A pesar de la presión del presidente estadounidense Donald Trump para que la Reserva Federal (Fed) bajara las tasas de interés, el banco central mantuvo su postura y determinó dejarlas inalteradas en el rango del 4,25% al 4,5%, tal como esperaba el mercado. De todos modos, los responsables monetarios señalaron que los costos de endeudamiento aún caerían este año, pese a que ven un ritmo de bajas más lento, por previsiones de una inflación más alta por los nuevos aranceles de importación del gobierno de Donald Trump.
La Fed cumplió con las expectativas de los mercados y mantuvo sin cambios las tasas de interés en el rango del 4,25% al 4,50% por cuarta reunión consecutiva, debido a la preocupación por un posible repunte inflacionario.
En los últimos meses, el banco central había advertido por el riesgo de estanflación (estancamiento económico e inflación) y un aumento del desempleo, como consecuencia de la política arancelaria de Trump. Con los aranceles aún en el aire, las consecuencias no se han sentido, pero la Fed ya elevó las expectativas de inflación para los próximos tres años por encima de lo previsto en la reunión de marzo.
Las previsiones económicas de la Fed fueron peores de lo anticipado. Las expectativas de inflación aumentaron tres décimas este año respecto a los cálculos de marzo, hasta el 3%; dos décimas en 2026, hasta el 2,4%; y una décima en 2027, hasta el 2,1%. Por su parte, la perspectiva para el desempleo se incrementó una décima este año, al 4,4%; dos en 2026 y una en 2027. Por último, el crecimiento previsto para la economía estadounidense bajó tres décimas para este año, al 1,4%, y dos para 2026, al 1,6%.
No obstante, el presidente de la Fed, Jerome Powell, alertó que “hacer previsiones del PIB en el momento actual es muy complejo” dada la elevada incertidumbre. “Mientras que la economía se muestre sólida y la inflación siga bajando, estamos bien donde estamos”, comentó Powell en la rueda de prensa posterior a la reunión.
Otra clave del encuentro estaba en el llamado “dot plot”, en el que los miembros de la Fed hacen sus predicciones sobre los futuros movimientos de tasas. En esta oportunidad, el consenso mayoritario apunta a que en 2025 habrá dos recortes en las tasas de interés, mientras que en 2026 solo habría uno. Aun así, casi la mitad de los miembros de la Fed abogan por no bajar más los tipos este año o solo bajarlos una vez, una señal de que los dos recortes para este año no están aún garantizados del todo.
De todas formas, Powell le quitó trascendencia al dot plot actual, al reconocer que la enorme incertidumbre con la que tienen que lidiar en este momento hace que “nadie tenga ahora mucha convicción en estas previsiones para el futuro de las tasas”. “Las decisiones dependerán de cómo evolucionen los datos”, enfatizó.
Por el momento, los inversores creen que la hoja de ruta de la Fed pasará por aplicar un recorte de tipos de 25 puntos básicos en setiembre. Según la herramienta FedWatch, la probabilidad de que el banco central norteamericano aplique un abaratamiento del dinero de esas características es del 59%. Las probabilidades de que esto suceda en julio son tan solo del 14,5%.
“Demasiado Tarde” Powell
La decisión de la Fed choca directamente con la intención de Trump que insta a la Fed a realizar un recorte brusco de la tasa de interés de 2,5 puntos porcentuales, hasta el 1,75%-2%.
“He sido muy simpático con ‘Demasiado Tarde’ Powell. Le dije, ‘Vamos a cenar, Demasiado Tarde’. He sido simpático, he sido antipático, pero le da igual. Es un tipo muy estúpido”, afirmó Trump respecto al presidente de la Fed.
Consultado respecto a los insultos que recibe constantemente desde la Casa Blanca, Powell le bajó el perfil. “Desde mi punto de vista, es muy sencillo: la gente quiere ver una economía fuerte, con un mercado laboral fuerte y una economía fuerte. Creo que estamos ahí en este momento. La economía ha sido resistente y en parte es por nuestro posicionamiento, y creo que estamos en un buen punto. Eso es lo que nos importa. Es más, eso es lo único que nos importa”, explicó.