O´Neill: “No va a haber caja para inversión pública, entonces la única posible es la privada, que necesitará incentivos”

EDICIÓN ESPECIAL 2018

Diego O´Neill, presidente de la Cámara de la Construcción del Uruguay (CCU)


El sector de la construcción lleva tres años consecutivos de caída. Para el novel titular de la Cámara, el próximo gobierno encontrará una situación de déficit fiscal importante que tendrá que atender, y será la inversión privada la herramienta para el repunte de la actividad.

¿Cuáles son las expectativas que tiene para el sector en 2019, sin perder de vista que es un año electoral y que todos los anuncios apuntan a una desaceleración de la economía?

La construcción lleva tres años de caída. De 2015 a 2017, se acumuló cerca de un 20% de caída en relación a 2014. De acuerdo a la información que tenemos del tercer trimestre, este año la caída se detuvo, pero no alcanzó a repuntar, por lo que estamos en un escenario de crecimiento nulo. Para el año que viene esperamos un panorama similar con algunas incertidumbres, sobre todo por el lado de la inversión. En la medida que las obras de Participación Público Privada (PPP) se concreten puede haber un poco más de actividad, pero eso tampoco influiría para cambiar la situación. El problema más importante lo vemos por el lado de la inversión privada.

En este contexto, ¿cuáles son los desafíos que tiene por delante el sector y cuáles los temas de preocupación?

El desafío y la preocupación van justamente por el lado de la inversión privada, que está deprimida respecto a años anteriores. En ese contexto, nos preocupa por ejemplo que se concrete la inversión de UPM 2, que desde la Cámara de la Construcción es vista como muy positiva para el país y también para el sector, pero hay nubarrones en el horizonte. Otra preocupación que tiene la industria es la productividad. Tenemos que avanzar en este tema porque eso es lo que nos da crecimiento sostenido y desarrollo.

¿Qué le pediría al próximo gobierno?

Mejorar la competitividad del país, bajar el costo del Estado, gestionar profesionalmente las empresas públicas y potenciar los instrumentos para favorecer la inversión. El próximo gobierno encontrará una situación de déficit fiscal importante que tendrá que atender. Nos parece que no va a haber caja para inversión pública, por lo que la única posible es la privada, que necesitará incentivos.