Robert Silva: La oposición “se equivoca feo” al decir que los niveles de exigencia bajaron

La reforma educativa sobre la mesa

En vistas del comienzo de clases, CRÓNICAS consultó a Robert Silva, presidente del Consejo Directivo Central (Codicen) de la Administración Nacional de Educación Pública (ANEP), acerca de los cambios implementados en la currícula y la organización de la educación pública. Además, explicó sus posturas acerca de las polémicas que se han generado en torno al tema y afirmó que las instancias de formación para docentes fueron exitosas.

Por Mateo Castells | @teocastells

A menos de un mes para que los timbres suenen en todos los centros educativos del país, mientras los padres recorren las góndolas de los supermercados en busca de los útiles escolares y los cuadernos se forran con papeles de colores, ante el inminente inicio de los cursos, la reforma educativa comienza a hacer ruido nuevamente y pone a dialogar a las distintas voces que forman parte de esta discusión.

Tras un largo debate que recorrió todos los confines de las redes sociales, las páginas de los diarios, las bocas de todos los políticos en el Parlamento y las pancartas de los distintos gremios y agrupaciones que se manifestaron en contra, finalmente la reforma educativa, una arista fundamental dentro de la agenda política de la coalición multicolor, entrará en vigencia este 2023.

Dentro de esta reforma se enmarca una nueva política curricular, lo que implica una nueva forma de enseñar que generará, según quienes la promueven, mejores aprendizajes. El nuevo marco curricular establece 10 competencias generales que los estudiantes desarrollarán durante su trayecto en la educación obligatoria, un período que abarca desde los cuatro a los 18 años de edad.

Para Robert Silva, esta reforma potenciará el aprendizaje desde los conocimientos, para desarrollar las competencias necesarias dentro de los nuevos estándares que se implementarán: comunicación, pensamiento crítico, reflexivo y científico, junto con las habilidades de aprender en conjunto y de forma permanente, que irá ligado al conocimiento de la ciudadanía global, regional y digital. 

El paradigma de la educación uruguaya se expande y atravesará un proceso de transición, en el que se desplazará desde una educación “estrictamente fragmentada”, basada en contenidos con metodologías de antaño, hacia una nueva educación que apunta al desarrollo de competencias para la vida, a partir del saber hacer y llevarlo a cabo. 

Para hacer frente a esta nueva forma de enseñar, ANEP ha realizado instancias formativas para que los docentes se nutran de los conocimientos y herramientas necesarias para que la reforma sea implementada con éxito.

El titular del Codicen recordó que quienes criticaron las instancias de formación, olvidaron mencionar y evaluar que nunca en el Uruguay, ante un cambio de plan, hubo una preparación masiva para quienes la llevarán adelante.

El 86% de los maestros de escuela, el 70% de los docentes de UTU y el 66% de los docentes de secundaria estuvieron presentes en estas instancias que utilizaron las plataformas digitales como medio de difusión e interacción con los contenidos dictados.

Además, fueron capacitados 440 inspectores y 2.000 directores en un proceso de formación que continuará durante el 2023, para que la reforma sea articulada y supervisada de forma correcta.

Lo que se dice desde la vereda de enfrente

La oposición ha mirado de soslayo el proceso de la reforma educativa desde que comenzó a gestarse. Un argumento que ha sonado con frecuencia desde ese sector, es que la baja significativa que han experimentado los niveles de repetición, se debe a la baja exigencia que se imparte en las aulas de todo el país, siendo el oficialismo partícipe y principal responsable de esto. 

Tras ser consultado al respecto, Silva respondió que quienes sostienen este argumento “se equivocan feo” y sostuvo que eliminar la repetición o disminuirla intencionalmente no es una estrategia que permita mejorar la educación.

A su vez, aseveró que la baja en las repeticiones se ha logrado en virtud de nuevas estrategias que se han implementado para hacer frente a la situación. Las escuelas de cuatro horas tienen por primera vez miles de horas de tutorías para afianzar los aprendizajes de los estudiantes con mayores dificultades en Matemáticas y en Lengua, hay maestros comunitarios que van a las escuelas comunes, el Verano Educativo trabaja en la alfabetización de Lengua y de Matemática, hay formación específica para docentes y hay estrategias focalizadas de intervención en distintas áreas.

“Hay un conjunto de acciones que la administración ha puesto en práctica, muchas de las cuales fueron aprendidas en pandemia, que están impactando en la baja de la repetición y eso tiene que ir unido a los efectivos aprendizajes. Por eso es importante no solo bajar la repetición, sino mejorar las evaluaciones que nos demuestran cuánto aprenden nuestros niños”, sentenció.


Las piezas que faltan

Casi un millón de uruguayos están en el clearing. En muchos casos, por falta de información y formación en materia de economía y finanzas, lo que los lleva a no tener un manejo acorde de su dinero. 

Desde ANEP se está trabajando en la inclusión de la educación financiera en las mallas curriculares, a raíz de un reclamo que surgió desde los propios estudiantes. Junto al Banco Central del Uruguay (BCU), las autoridades de la educación buscan generar las estrategias necesarias para que este conocimiento pueda ser impartido en las aulas a través de talleres y unidades curriculares como matemática y economía.

Pero aún faltan piezas en el tablero: la salud mental y la sexualidad también son temas que se encuentran en la actual agenda de las autoridades. En UTU se ha incorporado un nuevo taller de salud y sexualidad, donde se abordan temas de adicciones y salud emocional, además de estar trabajando activamente en estrategias de intervención en conjunto con el Instituto Nacional de la Juventud y el Ministerio de Desarrollo Social, a fin de desarrollar talleres dirigidos a docentes para que sean capacitados para abordar diversas problemáticas que se puedan presentar en las aulas.