El pasado martes 13, la Cámara de Comercio y Servicios del Uruguay (CCSU) mantuvo una reunión con el ministro del Interior, Carlos Negro, con el objetivo de abordar la preocupación del sector comercial ante la reiteración de los denominados “robos piraña”. En la oportunidad, se trasladaron las inquietudes del rubro, con el fin de trabajar en propuestas y articular esfuerzos hacia el futuro, y se plantearon diversas medidas en esa línea.
Del encuentro con el ministro del Interior, Carlos Negro, participaron representantes de distintos rubros afectados, entre ellos, la Asociación de Supermercados del Uruguay, la Cámara Uruguaya de Farmacias, el Centro de Farmacias del Uruguay, la Asociación de Farmacias del Interior, la Federación Uruguaya de Empresas de Seguridad, la Cámara Uruguaya de Empresas de Seguridad y representantes de los shoppings de Montevideo.
La reunión, que tuvo lugar en la sede de la CCSU, fue un espacio de intercambio con las autoridades donde se trasladaron las inquietudes del sector, con el fin de trabajar en propuestas y articular esfuerzos hacia el futuro.
Allí, se analizó el impacto de los robos tipo “piraña” —especialmente de perfumes— y otros delitos similares. Se destacó cómo estas situaciones afectan tanto al público, que evita ciertos comercios en horarios nocturnos, como a los trabajadores, que manifiestan reticencia a cubrir turnos o realizar envíos en determinadas zonas.
Además, se remarcó la necesidad de que los comercios cuenten con protocolos claros de actuación frente a situaciones delictivas, y que estos se actualicen periódicamente en función de la evolución de las modalidades delictivas.
Se hizo énfasis en la importancia de implementar medidas de disuasión para prevenir delitos o al menos retrasar su concreción. Entre las propuestas, se manejó la mejora de los controles en accesos y estacionamientos, la colocación únicamente de testers o cajas vacías en vitrinas, y la posibilidad de reforzar los vidrios con láminas de seguridad.
Trabajo conjunto
Por su parte, las autoridades del Ministerio del Interior subrayaron la utilidad de interconectar los sistemas de videovigilancia de las empresas con los centros de monitoreo policial, con el propósito de mejorar los tiempos de respuesta y facilitar la prevención. Se propuso también la generación de canales de alerta directa entre el sector privado y la policía.
Finalmente, se planteó como clave la conformación de una comisión de trabajo entre autoridades y representantes del sector privado para avanzar en la implementación de estas medidas y otras que puedan surgir del intercambio público-privado.