Gustavo Trelles, Country Head de Santander Uruguay
La pandemia encontró al Banco Santander muy bien parado y listo para afrontar lo que se avecinaba. La firma está abocada a llegar a cada ciudadano y ser socio fundamental de los rubros que mueven la economía y salud de todo el país. A su turno, el ejecutivo destacó la solidez del sistema financiero uruguayo, al que catalogó como uno de los más solventes del mundo.
¿Cómo vislumbra el futuro inmediato y cuáles son los desafíos que tiene el banco por delante en 2021, teniendo en cuenta el contexto por el que atraviesa el país y el mundo, como así también la desaceleración mundial de la economía?
En comparación, Uruguay hasta el momento ha sido uno de los países menos afectados por la pandemia, aunque cerrará el año con una importante caída del PIB. Es probable que la economía uruguaya tenga una recuperación más rápida que otros países, impulsada por grandes proyectos, como el de UPM2 que el año próximo estará en su plenitud, pero también favorecida por sus motores, que se mantuvieron encendidos y han permitido tener una actividad económica en general bastante normalizada ante circunstancias notoriamente adversas. Claramente, hay sectores que todavía no se recuperan y otros como los vinculados a los rubros Servicios y Turismo cuyas perspectivas pueden llegar a ser aún peores. Es a ellos a quienes más tenemos que apoyar.
La prioridad fue y será mitigar los efectos de la pandemia. Declarada la emergencia sanitaria, lo primero que hicimos fue impulsar medidas para apoyar la salud de nuestro equipo y a la sociedad. Diseñamos planes para dar alivio a nuestros clientes y propuestas para favorecer el rebote de la economía, lo que nos llevó a ser uno de los bancos con mayor crecimiento de cuota en créditos de todo el sistema. El SiGa Emergencia ha sido una herramienta muy útil y que nos fue familiar. A ello se suma que la pandemia nos encontró en el mejor escenario para enfrentar algo que no esperábamos con destacada solvencia, liquidez y sanidad crediticia. Ahora estamos dispuestos a potenciar el alcance delSiGa Plus y SiGa Turismo.
El sistema financiero uruguayo está muy sólido, bien capitalizado y con buena liquidez. Por eso hemos insistido, desde el discurso y las acciones, en ser parte de la solución, no del problema.
Santander enfrenta nuevos desafíos año tras año, pero somos conscientes de que el 2021 será muy particular. El año próximo los retos serán muchos y en diferente niveles. No obstante, como principal banco privado del país, tenemos claro que nuestro objetivo es profundizar el liderazgo, estar más cerca de nuestros clientes y eso significa brindar más y nuevas herramientas, productos, servicios y un asesoramiento acorde para contribuir al desarrollo y la satisfacción deseada. No concebimos otro banco ni otra forma de llevar adelante nuestra actividad que no sea esa.
La digitalización sigue siendo pilar de acción. En ese camino estamos, claro está, sin perder la esencia: la cercanía y confianza que buscamos a la hora de entablar diálogo y ofrecer servicio a nuestro cliente.
En medio del contexto del que hablamos, ¿qué líneas de negocio ve que pueden mostrar mayor dinamismo para el negocio del banco?
Hoy estamos enfocados en sumar, en ayudar a reducir el impacto financiero y económico que provocó el parate de la actividad, consultando y apoyando segmento a segmento, cliente a cliente.
Al principio anunciamos una batería de medidas que incluyó el aplazamiento de pagos de créditos, garantías crediticias para las empresas, facilidades para las vinculadas a la salud y beneficios para los clientes Personas.
Hemos redoblado esfuerzos para acompañarlos en este difícil momento, con créditos, reestructuraciones y otras herramientas financieras. Claramente no todos demandan o necesitan lo mismo, por eso dedicamos mucho esfuerzo a contactar a muchos clientes para personalizar soluciones y, más que nada, hacer sentir que cuentan con nosotros. Nuestra vocación para ayudar al desarrollo de las personas y a las pymes nos ha llevado ser el banco privado que ha tenido más share dentro de todo el monto de SiGa del Uruguay. Nuestra participación es cercana al 30%, cuota que consolida nuestro liderazgo entre los bancos privados desde la implementación del sistema.
