Charles Carrera, senador del Frente Amplio (FA)
A un año y medio de las próximas elecciones internas, Carrera opinó que “no hay que tener miedo ni hacer dramatismo” por la disputa electoral que se está dando dentro del FA. Además, criticó duramente los recientes planes del gobierno en materia de seguridad y profundizó sobre las acusaciones en su contra. “Sebastián da Silva es una persona muy violenta; es como Romina Celeste versión masculina”, le respondió al senador nacionalista.
El menú En la cava de Panini’s, el parlamentario degustó burrata capresse como entrada, y de plato principal optó por salmón grillé en salsa holandesa al limón, y espárragos, con mousse de arvejas y remolacha rellena de queso azul. Acompañó el menú con agua mineral. Para extender la sobremesa, eligió café doble.
Por Magdalena Raffo | @MaleRaffo
-El reconocimiento a Lula en la Intendencia de Montevideo fue cuestionado por Orsi. ¿Qué opina de la forma en la que se manejaron las cosas?
-No es que haya sido cuestionado por Yamandú, se lo sacó de contexto. Todos los frenteamplistas tenemos un gran cariño y respeto por Lula, por su trayectoria, por su símbolo de lucha. Yo estuve allí y fue algo que salió espontáneamente. Yo represento a mi sector en los espacios de conducción del FA, y el lunes existía la posibilidad, pero no se discutió, se dio un acto de masas espontáneo, y me encanta que el pueblo frenteamplista le haya podido hacer ese reconocimiento a Lula. Para Uruguay fue extraordinario porque se nos abre una oportunidad histórica para profundizar los procesos de integración regional con el liderazgo de Brasil, que es la principal economía del continente.
-¿En qué sentido cree que este cambio de gobierno en Brasil va a incidir en el Mercosur y en las relaciones regionales?
-Va a incidir para mejor. Quizás haya que ver cómo podemos avanzar como Mercosur el Tratado de Libre Comercio (TLC) con China, porque a China le interesa el Mercosur. Pero es como dijo Lula, hay que tratar de cerrar el TLC con la Unión Europea, que tiene algunas dificultades y trabas que salían de la falta de liderazgo de Brasil por los problemas con los temas medioambientales, que no respetaba los compromisos asumidos.
Hoy Brasil es el segundo mercado al que va el trabajo de los uruguayos. China es el primero, está bien, pero ahí va mucha materia prima. A Brasil, al Mercosur, va el trabajo de los uruguayos, donde hay algún proceso de industrialización, de nuestros empresarios y trabajadores, entonces, eso hay que defenderlo mucho. La CIU está pidiendo que veamos que en el Mercosur hay alguna cláusula que dice que se puede comerciar entre monedas para tratar de salvar la diferencia o el impacto negativo que puede generar el dólar, por ejemplo, con Argentina.
-¿Cómo ve este reclamo de la CIU?
-Hay que trabajarlo, hay que tratar de levantar todas las trabas burocráticas que se pueda, porque es trabajo para nuestra gente, es desarrollo, crecimiento de la economía. Entonces, yo lo que veo es que se nos abre una perspectiva. Y no podemos tener líos con los vecinos.
–“Romper con el Mercosur no sería ninguna catástrofe”, dijo la semana pasada el senador nacionalista Sebastián da Silva entrevistado por CRÓNICAS. ¿Qué opina al respecto?
-Eso te muestra su total desconocimiento y, como es un productor, quizás tiene intereses allí y por eso tiene esa visión. Pero si vos hablás con la gente de la CIU, está muy preocupada, en el sentido de asegurar los lazos. Muchas veces lo que le vendemos a San Pablo, por ejemplo, es mucho más importante para nosotros por el trabajo que genera, que lo que les vendemos a otros mercados.
Lo que demuestra Da Silva es que está mirando desde la lógica de su interés, y cuando uno está en política y es un servidor público, lo que tiene que mirar es el interés general. Y tenemos que tener en cuenta el interés de nuestros productores, porque el Uruguay es un país agroindustrial y hay que implementar medidas de protección en un momento en el que están viviendo un drama como la sequía, que va a afectar la economía nacional. Por eso el FA ha elaborado una serie de medidas que las ha remitido a las diferentes asociaciones y a Presidencia. Pero hay que tener una mirada general y saber que el Mercosur es muy relevante. Hoy Brasil es más importante que la Unión Europea, y después viene Argentina, y eso lo podés destrabar quizás con esto que están proponiendo los propios interesados, que cada uno de los países pueda comerciar en las monedas locales.
Además, son nuestros vecinos. Nuestra gente que vive en la frontera con Argentina o con Brasil tiene una realidad de hermandad, pero también tiene muchos problemas porque no se ponen de acuerdo los gobiernos o porque tienen mala relación, y terminan afectando a nuestros habitantes que viven en Paysandú, en Río Negro, en Salto. Aparte, por la diferencia cambiaria están desesperados por medidas concretas.
-Sobre esto, hay diversos proyectos de ley a estudio en el Parlamento, pero el sistema político no se ha podido poner de acuerdo. ¿Por qué?
