La Unión Europea alcanzó acuerdo para multimillonario fondo de recuperación económica

Fractura > Negociación deja en evidencia diversas posiciones dentro del bloque

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Tras una maratónica cumbre, los líderes de la Unión Europea (UE) alcanzaron un acuerdo “histórico” para un fondo multimillonario de 750.000 millones de euros, a los que accederá utilizando su calificación de deuda de triple A. De ese monto global, se desembolsarán 390.000 millones en transferencias no reembolsables (menos de los 500.000 millones previstos originalmente) y 360.000 millones en préstamos blandos.

Fue una negociación dura y maratónica. Durante cinco días se desarrolló esta cumbre de líderes que terminó en la madrugada europea del pasado martes, cuando acordaron un multimillonario fondo para la recuperación de la economía de la UE, tras el fuerte golpe de la pandemia.

El fondo asciende a 750.000 millones de euros (alrededor de US$ 860.000 millones), y consiste en 390.000 millones de euros en subvenciones y 360.000 millones de préstamos a bajo interés, según informó la agencia de noticias Reuters.

“Deal!” (¡Acuerdo!) tuiteó el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, a las 5:31 horas de Bruselas, al término de una cumbre que había comenzado el viernes pasado.

Los líderes calificaron de “histórico” este plan de estímulo masivo con el que buscan resucitar unas economías devastadas por el coronavirus.

El acuerdo despeja el camino para que la Comisión Europea, el Ejecutivo de la UE, recaude cientos de miles de millones de euros en los mercados de capitales en nombre de los 27 Estados miembros, un acto de solidaridad sin precedentes en casi siete décadas de integración europea.

Muchas voces habían advertido que el fracaso de la cumbre en plena pandemia habría planteado serias interrogantes sobre la viabilidad del bloque después de años de crisis económica y de la reciente salida de Reino Unido.

“Este acuerdo envía la señal concreta de que Europa es una fuerza de acción”, dijo un jubiloso Michel en una rueda de prensa.

El presidente francés, Emmanuel Macron, uno de los impulsores del acuerdo junto con la canciller alemana, Angela Merkel, lo calificó de “verdaderamente histórico”.

Los líderes europeos esperan que el fondo de recuperación y su correspondiente presupuesto comunitario de 1,1 billones de euros para el periodo 2021-2027 ayuden al Viejo Continente a salir de su recesión más profunda desde la Segunda Guerra Mundial, después de que el brote de coronavirus forzase el cierre de sus economías.

Bloque partido

La negociación no era fácil, ya que en el bloque cada uno de los 27 miembros tiene derecho a veto. En ese sentido, el acuerdo era una prueba de fuego, y puso al descubierto las diferentes posiciones, que probablemente obstaculicen la futura toma de decisiones en lo concerniente al dinero, ya que los países ricos del norte se resistieron a ayudar a los más pobres del sur.

Los Países Bajos -que lideran el llamado grupo de los Estados “frugales”, formado también por Austria, Suecia, Dinamarca y Finlandia- insistieron en que las ayudas a Italia, España y los otros países mediterráneos que sufrieron la peor parte de la pandemia debían concederse principalmente bajo la forma de préstamos y no de subvenciones no reembolsables.

“Hubo algunos enfrentamientos, pero todo eso es parte del juego”, dijo el primer ministro neerlandés Mark Rutte, describiendo como “cálida” su relación con su homólogo italiano Giuseppe Conte.

Sin embargo, el canciller austriaco, Sebastian Kurz, dijo que el poder de negociación de los frugales llegó para quedarse, sugiriendo que el tradicional motor franco-alemán de Europa se enfrentará a los desafíos de Estados más pequeños pero unidos.

De acuerdo a la crónicas de Reuters, las fricciones llegaron a su punto álgido el domingo por la noche, según dijeron varios diplomáticos, cuando Macron perdió los estribos con los “frugales”, a los que el primer ministro polaco Mateusz Morawiecki calificó de “Estados mezquinos y egoístas”.

Humo blanco

Estas disputas hicieron que la cumbre se convirtiera en la segunda más larga de la historia de la UE, a sólo 20 minutos del récord establecido en el 2000 en la ciudad francesa de Niza, según Rutte. “Habríamos batido el récord a las 6:05, pero terminamos a las 5:45”, dijo el mandatario.

En virtud del compromiso acordado, la Comisión Europea pedirá prestado 750.000 millones de euros utilizando su calificación de deuda de triple A, de los cuales se desembolsarán 390.000 millones en transferencias —menos de los 500.000 millones previstos originalmente— y 360.000 millones en préstamos baratos.

Dadas las dificultades, hablar de un momento “Hamilton” para Europa –en referencia a la decisión de Alexander Hamilton de federalizar las deudas de los estados de EEUU en 1790- suena exagerado. El acuerdo de la cumbre no pone a la UE en el camino hacia una unión fiscal al estilo estadounidense, aunque algunos lo ven como un primer paso.

Rutte consiguió con sus presiones incluir en el acuerdo un “freno de emergencia” con el que dejar temporalmente en suspenso las transferencias del fondo de recuperación si se considera que un Estado de la UE no cumple con las condiciones de reforma vinculadas a este dinero a fondo perdido.

Los “frugales” también consiguieron mayores reembolsos del próximo presupuesto plurianual de la UE, un mecanismo de devolución que consiguió por primera vez Reino Unido en la década de 1980 y que Francia esperaba eliminar gradualmente después del Brexit.

El plan de recuperación se enfrenta ahora a un paso potencialmente complicado en el Parlamento Europeo y debe ser ratificado por todos los Estados miembros, lo que supondrá una demora en la entrega de los fondos para unas economías que ya necesitan desesperadamente las ayudas.


Los principales beneficiados

España es el país que más fondos recibirá, puesto que es uno de los más afectados por la coyuntura actual. En total, le corresponden 140.000 millones, de los que algo más de la mitad 72.700 millones, serán transferencias o ayudas directas. Suponen más del 11% del PIB nacional. El presidente español, Pedro Sánchez, señaló que ese monto no tiene comparación con ninguna otra anterior. El Fondo de Cohesión, recordó, supuso algo más de 7.800 millones de euros entre 2014 y 2020.

Por su parte, a Italia le llegarán 81.000 millones de euros en ayudas directas o transferencias y 127.000 millones en créditos. Grecia recibirá en torno a 72.000 millones de euros y Portugal, unos 15.300 millones de euros.