Vaillant: “Uruguay debería orientarse a ampliar la agenda de países en el este y el sudeste asiático”

Marcel Vaillant, profesor de Comercio Internacional de la Universidad de la República

Ante el anuncio de las negociaciones entre Uruguay y Turquía para un posible Tratado de Libre Comercio (TLC), el doctor en Economía y especialista en comercio exterior conversó con CRÓNICAS sobre la relación comercial con ese país y otras posibilidades de apertura de mercados. Lo que está haciendo Uruguay, desde su punto de vista, “es tratar de consolidar y generar hechos concretos que cristalicen su posición de autonomía”.

En diciembre del 2021 el gobierno anunció que en marzo de este año se lanzarán las negociaciones para un eventual TLC con Turquía.

En referencia a la relación comercial que Uruguay tiene con ese país en la actualidad, Vaillant planteó que, si bien no tiene datos exactos, las exportaciones estarían en “unos US$ 200-300 millones al año en productos como soja y celulosa, que no tienen aranceles muy altos”.

Sin embargo, afirmó que “el comercio potencial que se puede tener una vez que cambian los aranceles es totalmente distinto, y el análisis sobre el comercio potencial nunca se hace, porque es el comercio que no observamos, dado que es exógeno a la política comercial presente”. “Si la política comercial cambia, el comercio va a cambiar”, expresó.

Por otra parte, el experto señaló que Turquía es un mercado de gran tamaño y cumple un rol importante en ciertas cadenas globales de valor que articulan los países asiáticos con la Unión Europea.

Agregó que “cualquier acuerdo comercial de Uruguay con un país grande enfrenta el tema de que sus manufacturas, fuera de las de base agropecuaria, tienen una escala productiva que es muy poco competitiva”. Significa que “grandes mercados con grandes escalas y manufacturas seguramente sean más competitivos”.

En referencia al Mercosur y a la posición de apertura de este país, Vaillant sostuvo: “Creo que lo que está haciendo Uruguay es tratar de consolidar y generar hechos concretos que cristalicen su posición de autonomía”.

De acuerdo con el analista, mientras que Argentina se ha mostrado muy contrario a la apertura uruguaya, Brasil ha sido más tolerante en términos de entender la necesidad global de lograr un mayor acceso a mercados.

A su vez, consideró que “el anuncio de la negociación con Turquía se inscribe en esa dirección, en el sentido de que Uruguay va a seguir abriendo la canasta de potenciales socios y este será uno más”.

Para el economista, la república tiene que valorar dónde asignar esos recursos políticos y de negociación con terceros. “Creo que eso ha sido mencionado insistentemente por distintos voceros, incluso por alguno de los partidos políticos de la coalición de gobierno, opinión a la que yo suscribo, de que Uruguay debería también orientarse a ampliar la agenda de países en el este y el sudeste asiático”, cerró.


Una oportunidad comercial atractiva para Uruguay

En un informe presentado en la 9ª Jornada Académica de la Unión de Exportadores del Uruguay, bajo la autoría de Germán Diverio y Susana Mangana, se propone un estudio minucioso de Turquía por sus características macroeconómicas y de mercado que podrían ser una posibilidad comercial interesante para Uruguay.

“Las oportunidades para Uruguay se encuentran en productos agrícolas, lácteos, animales vivos, químicos, tecnología ganadera (incluyendo medicamentos) y carne”, afirma el estudio.

Del mismo se desprende que Turquía es un gran importador de soja, sémola y otros extractos de almidón, además de otros productos agrícolas como el arroz (un producto básico para la gastronomía turca) y los cítricos. Los lácteos reflejan otra exportación importante que Uruguay podría hacer, ya que, a pesar de que Turquía es productora, tiene una alta demanda de los productos y una baja productividad, sumado a los altos costos técnicos.

En tanto, el documento expresa que los animales vivos han marcado una fuerte presencia en las exportaciones uruguayas a Turquía, a pesar del descontento generalizado por parte de la industria frigorífica por ese tipo de exportación. En los mercados musulmanes el principal requisito radica en la certificación Halal (que cumple con la Ley Islámica para ser consumido), por lo tanto, existe un mercado potencial dispuesto a pagar mejores precios por carne que cuente con esta característica.

Otros posibles mercados mencionados en el estudio son: el químico (considerando que Uruguay tiene productos altamente competitivos en el área químico-industrial y Turquía los utiliza para la producción agrícola) y el de la tecnología ganadera (debido a que el país de Medio Oriente carece de tecnologías que aumenten la productividad ganadera, y Uruguay posee tecnologías que lo posicionan como uno de los países más productivos en este rubro).