandemia por covid-19 (en especial los largos confinamientos por la política “cero covid” en China), la invasión de Rusia a Ucrania y sus consecuencias peores a las esperadas para las principales economías europeas, y –relacionado a lo anterior– la profundización de las tendencias inflacionarias a nivel internacional.

“La combinación de desaceleración de la actividad económica y presiones inflacionarias persistentes tornan aún más complicadas las disyuntivas de políticas para hacer frente a los desequilibrios macroeconómicos”, señala el reporte.

A diferencia de la economía mundial, la actividad económica de América Latina en 2022 mostró un crecimiento mayor a lo esperado, con una expansión de 3,5% en 2022, medio punto porcentual por encima a lo proyectado a mediados del año. Esto se debió a un primer semestre pujante, acompañado de precios vigorosos de las materias primas y buenas condiciones de financiamiento externo.

Sin embargo, el crecimiento de la región se ralentizó en la segunda mitad de 2022 y se prevé un freno aún mayor en 2023 a medida que se debilite el crecimiento de los socios del Mercosur, se endurezcan las condiciones financieras y se debiliten los precios de las materias primas. Para América del Sur, la OMC proyecta una expansión de 1,6% en el volumen de exportaciones, dos puntos porcentuales por debajo del promedio mundial.