Peña: “El FA está en proceso de decaimiento pero a la oposición le cuesta ser alternativa”

EN PANINI’S

Foto: Pablo Malletti

Adrián Peña, diputado por Canelones y secretario general del Partido Colorado


Gran parte de la oposición coincide en que el 2018 es un año clave para hacer acuerdos programáticos de cara al 2019 en temas como educación y seguridad. El secretario general del Partido Colorado (PC), Adrián Peña, desde su lugar también impulsa esta propuesta, aunque admite que los partidos opositores no logran ser vistos por los uruguayos como “una alternativa concreta y real al Frente Amplio (FA)”. En entrevista con CRÓNICAS, el diputado perteneciente a Vamos Uruguay habló acerca de la incertidumbre del futuro del sector, que “probablemente” desaparezca o se fusione con otro. Se refirió también a la salida de Pedro Bordaberry, gracias a la cual ya hay cuatro posibles candidaturas.


 El menú  El diputado degustó tartar de atún, y de segundo plato optó por tortellini de cordero y salteado mediterráneo, menú que acompañó con agua con gas. Para extender la sobremesa, eligió café.


Por Magdalena Raffo | @MaleRaffo

-Se fue el 2017, un año complicado para el PC, que arrancó con el episodio del Cambio Nelson, y más adelante se vio sacudido por el anuncio de Pedro Bordaberry de que dejaba la política. Enseguida vino la renuncia de Germán Cardoso a la Secretaría General, y le tocó a usted asumir ese rol. ¿Qué evaluación hace de estos hechos?

-Fue un año complicado el 2017 como bien decís, parecía que habíamos entrado en un espiral donde todos los días había una noticia negativa. La situación de [Francisco] Sanabria [propietario del Cambio Nelson] fue compleja, nos puso en la mira de la atención pública, pero creo que el partido la resolvió bien.

El 2017 fue un año signado por temas vinculados con la ética, pero los otros dos casos, el de Sendic y el de Bascou, tienen que ver con dineros públicos, mientras que lo de Sanabria hasta ahora es de la actividad privada. Como él ocupaba un cargo importante en el partido –era secretario general de Maldonado y diputado suplente-, entendimos que era grave, pero actuamos rápido, le dimos las garantías del debido proceso para que se pudiera defender y tomamos una decisión que, a la luz de todos los procesos que se han dado en los diferentes partidos políticos, fue una salida buena.

Luego, la renuncia de Pedro fue un golpe muy fuerte. Además de ser el candidato en las últimas dos elecciones, era el líder del PC, y asumir [la Secretaría General] en ese momento fue un desafío porque el partido estaba sin su candidato más fuerte y había que recomponer las cosas.

-¿Qué análisis hace hoy, tras seis meses de haber asumido esa responsabilidad?

-Los objetivos que nos planteamos para el primer semestre los cumplimos. El partido comenzó a tener actividad orgánica, que la había perdido, y su Comité Ejecutivo Nacional (CEN) empezó a sesionar regularmente. Tuvimos una actividad muy intensa, con eventos sobre diferentes temas, coloquios, y una movida muy interesante que fue la elección juvenil. Cuando asumí, la mayoría me decía que no la hiciera, pero vi que había mucho empuje en los jóvenes y que era fundamental encararla, porque un partido con las dificultades que tiene el nuestro no va a cambiar las cosas desde la inacción.

-¿Esta “actividad intensa” que organizó el PC se hizo a raíz de la ida de Bordaberry?

-Nosotros reaccionamos tratando de organizar cosas desde el PC. Pedro no solo lideraba sino que le marcó el ritmo al partido durante mucho tiempo basado en el trabajo, en la constancia. Con su retiro había que encarar actividades y poner determinada dinámica, entonces lo encaramos en conjunto. Todos los sectores que están en el CEN acompañan esta gestión porque advirtieron que había que trabajar en clave de unidad.

adrian-pena2
Foto: Pablo Malletti

-“La ida de Pedro, que en su momento fue una mala noticia, se está volviendo una oportunidad para el PC”, aseguró José Amorín a CRÓNICAS, y explicó que su partida permitió el surgimiento de varios posibles candidatos. ¿Cómo lo ve usted?

-Pedro se fue, entre otras razones, porque creía que se había agotado su tiempo como candidato y que su retiro facilitaría la aparición de nuevos líderes o postulantes. En ese momento muchos tuvimos cierto escepticismo sobre que eso efectivamente pasara. Sin embargo, a la luz de los hechos, quizás eso se vaya dando.

