Juan Cristina, director del Laboratorio de Virología Molecular de la Facultad de Ciencias (Udelar)
El virólogo y exdecano de la Facultad de Ciencias de la Universidad de la República (Udelar), Juan Cristina, manifestó su preocupación por el avance de los contagios de covid-19 en el país. En tanto, hizo énfasis en la importancia de la vacunación como canal de salida de la pandemia, presente en el país desde hace ya un año. En ese sentido, el también docente e investigador remarcó que las vacunas que se están suministrando en Uruguay “son seguras y están probadas”.
En marzo comenzó el plan de vacunación, que es la gran apuesta del gobierno para poder vislumbrar una salida de la crisis sanitaria, una vez que se logre la llamada inmunidad de rebaño. Sin embargo, este mes también se ha caracterizado por un continuo aumento de los contagios diarios, superando los 1.000 casos nuevos durante varios días seguidos.
Esta realidad hizo que el pasado martes el Poder Ejecutivo debiera tomar nuevas medidas para restringir algunas actividades, con el objetivo de frenar la expansión del virus.
Pese a que el país se encuentra en una situación muy delicada, en diálogo con CRÓNICAS, Juan Cristina elogió el manejo de la pandemia por parte del gobierno, donde destacó la sincronía lograda entre institutos científicos del sector público y el privado, incluyendo la colaboración de la Universidad para dar una respuesta efectiva a la emergencia nacional desde el inicio.
La creación del Grupo Asesor Científico Honorario (GACH) también fue una decisión acertada, según su parecer.
A esto se le suma el esfuerzo realizado por la Udelar, gracias al proceso de descentralización iniciado 10 años atrás, que permitió tener actualmente tres laboratorios trabajando para el Ministerio de Salud Pública (MSP) en el Interior, más precisamente, en Salto, Tacuarembó y Rocha, sostuvo.
De todas maneras, dijo que las cifras actuales son una señal de alerta, dado que, si bien en la primera cuarentena voluntaria realizada en los comienzos de la pandemia hubo un gran nivel de acatamiento por parte de la sociedad uruguaya, luego “se fue perdiendo la percepción del riesgo”.
Esta semana se batieron récords en las cantidades de casos diarios, de personas cursando la enfermedad y de pacientes internados en el CTI con covid-19. De acuerdo con el especialista, esos datos reflejan “una situación que es realmente preocupante, por lo cual, para salir de esto, nos tenemos que vacunar todos los que podamos”.
Igualmente, es sabido que el efecto de las vacunas no es inmediato. A fin de lograr la inmunidad adecuada, por lo menos entre un 70% y un 75% de la población uruguaya debe vacunarse, expresó Cristina. Hasta que eso sea un hecho, las autoridades insisten en la necesidad de seguir tomando las precauciones pertinentes, como el uso del tapaboca y de alcohol en gel, así como el distanciamiento social.
Vacunas seguras
El virólogo remarcó que las vacunas que se están suministrando en Uruguay “son seguras y están probadas”. Esto quiere decir que cuando uno recibe la inmunización, si bien no se evita el contagio, estará protegido –en la mayoría de los casos- de terminar en el hospital a causa de la enfermedad. Además, dijo que son “los medicamentos más controlados que existen”, por lo que no hay falta de confianza sobre ninguna de las que ya fueron aprobadas.
“Cuando hacés un plan, utilizás distintas vacunas de acuerdo a los grupos de riesgo que quieras vacunar. Por ejemplo, en el sector de la salud, donde los colegas han estado en una lucha muy larga, muy difícil, las que usamos tienen un 94% de eficacia, porque ellos son quienes están en la primera línea y necesitamos que no se conviertan en un problema. O sea, por más que tengamos camas disponibles, si se enferman los intensivistas o los enfermeros, poco vamos a poder hacer. Por eso es tan importante que el personal del sistema sanitario acceda a la vacunación”, aseveró.
Al mismo tiempo, explicó que la vacuna que se está administrando a la ciudadanía en mayor medida, que es la del laboratorio chino Sinovac, está hecha con la tecnología tradicional con la que se han hecho vacunas durante 60 años, por tanto, ya se tiene experiencia en ese aspecto y se conoce que la misma “es muy útil” para inmunizar a grandes grupos de población.
Ejemplo en el mundo
El experto hizo énfasis en que Uruguay tiene un esquema de vacunación de primer nivel y una amplia experiencia en esa tarea. A su vez, agregó que un comité asesor de vacunas asesora en esa materia al ministro de Salud Pública, Daniel Salinas.
En este momento, en el país se están dando dos vacunas con dos tecnologías diferentes: Pfizer y Sinovac. Mientras tanto, a nivel mundial existen más de 100 vacunas candidatas con siete tecnologías distintas que están en diversas etapas. Para llevar tranquilidad a la ciudadanía, Cristina aseguró que “ninguna de las vacunas que se están dando en Uruguay se han salteado los pasos de seguridad”.
El agente etiológico de esta enfermedad se conoció en diciembre del 2019 y hoy, a poco más de un año, los países del mundo entero ya se encuentran implementando sus respectivos programas de vacunación. Sobre esto, opinó: “Que estemos hablando de vacunas ahora es un hecho que nunca ocurrió en la historia de la humanidad, es decir, estamos haciendo las cosas en tiempo real, es un hito histórico. En otra época hubiéramos demorado por lo menos 10 años en generar una vacuna”.
Hacia el futuro
¿Qué se puede esperar para los próximos meses en cuanto al avance de la pandemia? Según el entrevistado, lo que suceda a futuro en el país va a depender del éxito que tenga la campaña de vacunación, que va a tener “subidas y bajadas”.
Ejemplificó que en Israel hicieron tres lockout: en los primeros dos “les fue mal” y el tercero está llegando a su fin con la paulatina apertura de las actividades tras la vacunación, donde “ya se empieza a ver una disminución significativa –de los casos de covid-19- que apunta hacia la salida del problema”.
Por lo tanto, “lo que se puede aventurar es una población viral, o sea, un número importante de contagios, y tenemos que hacer una campaña rápida y efectiva para llegar mínimamente al 70% de la población vacunada; ahí recién vamos a ir viendo los efectos, ese es nuestro canal de salida”.
Cambios que vinieron para quedarse
Toda pandemia trae consigo consecuencias sociales y económicas que suelen ser sumamente significativas. En este caso, la llegada del covid-19 se enmarca en “una aceleración de cambios que tienen que ver con el mundo del trabajo, que vinieron para quedarse”, indicó Cristina. Añadió que esto constituye un desafío enorme, porque es un proceso transformador que, si bien ya existía, “ahora se ha acelerado de una manera muy importante y me preocupa mucho”.
De hecho, como prorrector de Enseñanza de la Udelar, este tema lo toca de cerca. En ese sentido, señaló que “uno de los problemas más importantes que tenemos es cómo preparar rápidamente a las futuras generaciones para ese mundo”.