-Nosotros estamos de acuerdo y estamos estudiando cómo asegurar que haya una tarjeta vecinal para las fronteras que te dé una especie de beneficio, un sistema de precios cuidados. Tiene que haber algún incentivo para que la gente compre del lado uruguayo y no tenga que cruzar, porque hay una tensión entre el comercio y los vecinos, que quieren maximizar la plata, pero también está el problema del comercio, donde hay más desempleo. Tenés que tener una política diferencial, establecer subsidios, devolución de impuestos, no hay que tenerle temor a eso. La voluntad política del FA está, el tema es que no se ponen de acuerdo en la coalición gobernante.
-Días atrás, Bergara dijo en Twitter que ve con “preocupación” ciertas situaciones “que parecen adelantar la contienda electoral de las precandidaturas frentistas”. ¿Qué reflexión le merece?
-El instrumento de cambio en Uruguay es el FA y nuestra clave es la unidad. El FA está muchísimo más fortalecido que en 2019, hoy tiene conducción, sus organismos funcionan, hay debate interno, movilización, trabajo y construcción. Acá hay dos candidatos que están cantados que son Carolina y Yamandú, y hay una contienda y no hay que tenerle temor. Lo que hay que cuidar es la herramienta, porque nosotros somos fuertes y unidos, y eso es el MPP y Yamandú, y apuestan a eso, al fortalecimiento del FA. No hay que tener miedo ni hacer dramatismo.
-¿El hecho de que no se hayan puesto de acuerdo para presidir el Congreso de Intendentes no es llamativo?
-No es que no se hayan puesto de acuerdo. En el acierto o en el error, se llegó a un acuerdo y se respetó, en el que participaron nuestro presidente, Fernando Pereira, y los involucrados.
-Muchos analizaron que ninguno de los dos quiso ceder.
-No. Yamandú no es así. Yamandú estableció que daba lugar para que asumiera Carolina.
-¿Y por qué no fue así?
-La verdad es que no estuve en la discusión de ese acuerdo, pero fue así. Sobre lo que me preguntabas del tweet de Mario, yo creo que los frenteamplistas que tenemos hoy el rol de dirigentes de la fuerza política, lo que tenemos que hacer es no entrar en esas discusiones internas que no nos favorecen.
Hace poco nos enteramos de dos noticias embromadas, una es que nuestro ahora exministro de Ambiente se adjudicaba un título intencionalmente, decía que era licenciado en Administración y resulta que no lo era, mintió. La otra es que una empresa marítima le vende servicios de ambulancia a ASSE y no está habilitada, y todos los pagos fueron observados. Entonces, creo que tenemos que estar hablando de esos temas, de la corrupción del gobierno.
-¿Coincide entonces con las declaraciones de Bergara en un reciente acto del FA, donde señaló “corrupción” en este gobierno?
-Muchas veces las acciones de este gobierno están defendiendo intereses de privados o de grupos de interés. El cambio del decreto de tabaco era para favorecer a Montepaz, el acuerdo del puerto era para favorecer a un privado. Ni hablar del caso Astesiano o el caso Marset, donde el gobierno sabía que era un narco peligroso, pero no pasó nada con las principales autoridades de los ministerios involucrados. Únicamente renunció la vicecanciller porque Ciudadanos le pidió el cargo, pero no puede existir tanta omisión.
-¿Cómo vio la renuncia de Peña?
-Me parece que todas las idas y vueltas que ha dado no hacen otra cosa que aumentar la desconfianza hacia él. No resulta creíble que no tuviera conocimiento ni siquiera de la carrera que estaba cursando y si le faltaban o no materias para recibirse. Tampoco resulta demasiado ética la actitud que tuvo con el caso Sendic, que obviamente fue repudiable, pero que claramente no tenía la autoridad moral como para venir a comentar las actitudes de otros. Lo mínimo que esperábamos desde el FA era que diera un paso al costado.
-Con respecto al tema anterior, el número tres de Interior, Nicolás Martinelli, afirmó a CRÓNICAS que “la organización que reclutó a Astesiano operó con total impunidad durante los dos últimos gobiernos del FA y esta gestión logró desbaratarla”.
-Especialistas, investigadores, te dicen que en el manejo de pasaportes falsos existía alguna organización que operaba desde la década del 90 en Uruguay. Yo no sé si reclutaron a Astesiano o él reclutó a alguien, pero hay varias dimensiones, los pasaportes, los casos de corrupción pública en el manejo de compras y relacionamiento entre el Estado y privados, y lo otro que se está investigando es el espionaje del que fuimos víctimas Mario (Bergara) y yo.
-¿Cómo ve a Orsi hacia las elecciones?
-Muy bien. Ha demostrado su capacidad de diálogo y eso es fundamental, ya que en el Uruguay que se viene hay que lograr consensos porque hay que hacer transformaciones muy importantes. Tenemos que asegurar una vida digna a nuestros habitantes, un compromiso de que no puede haber pobreza infantil.
Hay un sector del sistema político que trata de fomentar la violencia, la grieta, dividirnos, pero el Uruguay es un país tan pequeño que no soporta las grietas. Tenemos que defender la convivencia democrática. No toda la derecha es antidemocrática, pero hay algunos que sí.
