El reciclado: un tema de agenda pública en los residuos de los uruguayos

El 17 de mayo > se celebró el Día Internacional del Reciclaje

El gobierno nacional creó el Ministerio del Medio Ambiente y con este pasó a primera plana un tema que se escondía en el fondo de los tachos de basura de los ciudadanos: la gestión de los residuos y el reciclaje. La política ambiental supone avanzar en un cambio cultural que también se refleja en las estrategias de marketing de las empresas, que no quieren quedar por fuera de la tendencia. Asimismo, la legislación y las autoridades empujan para que cada vez más ciudadanos sean conscientes de lo que sucede con lo consumido puertas afuera del domicilio.

En la apertura del Ciclo de Talleres: Hacia un Uruguay + Circular celebrado el pasado 28 de abril, el ministro de Ambiente, Adrián Peña, señaló que “la gestión de residuos está en el eje de la política ambiental del Ministerio y de este Gobierno”, y agregó que “uno de los grandes objetivos es avanzar un cambio cultural” en lo que refiere al vínculo con los residuos y la manera cómo son gestionados por los ciudadanos.

La Ley de Gestión Integral de Residuos sienta las bases de la Política Nacional de Residuos, y es en ese marco que numerosas instituciones, organizaciones y colectivos trabajan en el desarrollo del Plan Nacional de Residuos, que se busca cerrar a finales del 2021. 

Una de estas organizaciones es Cempre (Compromiso EMpresarial Para el REciclaje), una asociación civil sin fines de lucro que nace en 1996 a iniciativa de empresas uruguayas con la misión de impulsar la reducción de residuos y el reciclaje en Uruguay.

Recientemente esta organización desarrolló la plataforma ¿Dónde Reciclo?, que trata de centralizar todos los planes de gestión de residuos a nivel país. Esto brinda información y educación a los usuarios sobre cómo tratar los residuos a nivel domiciliario y a la vez en un mapa puede encontrar el punto de recepción más cercano.

En este contexto, la directora de Cempre, Ximena Varón, aseguró a CRÓNICAS que si bien la aplicación tuvo gran cantidad de descargas su éxito radica en brindar la información de forma clara y amigable a los usuarios.

Consultada acerca de si la sociedad es más consciente acerca del reciclaje, Varón afirmó: “Hay más conciencia en este tema pero falta trabajar la cultura del reciclaje”.

En esta línea, la representante de Cempre aseveró que el compromiso empresarial en torno al tema se ha potenciado a raíz de que el consumidor es cada vez más exigente en lo que refiere a la protección del medio ambiente. “Las marcas lo están empezando a visualizar y lo incorporan en sus estrategias de comunicación”, apuntó.

Asimismo, la directora aseguró que las nuevas legislaciones impulsadas en torno al tema colaboraron. “Empieza a haber compromisos que asumir, entonces el reciclaje pasó a ser un tema de agenda pública”, puntualizó y añadió: «El desafío está en que el ciudadano incorpore esos hábitos en el hogar».

Consultada acerca de si existen suficientes puntos para reciclar en el país, la directora de Cempre indicó: «Todos queremos tener uno en la esquina de nuestra casa». Sin embargo, la directora sostuvo que los puntos están bien señalizados y en lugares públicos en Montevideo y que donde más se complejiza es en el Interior del país. Varón aludió a la nueva reglamentación que exige que para diciembre de este año los planes de recuperación tienen que estar presentes en todos los departamentos del país.  «Hoy no están dadas las condiciones para eso, pero no quiere decir que a fin de año no lo esté», opinó y añadió que la disposición «es super desafiante porque no todas las intendencias tienen capacidades instaladas para esto y hay que generarlas», puntualizó.

Un ejemplo exitoso

Mañana sábado a las 10 horas la Intendencia de Canelones presentará en el barrio Rincón del Pinar la iniciativa Hogar Sustentable que prevé la inclusión de un nuevo contenedor para residuos reciclables en los hogares canarios. Esta iniciativa tuvo un ensayo en el que contribuyó Cempre. 

En este plan piloto la intendencia de Canelones otorgó contenedores especiales a ciudadanos y ciertos días de la semana pasaba a recolectar los reciclables. «Es un contrato de confianza entre las partes», reflexionó Varón y señaló que la experiencia logró con éxito que los ciudadanos involucrados efectivamente sacaran sus contendores de reciclables en el día establecido para que luego fueran recogidos por el camión municipal encargado de esos residuos. Para Varón, una de las claves de los buenos resultados de esta experiencia fue que las personas se sintieron responsables de sus reciclables; «en un contenedor es tierra de nadie», apuntó.

En este sentido, aclaró que existen responsabilidades de las dos partes, es decir, del usuario que debe gestionar sus residuos en el domicilio y de las autoridades que deben disponer de las herramientas necesarias para procesarlos adecuadamente.

