Confianza del consumidor muestra gran volatilidad y volvió a la zona de “moderado pesimismo”

Recuperación > registros son MEJORES que en 2016 pero sin llegar a zona de optimismo

Foto: Pixabay

Luego de registrar un importante salto en abril y alcanzar la zona de “moderado optimismo”, la confianza del consumidor uruguayo volvió a caer en mayo debido al deterioro de los tres subíndices que lo componen, y regresó a la zona de “moderado pesimismo”. Debido al deterioro del mercado laboral y la pérdida de puestos de trabajo, se elevaron las expectativas de desempleo y se ubican en la zona de “importante pesimismo”.

El Índice de Confianza del Consumidor (ICC) que elabora la Cátedra Sura de Confianza Económica de la Universidad Católica y Equipos Consultores, corrigió en mayo el salto que había registrado el mes anterior, y volvió a caer debajo de la línea neutral, reingresando en la zona de “moderado pesimismo” en la que permaneció casi dos años de forma consecutiva. El informe publicado, destaca que “en un marco de mayor volatilidad de las expectativas en los últimos tres meses” el ICC se contrajo en 4,2 puntos, es decir un 8,2% menos que en abril, revirtiendo parcialmente el crecimiento de 6,2 puntos que se había registrado en el cuarto mes del año. Asimismo, se destaca que marzo también había sido un mes de importante caída, por lo que exceptuando ese mes, el ICC de mayo es el más bajo desde agosto, cuando recién se iniciaba el proceso de de recuperación de las expectativas.

“En síntesis, tras meses de marcada volatilidad en las mediciones de confianza, se puede apreciar que el ICC continúa mostrando registros más optimistas que los de mayo de 2016, pero sin lograr sostener un ritmo de crecimiento que lo ubique en zona de optimismo, sino que apenas logra ubicarse en valores comparables a los de mayo de 2015, cuando el ICC ya estaba comenzando a mostrar un deterioro de la confianza”, detalla el informe publicado.

La menor confianza de abril se explica por la caída de los tres subíndices que conforman el ICC: la percepción sobre la situación económica personal, la percepción sobre la situación económica del país, y fundamentalmente por la menor predisposición a la compra de bienes durables. Este último subíndice cayó 7,5 puntos, luego de haber crecido en 10,2 puntos el mes anterior.

Peores expectativas de desempleo

Al analizar “otros indicadores” de confianza económica, la Catedra Sura de Confianza Económica tiene un apartado especial para las Expectativas de desempleo de los consumidores, que en mayo alcanzaron un valor de 66,2 puntos, que la ubican en zona de importante pesimismo. Sin embargo, ello implica una caída de 5,7 puntos (un 7,9% menos) respecto a mayo de 2016, mes en que alcanzó el máximo valor de los 10 años en los que se releva el indicador.  “En línea con el repunte de confianza económica que registraban los diferentes indicadores, las expectativas de desempleo mejoraron durante el segundo semestre del año pasado, hasta llegar en noviembre a un valor de 54,4 (“moderado pesimismo”). Desde entonces -salvando el repunte generalizado de abril- el índice muestra una evolución al alza”, describe el informe.

En ese sentido, si bien en mayo el consumidor es menos pesimista que hace un año, igualmente ostenta un “muy elevado nivel de pesimismo, que se presenta creciente”.

Cabe destacar que el repunte del pesimismo sobre el mercado laboral se corresponde con los últimos datos de desempleo,  que en marzo alcanzó el 9% su mayor nivel en desde setiembre de 2007. Este aumento es consecuencia de una caída de la tasa de empleo, eso es: pérdida de puestos de trabajo.

En otro orden, otro indicador que mostró mayor pesimismo fue Capacidad de ahorro de las familias, cuyo índice de percepción cae 13,8 puntos, registrando el mínimo valor de la serie en los casi 10 años de relevamiento. Cabe señalar que es el único de los “Otros indicadores” que se encuentra peor que el año pasado, ya sea que se considere el dato puntual del mes o el promedio de lo que va del año. Esta percepción estaría vinculada a la de peor Situación económica personal actual respecto a un año atrás (que cayó 5,5 puntos respecto a abril).

Por otra parte, las Expectativas de inflación y de Ingreso de la familia para los próximos doce meses muestran también un deterioro en el mes (4,3 y -2,4 puntos, respectivamente), pero el informe explica que ese comportamiento podría tratarse básicamente de una moderación de la mejoría del mes precedente.

El único de los “Otros indicadores” que mostró mayor optimismo fue la Preferencia por la moneda nacional para depositar que continúa recuperándose (4,3 puntos respecto a abril), en línea con un tipo de cambio que permanece en la franja de los $ 28 pesos.