Hoy el partido se prepara para tener una grilla interesante de candidatos. José Amorín anunció que lo va a ser, Fernando [Amado] ya hizo su lanzamiento, seguramente Tabaré Viera lo será, y está la posibilidad de que ingrese [Ernesto] Talvi en la política. De la nada resulta que tenemos cuatro candidatos con perfiles diferentes y complementarios, así que si esto se concretara, aquel estímulo que tuvo Pedro para tomar la decisión, se convertiría en algo positivo para el PC.

-¿Cómo cree que puede afectar al PC la decisión de Bordaberry de dejar la política una vez culminado el período?

-Lo ideal sería que estuvieran todos, que también estuviera él, pero son decisiones personales y el partido tiene que reformularse. Es un partido con 181 años… Esta elección juvenil demostró que hay un semillero interesante de cara a los próximos 10-15 años, hay gurises con formación, con capacidad, comprometidos, porque hoy nadie viene al PC buscando un cargo público como cuando era el partido de gobierno, sino porque cree en sus principios y valores; yo creo que esa generación está llamada a dar una pelea diferente.

-¿El PC ha superado la partida de Bordaberry?

-Está en ese proceso. Hoy estamos en una fase de reconversión, con más fuerza en lo institucional, en lo orgánico, y de reformulación, donde aparecen nuevos sectores y candidatos.

-No todos son tan optimistas. Una de las fundadoras de Batllistas Orejanos, Patricia Soria, dijo en entrevista con CRÓNICAS que “el PC no va a ser gobierno porque no hay nadie popular y que arrastre masas”. ¿Está a tiempo el partido de generar un candidato con ese perfil?

“El Partido Colorado está en proceso de superar la partida de Bordaberry”

-Sí, claro. Esas cosas no aparecen de la noche a la mañana pero hay mucha gente con posibilidades. Yo creo que va a llegar el momento en el que el partido va a sintonizar con la gente, no sé si es a través de un candidato o de ciertas transformaciones, es parte del desafío para la próxima elección.

-¿Qué tiene que pasar para eso? ¿En qué están errando?

-El partido por mucho tiempo no sintonizó con la ciudadanía, no comunicó bien y hay determinados daños que se producen que cuesta tiempo revertir. Ahora lo que hay que hacer es ajustar nuestra propuesta a ese electorado que está desencantado y que puede ver en el PC una alternativa.

-¿Desencantado con el gobierno?

-Muchos con el gobierno y otros con la política en general. Yo creo que hay desilusión en el sistema político, hasta la propia gente que votaba históricamente al FA ha perdido la esperanza de que las cosas se pueden cambiar, hay como una especie de resignación.

Hay gente que cree que los problemas de inseguridad van a seguir, o que en materia de educación ya se perdió el Uruguay de antes y no se va a recuperar. Hay que volver a ilusionar y generar las propuestas que hagan creer que el país puede volver a ser lo que en algún momento fue. Es mentira que no se puede cambiar la situación de la inseguridad o de la educación, es cuestión de tomar las decisiones acertadas y tener la actitud para encararlo.

adrian-pena3
Foto: Pablo Malletti

El FA lo logró en su momento, ilusionó y generó mucha expectativa, por eso lo acompañó tanta gente. Algunas transformaciones se hicieron y otras están por el camino. Hoy el partido de gobierno está desgastado en eso, y ahí es donde tenemos que generar nosotros esa motivación a la gente a participar en política. Hay que lograr involucrar sobre todo al uruguayo que se siente afectado por las cosas que pasan, pero que no sale a decidir o a participar. Venimos bien porque estamos en este proceso de transformación, cambiando la imagen, generando expectativas, con mucha movida joven y con una propuesta diversa de candidatos.

-¿Y a usted quién le gustaría que fuera candidato?

-Yo lo tengo definido pero lo voy a hacer público en el correr del año. Seguro voy a estar trabajando por uno de estos candidatos.

-¿Uno de los cuatro que nombró hoy –Amorín, Viera, Amado y Talvi-?

-Seguramente sí, de esos cuatro, que son los que veo con más opciones de ser candidatos hoy; quizás aparezca alguien. La idea es comunicarlo en el correr de este año y seguir trabajando en clave de partido que es mi responsabilidad primera.

-¿Fuera de esos cuatro no ve a algún otro con posibilidades?

-No veo hoy, pero esto es muy dinámico. Gente capaz en el partido hay mucha, quizás alguien logre los apoyos.

-Germán Cardoso está recorriendo el país y él mismo ha dicho que mucha gente le pidió que sea el candidato de Vamos Uruguay (VU).

-Hoy VU no está funcionando orgánicamente y no ha definido su candidato.

-¿Le darían su apoyo?

-El sector va a tener una reunión en marzo por este tema, y ahí se sabrá si respalda esa candidatura o si alguien más quiere competir. Germán es alguien con experiencia, joven, fue tres veces legislador, perfectamente podría ser candidato.

