El documento proyecta que entre diciembre de 2025 y febrero de 2026 ingresarán al país “más de 1 millón 400 mil extranjeros no residentes”, lo que, de cumplirse, consagraría una variación interanual de +5% y haría que esta temporada sea “la segunda mejor temporada de la historia en personas” después de 2017/18. En la misma línea, planteó que el total de ingresos de extranjeros no residentes durante el año alcanzaría los 3.351.000 en 2025 y 3.405.000 en 2026, algo que se explica “principalmente por mayor llegada de argentinos y brasileños”, además de que convertiría al próximo en “el segundo mejor año de la historia en ingreso de turistas extranjeros” tras 2017.

Por otro lado, indicó que el gasto de los extranjeros que visiten Uruguay durante la temporada “sería un 4% superior a la temporada anterior y similar a 2019/20, pero aún 27% menor a 2016/17” porque, si bien vendría la misma cantidad que en ese período, gastarían menos: “tarifas ceden mientras costos suben”, plantea el documento. Por año, el gasto de los extranjeros en 2025 sería un 19% superior al anterior y en 2026 un 5%: “el ingreso en términos reales recién recupera en 2026 los niveles de 2019 y está lejos del mejor año (-25% de 2017)”, consignó. Así, la participación del turismo en el PIB llegaría al 6,4% en 2026, de acuerdo con el informe.

“Nuestro modelo tiene las variables de relación de precios con Argentina, relación de precios con Brasil, salario en dólares de los argentinos y actividad económica argentina. Los cuatro van a estar en niveles mejores que hace un año. Eso lleva a que, una vez que lo imputamos al modelo, derive en que pronostique un flujo de visitantes mayor, tanto por argentinos como por brasileños”, dijo a CRÓNICAS Martín Alesina, coordinador de investigación de Ceres.

Esa temporada, dijo Alesina, “fue muy buena y un año bueno, sobre todo en términos de personas”, aunque “el sector viene de varios años arrastrando problemas de rentabilidad”, ya que a pesar del aumento los visitantes “gastan menos cuando uno pasa los dólares a pesos constantes”: “El gasto va a incrementar un 5% aproximado en términos reales. Eso es muy positivo porque marca una recuperación sostenida del gasto ya de hace bastantes años, pero cuando uno lo compara con la prepandemia estamos igual. Recién este año estaríamos alcanzando el 2019 en términos de gasto real”, acotó.

Buenas expectativas por parte de los operadores

De acuerdo a lo que consignó el estudio, también “existe un optimismo generalizado en términos de facturación, para el corto y largo plazo”, dado que el 49% piensa que crecerá. Además, el 67% de los operadores turísticos es “optimista o muy optimista” de cara al desarrollo en el sector, y el 85% afirmó que el flujo turístico en su establecimiento fue “igual o mejor” que en un “año promedio”.

Según Alesina, la expectativa de que lleguen más turistas extranjeros está “muy correlacionada” con el optimismo de los operadores. “La expectativa es buena e incluso hasta mayor que los números que nosotros damos cuando ellos manejan los números de reservas comparativos a la temporada anterior. En conversaciones muestran un optimismo muy generalizado en términos de flujo y en términos de facturación futura que van a tener”.

El integrante de Ceres también se refirió a algunos señalamientos que realizaron los integrantes del sector. Dijo que la opción más mencionada entre las acciones que “consideran más prioritarias a nivel público para impulsar el turismo en todo el país”, son los “cambios impositivos para mejorar rentabilidad”. Por otro lado, señalaron que es preciso “mejorar beneficios impositivos para la inversión” y, en tercer lugar, aparecen tanto buscar una “mayor conectividad aérea” como una “mayor promoción internacional”, con casi idéntico caudal de menciones.