-¿Por ejemplo?
-Los que fomentan las noticias falsas son profundamente antidemocráticos.
-¿Quiénes?
-La senadora Bianchi, el senador Da Silva, con su accionar violento, y hay otros, los que están poniendo en cuestionamiento las instituciones democráticas. Estar constantemente criticando a la fiscalía, al sistema de justicia, es ser antidemocrático. Entonces, lo que tenemos que defender desde el FA es el pluralismo, el diálogo.
-Usted fue muy criticado por el caso de público conocimiento del Hospital Policial, sobre lo cual Da Silva dijo a CRÓNICAS: “Charles Carrera es todo lo que está mal. Es alguien que hizo un abuso de poder siendo jerarca y es un atrevido para con familias vulnerables que dice defender. Las grabaciones son elocuentes. Alguien que habla con ese nivel de desprecio a una familia que ha padecido esa desgracia, para mí lo descalifica”. ¿Qué contesta?
-No fue ningún abuso de poder, lo que se hizo en aquel momento fue una definición de gobierno donde el Estado tenía que responder a situaciones de mal desempeño policial. El encargado de la comisaría, el que tenía que proteger al pueblo, estaba en una fiesta y de allí salió un disparo que impactó a un vecino. Uno cuando está en el gobierno se tiene que hacer responsable.
La grabación fue utilizada el año pasado, pero estaba en poder del Ministerio del Interior desde el 2016, cuando esta familia inició un juicio en su contra, que ahora está en segunda instancia.
Después, con el espionaje del que fuimos víctimas Mario y yo, me empezaron a cerrar cosas. Acá se buscó información para apretarme, para callarme, para que no cumpliera con la obligación que tengo como oposición, de contralor, se utilizó para deslegitimarme.
Tengo tranquilidad de que se actuó bien y conforme a las herramientas que se tenían. Se tomaron definiciones que fueron públicas, para tratar de reparar la situación de esta persona de alguna manera, y resulta que 11 años después surge esto, cuando yo ya hace cinco años que me fui del Ministerio. El único objetivo fue amedrentar a un senador de la oposición.
-¿En qué está la investigación del hecho?
-El expediente sigue abierto. Se está investigando. Lamentablemente no se pudo llegar a la verdad material porque existió encubrimiento, no se respetó la ley de procedimiento policial y el arma no apareció, y la bala sigue en el cuerpo de la víctima.
-Y los comentarios de Da Silva…
-Las afirmaciones de Da Silva no me ofenden, es una persona muy violenta. Me llama la atención que alguien que ostenta un cargo público de tanta relevancia como es ser senador, tenga esa actitud tan violenta en diferentes ámbitos, en el Senado, en las comisiones, en las redes sociales. Es como Romina Celeste versión masculina. En política no puede existir esa violencia. No se da cuenta del rol que tiene que cumplir. Uno cuando es gobierno tiene que tener capacidad de dialogar. Él quiere representar y defender los intereses de un sector importantísimo para el país como es el agro, pero con esas actitudes, aleja a la oposición. Es un problema que está teniendo el PN. Un senador que tiene capacidad de diálogo real con la oposición es Gustavo Penadés, que yo le tengo mucho respeto, pero si él no está, el Parlamento no funciona.
-¿Por qué le pidió a la víctima que no hablara públicamente del caso?
-Se convocó a la familia fue porque estaban teniendo problemas de convivencia hacia la interna del hospital, eran personas que demandaban mucho y por eso se llamó a la mamá, y apareció el hermano. Se buscaba que bajaran el perfil para que existiera una protección, porque ellos en definitiva son denunciantes de un mal accionar policial y estaban siendo atendidos en un lugar donde se atienden muchos funcionarios policiales. Pero los civiles se pueden atender en Sanidad Policial con una autorización especial, que fue la que se le otorgó a él. Eso se hizo acorde a derecho. Era imposible que el director general del Ministerio tuviera una persona internada en Sanidad Policial escondida. Además, el hospital no estaba bajo mi jerarquía.
“Heber es como un boxeador en el ring que está mareado y la realidad le está pegando muy fuerte”
-¿Qué opina de la propuesta de Heber que involucraría a exreclusos?
-Es una propuesta totalmente trasnochada. Todavía no hay nada, el BID aún no aprobó el préstamo. Creo que Heber no entiende mucho lo que planteó. Fue un escape para no hablar del aumento de los homicidios. No se puede estar negociando con narcos o sicarios. Yo no veo realmente que un “interruptor” vaya a negociar al Cerro Norte con el Betito Suárez o el Ricardito, pero además no estoy de acuerdo. ¿Qué van a pedir ellos, que bajen la presencia policial a cambio de que no haya más homicidios? ¿Se va a dejar una zona liberada para el narcotráfico? En estos programas terminás transando, y en las experiencias que ha habido en Latinoamérica, las evaluaciones han sido malas. Estamos teniendo un problema muy grave y Heber es como un boxeador en la mitad del ring que está mareado, la realidad le está pegando muy fuerte y no está dando respuestas.