Por otra parte, estamos convencidos de que la producción agropecuaria es uno de los sectores clave para la recuperación económica del país. Por eso, ratificamos y potenciamos las propuestas en el fideicomiso financiero Ganadería Tres Millones, un crédito rural que permite utilizar el ganado como garantía de préstamos, y así brindarles a los productores agropecuarios una herramienta más de valor.
Uruguay ha comprobado su fortaleza institucional y social en un mundo que se ha convulsionado, y esto ha pasado a ser un gran activo para el país que es muy valorado por quienes buscan inversiones seguras y confiables.
Por último, tenemos que hablar de la educación superior. Becas, emprendimiento y empleo, los tres pilares que abordamos a través de Santander Universidades. Los protagonistas e impulsores del mañana saben que cuentan con nosotros.
¿Cuáles son las fortalezas que tiene el sector bancario en este momento tan complicado del mundo, con impacto en todas las actividades?
El sistema financiero uruguayo no solo está sólido, sino que es uno de los más solventes del mundo. La digitalización ha sido uno de los pilares en estos meses de confinamiento. En Santander, además de la necesaria y vital atención presencial, contamos con canales de comunicación y una banca digital que permite a los clientes acceder a todos los servicios y productos del banco, sin la necesidad de trasladarse a una sucursal. Eso permitió que el sistema bancario siguiera funcionando con normalidad durante los meses más complejos de la pandemia, fomentar la transaccionalidad digital y acercar soluciones pese al distanciamiento social. Los bancos no hemos visto alterada nuestra operatividad y es algo a destacar y reconocer para las personas que aquí trabajan. Es motivo de orgullo y aliento para lo que viene: nuestro equipo está comprometido.
En contrapartida, ¿ve algún tipo de amenaza en el horizonte para el sector financiero?
Este 2020 fue un año de gran incertidumbre, pero las instituciones financieras demostramos que estuvimos a la altura de las circunstancias. La responsabilidad fue un factor esencial. Teníamos que ofrecer condiciones, planes y propuestas que los clientes estuvieran dispuestos a afrontar en el futuro. Por eso, insistimos en su momento, el delicado equilibrio que teníamos que cumplir para, en vez de ser el problema, convertirnos en solución. El sector se mostró sólido y supo dar las respuestas necesarias, siendo los bancos actores fundamentales en el correcto status económico en el que se encuentra el país.
En líneas generales, ¿hacia dónde tiende ahora el negocio bancario, ante este escenario de nueva normalidad? ¿Hay un nuevo modelo de negocio?
La pandemia nos llevó a acelerar los procesos de la banca digital, sin descuidar la atención presencial, que en nuestro caso sigue registrando nuevos hitos: la primera sucursal móvil del país -ya operativa en Paso de los Toros- y la reciente apertura de una nueva sucursal en Car One.
Estamos convencidos de que la confianza y la relación interpersonal seguirán siendo un activo indispensable en el negocio bancario más allá de modelos digitales y de atención remota que son indiscutibles.
Igualmente, la situación sanitaria llevó a que los usuarios probaran nuevos métodos de relacionamiento con las operativas financieras y la profundización de actividades digitales fue una realidad incluso para aquellos que se negaban a formar parte de esta.
Creo que el negocio bancario apunta hacia allí, con una digitalización cada vez más potente y relevante, derivando en que los usuarios puedan acceder a las herramientas y servicios de una forma remota y rápida, permitiendo también un adecuado control de sus finanzas y el asesoramiento necesario. Los bancos estamos adaptándonos a la nueva realidad, acompasando las exigencias regulatorias; por eso, entendemos que las reglas de juego tienen que ser las mismas para todos.
¿Algo más para agregar?
Mi reconocimiento público a las personas de nuestro equipo que trabajan en la red de sucursales. Desde el primer día de la pandemia en el mes de marzo pasado, nunca dejaron de asistir a sus puestos de trabajo y de cumplir sus funciones en pro de apoyar la continuidad de la cadena de pagos y la normalización de la actividad económica y social del país. Han hecho y siguen haciendo un gran trabajo.