“Bordaberry se fue porque creía que su retiro facilitaría la aparición de nuevos candidatos y resulta que ya tenemos cuatro opciones”

-¿Dentro del sector se maneja algún otro nombre?

-Hasta el momento el único que ha manifestado la intención de ser candidato es Germán.

-¿Cómo definiría la situación actual de VU?

-Es una situación compleja y de difícil definición, yo no sé exactamente cómo terminará este capítulo de la historia. VU y Pedro Bordaberry son la misma cosa, son dos caras de una misma moneda. El sector surgió con la impronta de Pedro, para respaldar su candidatura, y ante su salida del escenario político y sin tener una orgánica funcionando, creo que va a ser muy difícil que se mantenga. Puede decidir llevar un candidato o acoplarse a otro. Hay mucha gente que no se siente motivada y entiende que su existencia no tiene razón de ser.

-¿Es probable su desaparición o una fusión con otro sector?

-Es probable. Todo depende de lo que decida el propio sector si es que logra definirlo, porque no tiene una orgánica ni mecanismos de resolución de estos temas. Todavía no sé cómo lo va a resolver, pero se viene minimizando como expresión en la medida que los principales dirigentes ya no están.

-Otro de los que ya no está es Germán Coutinho, quien hasta no hace mucho era el número dos de VU y ahora se sumó al grupo de Amorín. ¿Cómo tomó su partida?

-Me habría gustado que el proceso fuera diferente, pero lo entiendo. Nosotros tuvimos un desencuentro de llamadas perdidas, él me dejó un mensaje diciendo que lo llamara cuando pudiera, yo demoré en devolverle el llamado sin creer que era algo tan importante y me enteré por la prensa. Me hubiera gustado gestionar de otro modo la salida, pero se dio así.


“No estamos sintonizando con los descontentos con el Frente Amplio”

adrian-pena4
Foto: Pablo Malletti

-En una entrevista con CRÓNICAS de junio pasado usted dijo: “El PC va a tener tres ejes programáticos fuertes, que deberán ser llevados adelante por quien gane en caso de que quiera contar con nuestro apoyo en la elección, y luego en el gobierno a través de nuestros votos en el Parlamento”. Consultado sobre si estarían dispuestos a apoyar al FA o este acuerdo electoral sería solamente con la oposición, respondió: “No podemos negarnos a nada”. Eso lo interpretamos como que no descartaban apoyar al FA, lo que en su momento generó una considerable polémica. ¿Qué fue lo que quiso decir?

-Lo que quise decir fue eso, que hay temas fundamentales que hay que solucionar, como educación, seguridad, inserción internacional, que son áreas donde Uruguay está muy trabado, además de que tiene un sector productivo muy comprometido. Hay que avanzar en esos temas y para eso hay que buscar acuerdos de amplia base. Por ejemplo, en materia de educación los cambios son lentos, y las transformaciones que este gobierno parecía que iba a realizar las ha postergado, el presidente optó por renunciar a ellas.

-¿Apoyaría propuestas como las de Talvi en esa materia?

-Sí. Lo que yo creo es que las transformaciones en educación, que son imprescindibles, van a necesitar una amplia base de apoyo político, y eso seguramente requiera del acuerdo de todos los partidos.

Yo decía también en esa nota que uno siente una afinidad natural mayor con determinados partidos, y hoy se comienza a generar un clima más propicio para que existan algunos acuerdos. Ahí hay un gran desafío. A la oposición le está costando mostrarse como alternativa. El FA está en proceso de decaimiento, no ilusiona, no enamora y no compromete a sus votantes del modo en que lo hacía.

-Pero, por lo que dice, la oposición no logra ser una opción creíble. ¿Por qué?

“Ante la salida de Bordaberry del escenario político va a ser muy difícil que Vamos Uruguay se mantenga”

-Hoy la población ve como muy difusa a la oposición y no como una alternativa concreta y real al FA, y en eso hay que trabajar. No se trata de homogeneizar a la oposición, sino que con sus matices y diferentes perfiles y propuestas concretas, hay que decirle claramente a la sociedad que hay determinadas cosas que se van a hacer si gana una opción de las que hoy están en la oposición. En eso sí habría que trabajar, en cómo se articulan y cómo se generan esos tres o cuatro ejes centrales.

-Pese a esto que afirma de que el FA desilusiona, y de hecho ha bajado en las encuestas, el PC no logra captar a esos votantes descontentos o indecisos. ¿A qué lo adjudica?

-A que no estamos sintonizando con esa gente, no estamos enviando el mensaje correcto. A la gente hay que demostrarle que hay cosas que se pueden hacer. No le podemos prometer cosas que no se van a realizar, pero hay cosas concretas en materia de educación, de seguridad, de la economía, y ese mensaje tiene que ser convincente y al unísono entre toda la oposición.