Alejandro Sánchez: “El gobierno ha sido muy tacaño” en las medidas para paliar la pandemia

Comisión de Seguimiento de covid-19 > se reunirá con el GACH el próximo martes 20

En diálogo con CRÓNICAS, el senador frenteamplista (FA), Alejandro Sánchez, explicó por qué su fuerza política no acompañó -en su totalidad- el impuesto covid-19 a funcionarios públicos: “Toda carga impositiva tiene que estar asociada a la capacidad contributiva de las personas”, indicó y aseveró que de lo contrario se está violando el principio de igualdad”. Además, el legislador afirmó que “el gobierno ha sido muy tacaño” al no invertir un 0,5% del PIB para evitar que 100.000 personas cayeran en la pobreza.

– ¿Por qué el FA no votó el impuesto covid-19 para los funcionarios públicos, a excepción del artículo 3 numeral 4, que establece que los cargos políticos y de particular confianza sí son sujetos pasivos del impuesto?

– Primero, nosotros presentamos un artículo sustitutivo, el artículo 1, en donde lo que hacíamos era generar el impuesto para los salarios mayores de $120.000 tanto para públicos como para privados. Ese sustitutivo, por una cuestión del reglamento de la Cámara, al votarse solo con mayoría el artículo tal cual vino del Poder Ejecutivo no se puso en consideración. Esa es la razón.

Nosotros entendemos que es bastante desprolijo desde un punto de vista tributario romper la igualdad horizontal de los tributos (más allá de que este fuera un tributo particular, especial, por dos meses). A nosotros nos parece que toda carga impositiva tiene que estar asociada a la capacidad contributiva de las personas; de lo contrario, se estaría violando un principio muy importante que es el de la igualdad.

El martes se instaló la Comisión Especial de Seguimiento del Covid-19. ¿Cómo fue la primera sesión? ¿Cree que será útil tener esta herramienta?

– Es necesario tomar medidas -que algunas pasan por compensaciones económicas, otras por medidas administrativas- y para llevarlas adelante se requiere un diálogo político y social que permita construir acuerdos y soluciones. A nuestro juicio, el gobierno las viene tomando tarde, y en los temas de salud, siempre es importante tomar las medidas a tiempo.

Entonces, para nosotros es muy importante tener un espacio, una instancia para debatir, dialogar, para construir acuerdos y herramientas que permitan atender no solo la salud de la gente, sino tener una mirada global que es lo económico, lo social.

Así que para nosotros es un buen instrumento. Yo creo que en la medida en que se tome la comisión como un espacio para construir acuerdos, y los acuerdos pasan por discutir cosas concretas, va a ser útil.

La primera reunión fue una muy administrativa, donde se eligieron las autoridades de la comisión y se marcó el régimen de trabajo. Allí, establecimos que la primera reunión fuera con el Grupo Asesor Científico Honorario (GACH), que se va a concretar el martes que viene.

– Uruguay atraviesa el peor momento de la pandemia. ¿Qué ponderación hace de las medidas que ha tomado el gobierno?

– Las medidas que ha tomado el gobierno han sido a destiempo. Hay medidas para tomar, que están planteadas desde el 7 de febrero -cuando el GACH le planteó al gobierno reducir la movilidad-, y creemos que todavía no se han tomado, y será necesario tomarlas con urgencia.

– En concreto, ¿qué opinión tiene al respecto de las medidas económicas para paliar las consecuencias de la pandemia?

– Primero, que han sido bastante escasas. De hecho, las estadísticas internacionales indican que Uruguay es el que menos ha invertido.

El Instituto de Economía de la Universidad de la República el año pasado nos decía que de no generarse determinadas compensaciones económicas podría aumentar en 100.000 las personas que caerían en la pobreza. Además, estableció la simulación de que podríamos llegar a invertir 0,5% del PIB para evitar esa situación.

No se tomaron esas medidas, y hoy las estadísticas oficiales demuestran que efectivamente hay 100.000 personas más bajo la línea de pobreza. 

En ese sentido, la verdad que el gobierno ha sido muy tacaño. De hecho, el último dato de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) es que las medidas económicas que han invertido los gobiernos para detener la pobreza (no ya la inversión del covid-19), Uruguay sigue siendo el último de la tabla. En definitiva, Brasil ha puesto más recursos para evitar la caída de los ciudadanos en la pobreza de lo que ha hecho Uruguay; que Bolsonaro tenga más corazón que nosotros nos deja en una situación muy incómoda.


Con saña

¿Le dolió que el presidente haya dicho (en declaraciones al medio argentino La Nación) que no sabe qué o quién es el Frente Amplio?

– Por supuesto. No solo me dolió sino que rompe con una tradición del sistema político uruguayo. Creo que eso es lo más grave. Que el presidente de la República utilice un medio extranjero para hablar de un partido político desde un lugar de tanta soberbia me parece que rompe con una tradición política. Que el presidente, que es el primero de los uruguayos, que es quien tiene la responsabilidad de conducir el país porque así lo decidió el pueblo, dedique ese tipo de expresiones hacia un partido, que es el partido de oposición, que es el que tiene más votos en el Uruguay en términos partidarios, me parece que habla muy mal de él y muy mal del Uruguay. Es como seguir cavando fosas para agrandar una grieta que me parece que en el momento que vive el país, además, no debería ser la actitud de un estadista.