Las nuevas metas

La nueva Resolución de metas de recuperación de envases establece que a diciembre de 2021 los planes de recuperación tienen que estar presentes en todos los departamentos del país. A diciembre de 2023 se debe lograr una meta de recuperación del 30%, a fines de 2025 la meta de recuperación será de 50 % y el sistema debe estar operativo en todas las localidades de más de 5.000 habitantes. Por otra parte, a partir de 2025 las bebidas no alcohólicas y aguas de mesa que se comercialicen en envases plásticos deben contener 40% de material reciclado. 

En la misma línea, se incorpora la exigencia de contar con planes de gestión de residuos de envases a los importadores y productores de envases que no forman parte integral de un producto (bandejas, films, vajilla descartable) y se establece para el 2025 la obligación de que los envases de bebidas plásticas no retornables cuenten al menos con 40 % de material reciclado.

Por otra parte, la resolución referente a plásticos de un solo uso prohíbe el uso de sorbitos a partir de enero 2022. Además, instala un sello ambiental para estimular la reducción del consumo de plásticos de un solo uso y establece la obligación para los organismos públicos de contar con un plan de acción para reducir el consumo de plásticos de un solo uso.


Montevideo Más Verde

Por su parte, la Intendencia de Montevideo (IM) tiene en el territorio distintas modalidades de recolección de residuos reciclables generados en domicilios, como son: los bolsos y contenedores plásticos, los centros de entrega voluntaria en comercios, los centros de entrega asociados a publicidad en vía pública y los contenedores para reciclables en calle en el municipio B.

Según información brindada a CRÓNICAS por la división de Desarrollo Ambiental, estas iniciativas suman 2.200 puntos de recolección de materiales reciclables a lo largo y ancho de la ciudad.

En particular, el mecanismo de bolsones que viene desarrollándose desde diciembre de 2020 ha significado la incorporación de 1.141 nuevos puntos, lo que, según la IM, ha sido bien valorado por vecinas y vecinos de los distintos complejos habitacionales.

Hasta el momento, se han gestionado 1.329 bolsones en 1.113 edificios y cooperativas, y se han vaciado unos 3.758 a través de 2.880 solicitudes gestionadas.

Hoy en día se estima que unas 60.000 personas están utilizando los bolsones en Montevideo. Desde diciembre se han recolectado aproximadamente unas 130 toneladas, representando un 15% del material que llega a las plantas de clasificación, pero dada su calidad y excelente clasificación previa representa el 25% de lo recuperado.

Desde la comuna afirmaron a CRÓNICAS que se prevé en la segunda etapa que está comenzando se alcance los 3.000 puntos adicionales, llegando a 100.000 montevideanos más.

Cabe resaltar que todos los materiales recolectados son procesados en las cuatro plantas de clasificación que operan en el marco del Plan de Gestión de Envases, donde trabajan exclasificadores informales en régimen de cooperativas, y en Usina 5 bis, donde se realizarán mejoras edilicias y de organización de los trabajadores.

A su vez, se encuentran en inicio de construcción los dos primeros Ecocentros de la ciudad (ubicados en municipios C y CH), donde se hará la recepción de materiales reciclables, voluminosos como muebles en desuso, aparatos eléctricos en desuso, entre otros, para su posterior valorización. Estas nuevas infraestructuras tendrán un importante componente de difusión y educación en el territorio.

Respecto a la valorización de materiales voluminosos y aparatos eléctricos, la IM a iniciativa de Ucrus (Unión de Clasificadores de Residuos Urbanos Sólidos) se encuentra trabajando en un proyecto para implementar centros de recuperación de estos materiales con la inclusión laboral de actuales clasificadores informales denominado Montevideo Integra.

Residuos orgánicos

En la misma línea, la Intendencia cuenta desde 1997 con la una Planta de Tratamiento de Residuos Orgánicos (Tresor) que produce compost en base a residuos de distintos orígenes, principalmente residuos orgánicos provenientes de industrias. El compostaje se realiza en camellones en un área total operativa de 20, ubicadas en la zona rural montevideana de Toledo Chico.

A su vez, el Equipo Técnico Ambiental (ETEA) apoya el funcionamiento de composteras en diferentes centros sociales y educativos.

Estrategia futura

La estrategia Montevideo Más Verde para la gestión de los residuos de Montevideo en el quinquenio 2020-2025 busca transformar la experiencia, la cultura y la relación de los ciudadanos con los residuos, poniendo énfasis en la valorización y la limpieza urbana desde la responsabilidad individual y colectiva de los generadores (domiciliarios o  no domiciliarios).

Entre otras acciones se planifica una mejora en el servicio de recolección de residuos, buscando minimizar la permanencia, en tiempo y espacio, de los residuos en el espacio público.

Operará con diferentes mecanismos tecnológicos para diferentes zonas de la ciudad. Será ágil, robusto y capaz de adaptarse a cambios en la realidad, también permitirá ensayar nuevas soluciones, desarrollando la mejora continua enfocada en el servicio a la ciudadanía.

El sistema tratará de disminuir el volumen de los residuos en el sistema de contenedores públicos (donde este exista) a través de la interacción con dispositivos de soporte a la clasificación en origen.