- ¿Qué pasa con el empleo en esta realidad?- Eso es lo que a mí me preocupa. Esta ganancia de productividad se va a traducir en un aumento del desempleo, con una situación permanente en ese sentido, y más elevado que los años anteriores. Se ha acelerado el reloj de la automatización en la pandemia; si las empresas ganan lo mismo con un 30% menos de trabajadores, hay muchos empleados que van a tener que buscar otra alternativa, y va a haber una transición donde se va a generar un foco de tensión en los mercados de trabajo. Ahí es donde hay un desafío muy grande en materia de políticas públicas y sociales, de atención en esta transición laboral de muchas personas que se han encontrado con que la tarea que realizaban ya no es requerida por parte de las empresas. Ahí hay que repensar cómo se ejecutan los programas sociales, que son muchos en Uruguay, de asistencia a este tipo de personas que tienen este problema de inserción laboral.Tenemos que ponerle atención y creatividad para buscar soluciones para toda esa gente.Esa es mi visión, y tiene estas dos patas que son complementarias y necesarias; no podemos descuidar ninguna de las dos. La economía tiene que crecer y para eso se necesitan reformas liberales, en el sentido de reducir costos y ser más eficientes y de una apertura comercial más grande y mayor competencia. Pero al mismo tiempo, se necesita más Estado en los sectores que lamentablemente quedan al margen de este aumento de productividad.“La ganancia de productividad se va a traducir en un aumento del desempleo”
- El Índice Líder de Ceres se enfoca, también, en el desempleo. ¿Ya tienen algún indicador con respecto al índice de marzo?- El Índice Líder se va a publicar el miércoles 31; ahí va a salir el dato del mes cerrado. Todavía no tenemos un avance, (pero) los últimos registros muestran que ha sido errático, a veces sube, a veces cae, no se ve un patrón ni de crecimiento ni de caída. Sí se ve una caída fuerte en el primer semestre del año pasado y una recuperación en el segundo; una vez que esta recuperación fue llegando a completarse, aparecieron movimientos erráticos de subidas y caídas todos los meses.Entonces, no hay un patrón claro todavía para el crecimiento post rebote inicial.- La semana pasada, desde Ceres se proyectaba que Uruguay cerraría 2021 con un crecimiento de 3,5%. Teniendo en cuenta el anuncio de nuevas medidas de restricción a la movilidad del pasado martes, ¿cree que esa proyección va a bajar?- Ese crecimiento para 2021 que presentamos en el informe de realidad macroeconómica que se publicó a mediados de mes lo vamos a revisar el 14 de abril, cuando presentemos la actualización del mismo. Ahí vamos a revisar nuestras proyecciones de crecimiento para 2021, así como también la proyección del tipo de cambio y de inflación para fin de año, a la luz de los cambios internos que se han generado por las medidas de movilidad, y también de los cambios internacionales que son importantes en materia de tasas de interés y precios, así como también la situación regional -Argentina y Brasil-. Estamos permanentemente monitoreando todo eso para poder tener nuestras proyecciones del año, y se revisan invariablemente porque es muy dinámica la situación.- Ayer se confirmó la caída del PIB en 2020 de 5,9%. ¿Era mayor de lo esperado?- No. Nosotros esperábamos cercano al 6,0%, con lo cual se confirmaron nuestras expectativas. Creo que no sorprendió a nadie, estaba bastante en línea con lo que planteó la mayoría del consenso de los analistas económicos.- Por otro lado, ¿qué análisis hace de las medidas presentadas el martes por el presidente Luis Lacalle Pou?- Son medidas razonables y adecuadas ante la situación. No me creo con la autoridad para decir si son suficientes o no. Fue una evaluación que tuvo en cuenta los costos y beneficios asociados a la decisión.“No hay un patrón claro todavía para el crecimiento post rebote inicial”