Sustancia X: una firma que encuentra la fórmula justa para la mejora continua

Santiago Rodríguez Rojas, co-Fundador de Sustancia X


Sustancia X surgió de la fusión de dos proyectos y del encuentro de dos emprendedores que buscaron la fórmula para salir a flote de situaciones complejas. Fue en una reunión, hace cuatro años, donde se dio el puntapié del comienzo de una historia que llegó a la conclusión de que la comunicación lo es todo. Hoy la firma profesa que “así como existe una sustancia química en el cuerpo que despierta del amor entre personas, llegó la hora de que exista la sustancia que encienda el amor hacia las marcas”.

¿Cómo y cuándo surgió la posibilidad de crear la empresa?

Hace cuatro años, junto a mi actual socio, Santiago Yañez, nos reunimos en una mesa de CoWork Latam para hablar sobre nuestros proyectos de ese momento. Ambos nos encontrábamos en una posición compleja y decidimos comenzar un proyecto juntos para testearnos como compañeros. De ahí en adelante, tras el éxito del proyecto piloto, decidimos fusionar nuestros emprendimientos y creamos Sustancia X.

¿Cuáles son los principales objetivos de la empresa?  

Hoy nos hemos convertido en una empresa de servicios de publicidad y software para la industria científica. Esto nos ayudó a reconfigurarnos en busca de clientes y proyectos que proponen generar un cambio disruptivo o que representan un desafío en el área. Nuestro principal objetivo es acompañar a estas empresas en la construcción de su imagen online, aplicando herramientas y estrategias innovadoras.

¿Qué cosas son las que distinguen a la empresa dentro del rubro?

Nuestra creatividad y compromiso son los principales pilares. A partir de esto intentamos construir relaciones sólidas con cada uno de nuestros clientes. 

¿Qué servicios se ofrecen?

Desde Sustancia X ofrecemos servicios de publicidad digital y desarrollo de software, principalmente, para la industria científica. Contamos con equipo y socios estratégicos complementarios que nos permiten crear trabajos de muy buena calidad, adaptándonos a lo que requiera cada cliente.

¿Con la llegada de la pandemia el pasado año tuvieron que modificar aspectos de la firma a la hora de desarrollarse?

Si, principalmente pasamos todo nuestro equipo a modalidad remota. Si bien era una posibilidad previa a la pandemia, hace ya un año nos encontramos trabajando de esta manera y, seguramente, por un tiempo se mantenga así.

¿Cuál es el ABC o los puntos esenciales de la empresa para trabajar y de qué manera se realiza la labor?

Nos encontramos constantemente en el camino de convertirnos en los mejores. Para esto, nos hemos adaptado a nuevas metodologías de trabajo, buscamos el feedback constante del cliente y siempre damos todo de nuestro lado. Es la esencia de Sustancia X.

¿Cuánto hace que se asoció a AJE y cuáles fueron los motivos para hacerlo?

Hace poco que soy socio de AJE oficialmente, aunque tengo muchos amigos y conocidos en la asociación que siempre me han invitado a participar y por lo tanto me he sentido parte desde hace un tiempo.

¿De qué manera ha colaborado AJE al desarrollo del proyecto?

He tenido la oportunidad de asistir a eventos y charlas específicas de AJE que creo han aportado a la formación de todo el equipo.

¿Cómo es ser empresario en Uruguay? ¿Cuáles son las ventajas y desventajas de emprender?

Supongo que un desafío como en cualquier otro lado. Siento que Uruguay es un lugar excelente para comenzar proyectos, ya sea por su buen ecosistema emprendedor como por la facilidad de llegar a personas clave.


Señas de identidad

Santiago nació hace 26 años en Montevideo. Si bien de niño soñaba con ser inventor, hoy es licenciado en Ciencias de la Comunicación. Hace algunos años atrás tuvo una empresa de marketing digital llamada Skyid (que luego fusionó para convertirse en Sustancia X).

Se define como una persona responsable, observadora y creativa. Entre sus películas favoritas destaca a El Ilusionista, y si se trata de lectura elige ‘El Alquimista’, de Paulo Coelho y ‘Los Innovadores’, de Walter Isaacson. Su lugar predilecto en el mundo es Parque Tayrona, en Colombia.

Se reconoce un gran admirador de la arquitectura. “Disfruto caminar y recorrer los barrios observando diseños y estilos”, comenta.